Entre las causas más reconocidas de la adicción a las redes sociales se encuentran la baja autoestima, la insatisfacción personal, la depresión o hiperactividad e, incluso, la falta de afecto, carencia que con frecuencia los adolescentes tratan de llenar con los famosos likes.
En realidad creo que ser adicto a algo es que nuestra afición por esa cosa nos llegue a producir un problema en nuestra vida y que no seamos capaces de cambiarla.
Esa consecuencia negativa y la incapacidad de superarla es lo que diferencia realmente una simple afición de una adicción. Por ejemplo puedes ser un aficionado al golf, y disfrutar jugando cuando tienes tiempo. Pero en el momento en que empiezas a dejar de ir a trabajar para jugar una partida ( y créeme que a muchos les pasa) entonces se ha convertido en una adicción. Cuando llega ese momento el cambio es muy complicado, porque ese hábito se ha introducido de tal manera en nuestro cerebro que no nos podemos deshacer de el
Ansiedad por tener siempre cerca el smartphone.
Sentir pánico cuando se está terminando la batería del teléfono, o bien, cuando no puede revisarse el dispositivo.
Dolor de oído, cabeza, cuello y/o extremidades superiores.
Entrar varias veces al día a las redes sociales para revisar si se tienen notificaciones, así como estrés cuando no se postea algo durante varias horas.
Alteraciones en los horarios de comida y del sueño.
Desesperación cuando no se cuenta con una señal WiFi para acceder a internet.
Descuidar las relaciones personales.
Si tienes mas de 10 años lo recomendado es que uses el celular no mas de 6 horas al día.
Salir con un amigo/a o alguna persona para despejarte.
Evitar las redes.
Puedes hacer manualidades o jugar un juego de mesa para no tener la necesidad de todo el tiempo estar.
No usar el celular en reuniones ya sean con amigos o la familia.
No utilizarlo antes de dormir ni una hora después de despertarse.
Ser sociable pero con personas no por una pantalla.
En mi opinión personal las adicción a las redes sociales no es un tema que se trata mucho, pero deberían tratarlo ya que es un tema muy importante, porque cada día aumentan las personas que están pendientes a las redes sociales como Instagram, Facebook, Tik Tok, Twitter, etc. Es un tema del cual no hay muchas notas de diario. Solo hay unas propagandas que te dicen no uses el celular al cruzar la calle y cosas así. Hay páginas de diario que te ayudan con información para que estes al tanto de la situación pero algunas veces hay personas que necesitan de un profesional.
Esta es una propaganda que se realizo para concientizar a las personas de lo que puede ocurrir.
Fue realizada por alumnos del C.U.C.
1. Admite que tienes un problema. Es el famoso primer paso de los Alcohólicos Anónimos y lo es por algo. Sin admitir que existe un problema no hay ninguna posibilidad de que puedas solucionarlo. Admitir el problema es crear dentro de ti la intención de superarlo. Y esa intención es necesaria para poder conseguir cualquier resultado.
Obviamente en el caso de las redes sociales, las consecuencias no son ( normalmente) tan desastrosas como en el caso del alcohol o de las drogas, pero sin embargo sí pueden tener un efecto bastante negativo en otras actividades y en general en tu productividad.
2. Lleva un control del tiempo que estás en cada red social. Puedes hacerlo manualmente pero la verdad es extremadamente pesado, así que lo ideal es que uses una aplicación como webtime tracker para chrome que te dice automáticamente cuanto tiempo pasas en cada página.
3. Analiza el valor que te aportan las redes sociales en tu vida. ¿Te aporta conexiones satisfactorias realmente con otras personas?,¿aprendes cosas que te resultan interesantes?,¿te sirve para promocionar tu negocio o tu blog? ¿te da tema de conversación para la oficina?.
Una cuestión importante es que reflexiones acerca de la necesidad de las redes sociales para fomentar tu autoestima. Es importante que tu autoestima no esté en manos de la recepción que tengas para los demás porque si no, nunca tendrás suficiente aprobación como para saciar tu hambre.
4. Escribe en una hoja lo que podrías conseguir hacer con tu vida si dedicaras el tiempo que estás en redes sociales a otra actividad diferente, como leer, estar en persona con los amigos, meditar, hacer ejercicio, o cualquier otra cosa.
5. Establece un determinado momento del día en el que entrarás en las redes sociales. Fuera de ese momento no entres. Si te parece demasiado extremo puedes probar con dos momentos, uno por la mañana y otro por la noche, pero lo importante, es que fuera de esos momentos no estés asomándote a ver que ocurre. Al entrar sólo cuando tú has planeado estás mandando el mensaje a tu cerebro de que tú eres quien tiene el poder.
Cuando pase el tiempo asignado, no te limites a no usar la red social. Cierra la pestaña. Muerto el perro se acabó la rabia, que se suele decir.
6. Deja algún día o algún periodo del año libre de las redes sociales. Puede ser que te digas a ti mismo que el sábado es el día libre de redes sociales, o que durante tus vacaciones en el Caribe no vas a estar mirando si alguien le ha dado me gusta a tu última foto. Al igual que para establecer un hábito es un problema romper la rutina, para acabar con un hábito es una ventaja salirte de la rutina en algunos momentos. El establecer períodos libres de redes sociales opera como una especie de cortafuegos en un bosque, evitando que la adicción se consolide.
7. Elimina en las diversas redes sociales las notificaciones que se te envían cada vez que una persona dice que le gusta algo que has compartido o cada vez que te ha llegado un mensaje. Puede que te guste leer esas notificaciones ( no negaré que a mí me gusta) pero la realidad es que son un cebo con un anzuelo debajo que te engancha y te hace entrar en la red social.
8. Cada vez que tengas la tentación de entrar intenta mirar ese pensamiento, darte cuenta de que es una tentación y simplemente déjalo pasar.
9. Rompe la conexión creada en tu cabeza entre ver el aviso de que hay un mensaje para ti y entrar a la red social. Por ejemplo al entrar en la búsqueda de Google me aparece el aviso de que tengo varios mensajes. Hay creada en mi cabeza una instrucción imaginaria que dice: " Si número de mensaje= color rojo entonces ir a la red social". Esa instrucción se ha reforzado por el uso, así que entreno abriendo el buscador de Google, viendo el número en rojo y cerrando la página. Así varias veces. Eso debilita en mi cabeza la conexión entre disparador y acción.
10. Puedes llegar a bloquear un sitio web mediante algunas aplicaciones pero eso debería ser la última opción. Sería el equivalente a las personas que piden a un casino que no les dejen entrar. No es la solución ideal pero para casos muy radicales quizá es la mejor posible.