La Evolución de la Gran Pregunta
Desde la niñez se nos interpela con "¿Qué quieres ser cuando seas adulto?". Esta pregunta, inicialmente inocente y ligada a oficios o roles visibles (bombero, astronauta, doctor), es en realidad el primer atisbo de una gran búsqueda vital.
A medida que crecemos, la pregunta madura y se transforma en: "¿Quién quiero ser, en todos los aspectos de mi vida?"
El adulto no solo busca un título laboral, sino una arquitectura de vida que sostenga:
Estabilidad Económica: No solo ingresos, sino la sensación de seguridad y autonomía financiera.
Estabilidad Social: Un lugar de valor y conexión en la comunidad, a través de la profesión o el rol social.
Estabilidad Familiar: Crear o pertenecer a un entorno donde se pueda crecer y contribuir.
Estabilidad Afectiva: La capacidad de amar, ser amado y mantener un equilibrio emocional.
La Autonomía de la Respuesta: "La Respuesta Somos Nosotros"
El mundo nos da las preguntas (¿qué estudiar? ¿dónde trabajar? ¿cuándo casarse?), pero la respuesta solo puede nacer del interior.
Decir que "la respuesta a tus preguntas somos nosotros" significa que:
Somos el Contexto y el Contenido: No se trata de encontrar un trabajo, sino de definir quién somos (nuestros valores, pasiones y talentos) y luego proyectar eso en el mundo (trabajo, relaciones, contribución). La estabilidad externa solo se logra con una profunda estabilidad interna.
Somos el Propósito: El sentido de la vida no es algo que se encuentra fuera, sino que se construye a través de las decisiones que tomamos en coherencia con nuestra identidad. Si el rol que elegimos (laboral o personal) no resuena con nuestros valores, la estabilidad será superficial y frágil.
Somos el Motor de Cambio: Solo a través del autoconocimiento y la autodeterminación podemos trazar un camino que satisfaga todas esas "estabilidades" que mencionas.
En definitiva, la pregunta de la infancia "¿Qué quieres ser?" es un espejismo. La verdadera búsqueda del adulto es "¿Quién soy y cómo puedo alinear mi ser con un hacer que me dé sentido y estabilidad?". La respuesta a esta búsqueda existencial no está en las instituciones ni en los títulos, sino en la responsabilidad de la propia identidad. La respuesta a tus preguntas somos, ineludiblemente, tú mismo.
Escribeme:
ventatitulo@gmail.com