La escasez de talento en el mundo ha alcanzado niveles históricos: 77% de las empresas a nivel global reportan dificultades para encontrar perfiles con las habilidades adecuadas, y en Latinoamérica esta cifra escala al 82% (ManpowerGroup, 2023). Ante este panorama, la selección por competencia emerge como una estrategia clave para identificar, atraer y retener al mejor talento.
La selección por competencia es un método de contratación centrado en evaluar las habilidades, actitudes y comportamientos que un candidato necesita para desempeñarse con éxito en un rol específico. A diferencia del modelo tradicional, que se enfoca en la experiencia laboral y los títulos académicos, este enfoque pone énfasis en la capacidad de adaptación, liderazgo, resolución de problemas, inteligencia emocional y valores alineados a la cultura organizacional.
✍️ Dato clave: Según McKinsey, las empresas que priorizan competencias en sus procesos de selección aumentan su productividad en un 16% y retienen más talento (20% más que el promedio).
Criterios de evaluación: Currículum y experiencia previa - Habilidades conductuales y actitudinales
Tipo de entrevista: No estructurada - Estructurada con preguntas situacionales
Herramientas: Entrevistas convencionales - Pruebas psicométricas, Assessment Centers
Alineación con cultura: Baja - Alta
Impacto en el rendimiento: Difícil de predecir Alta correlación con éxito laboral
Mejor ajuste al cargo: Se seleccionan perfiles más alineados al rol, lo que reduce la rotación.
Mayor rendimiento: Empleados con competencias bien definidas alcanzan sus objetivos más rápido.
Adaptación cultural: Se identifican valores compatibles con la filosofía de la empresa.
Proceso más objetivo: Elimina sesgos al centrarse en evidencias de comportamiento.
Automatización con HR Tech: Facilita la gestión del proceso a través de software especializado como Softland HCM, BambooHR o SAP SuccessFactors.
Establece habilidades técnicas, blandas y valores deseados para cada rol. Por ejemplo: liderazgo, trabajo en equipo, proactividad.
Difunde la oferta laboral en canales adecuados y asegúrate de destacar las competencias requeridas.
Incluye entrevistas estructuradas por competencias, simulaciones, y pruebas psicométricas. Ejemplo de preguntas:
“Cuéntame de una situación en la que resolviste un conflicto en tu equipo.”
“¿Cómo has manejado situaciones de presión laboral extrema?”
Un onboarding estructurado permite verificar que las competencias evaluadas se reflejen en el desempeño inicial.
🧠 Según Gallup, un onboarding efectivo mejora en un 70% la retención en los primeros 6 meses.
HR Analytics: facilita la evaluación continua de desempeño basada en competencias.
Experiencia del empleado (EX): mejora la fidelización de talento.
Trabajo híbrido: exige nuevas habilidades de autogestión y comunicación.
Upskilling & Reskilling: obliga a evaluar potencial de aprendizaje más que experiencia previa.
Según el World Economic Forum, el 50% de los trabajadores necesitarán adquirir nuevas habilidades para 2025. El área de RR.HH. debe estar preparada para identificar este potencial desde el proceso de selección.
María José Gutiérrez, gerente de talento en una multinacional colombiana, señala:
“Implementar este enfoque nos permitió reducir la rotación de personal en un 30% y duplicar la efectividad en la incorporación de perfiles clave. Evaluar lo que una persona es capaz de hacer, más allá de lo que dice en su CV, marcó la diferencia”.
Es una técnica estructurada donde se formulan preguntas basadas en situaciones reales que evalúan comportamientos pasados del candidato, vinculados con las competencias requeridas para el puesto.
Existen tres tipos principales: técnicas (manejo de herramientas), transversales (trabajo en equipo, adaptabilidad) y específicas (orientación al cliente, liderazgo).
Sí, pero el uso de herramientas como Softland o SAP acelera y profesionaliza el proceso, permitiendo análisis predictivos y reducción de sesgos.
No. PYMEs y startups también pueden implementarla con entrevistas bien diseñadas y tests conductuales económicos.
Usa simulaciones laborales, entrevistas estructuradas y referencias. La clave está en observar cómo ha actuado en situaciones reales, no solo lo que dice que haría.
En un entorno laboral cada vez más volátil y competitivo, la selección por competencia es más que una moda: es una herramienta estratégica que permite contratar talento alineado, adaptable y de alto rendimiento. Las empresas que integren este enfoque en su cultura de RR.HH. estarán mejor preparadas para enfrentar los retos del futuro.