El territorio es colorado

Por:  Camilo Filártiga Callizo - Universidad Católica de Asunción (@CamiloFilartiga) y Fernanda Ojeda - Universidad Católica de Asunción

Fecha: 6 de junio de 2023

Las elecciones generales del 30 de abril han confirmado el favoritismo de la Asociación Nacional Republicana (ANR), más conocida como Partido Colorado. Se disputaron los cargos de presidencia y vicepresidencia y senaduría a nivel nacional, mientras que los puestos de gobernación, diputación nacional y concejalía departamental se hicieron a nivel departamental.

 

Los resultados a nivel de gobernaciones y juntas departamentales muestran una notoria dominancia del partido oficialista sobre sus demás competidores. Este resultado confirma la hegemonía de la ANR en el territorio que ha venido mostrando durante todo el periodo democrático.

 

Si bien es cierto que en la mayoría de los departamentos del país se han vivido procesos de alternancia política, no se puede ocultar que, tras cada proceso electoral, el Partido Colorado siempre ha controlado más de la mitad de las gobernaciones e incluso hasta 80 % de las mismas, como ocurrió en 1998 (Cerna y Solís, 2017).

 

De las ocho elecciones celebradas en democracia, siete han sido ganadas por dicho partido, siendo la diferencia del pasado domingo 30 de abril, la más amplia de todas las obtenidas en democracia y permitiendo al coloradismo mantener una larga hegemonía en el poder ejecutivo desde 1947, con un breve paréntesis entre 2008 y 2013 (Nickson, 2023).

Actores en competencia

En las recientes elecciones, los colorados ganaron 15 de las 17 gobernaciones, obteniendo, además, mayoría propia a nivel de juntas departamentales. De los 257 cargos a concejales departamentales que se disputaron, 156 quedaron en manos del Partido Colorado, lo que representa a nivel país que el 62 % de concejalías electas pertenecen al coloradismo. El oficialismo ha obtenido además la mayoría en la Cámara de Diputados con 49 de 80 bancas.

El Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) se mantiene como la segunda fuerza política a nivel subnacional, aunque diluido en lo que fueron coaliciones o alianzas con otros partidos y movimientos minoritarios, bajo cuyas figuras ganó las gobernaciones de Itapúa y Central y como principal oposición en juntas departamentales de todo el país, salvo Alto Paraná, donde queda por detrás del movimiento Yo Creo. Por otro lado, ha perdido gobernaciones tradicionalmente liberales como Concepción, por escasos 42 votos, Cordillera y Amambay.

Tabla 1. Resultados de elecciones a gobernador/a departamental en Paraguay (2023)

Fuente: elaboración propia
[1] César Sosa
[2] Juan Silvino Acosta Benítez

Sistema electoral y resultados en órganos plurinominales

Para estas elecciones generales, la novedad del sistema electoral fue la implementación, por primera vez en elecciones nacionales y departamentales, del desbloqueo de listas con voto preferente y la inclusión del uso de máquinas electrónicas de votación.  Como ya se había notado en las elecciones municipales del 2021, el nuevo sistema incrementó notoriamente los costos de campaña potenciando las capacidades de partidos y candidaturas con estructura y recursos y la personalización de las campañas.

El salto del Partido Colorado es notorio, alcanzó un total de 1.317.463 votos para la cámara de senadores, obteniendo 23 de los 45 escaños en total, mientras que en la cámara de diputados logró un total de 49 de los 80 escaños en total, ganando en ambas cámaras cómodas mayorías y dando un salto exponencial en caudal de votos en comparación a las elecciones anteriores [1]. A nivel de gobernaciones y juntas departamentales superaron los 1.200.000 votos [2].

El tercer espacio en el territorio

Las terceras fuerzas como Partido Patria Querida (PPQ) y Frente Guasú, han tenido un pobre desempeño a nivel territorial y nacional. En este sentido, en la Cámara de Diputados, el PPQ reduce su participación de tres a un diputado (por capital), y de tres a un representante en la Cámara de Senadores. A nivel de juntas departamentales tendrán representación propia en Central y Boquerón con un representante en cada caso. 

El Frente Guazú, tercera fuerza en el Senado con ocho bancas en este período, reduce su participación a una banca, con la elección de Esperanza Martínez, quedando sin representación efectiva a nivel de juntas departamentales en todo el país, habiendo presentado una sola candidatura a la Gobernación en el Departamento de Boquerón.

El fenómeno de los movimientos y partidos desde Alto Paraná. Cruzada Nacional y Yo creo

El Partido Cruzada Nacional (PCN), liderado por Paraguayo Cubas, obtuvo cuatro bancas en Diputados y cinco en el Senado y el Movimiento Yo creo liderado por Miguel Prieto, intendente de Ciudad del Este, se quedó con dos bancas en Diputados y una en el Senado.

A nivel de gobernaciones, Cruzada Nacional presentó candidaturas en tres departamentos del país: Guairá, Itapuá y Alto Paraná, constituyéndose en los dos primeros casos en la tercera fuerza política con más votos y en el último caso quedando por detrás de Yo Creo y de la Concertación opositora, obteniendo 42.510 votos. En cuanto a juntas departamentales, PCN tendrá representación efectiva en los departamentos de Alto Paraná e Itapúa. Los diputados electos por Cruzada Nacional representan a los departamentos de Alto Paraná y Central. Su base electoral y política está en el este del país, coincidente con Yo Creo.

El desempeño electoral del PCN a nivel subnacional se conecta con un muy buen desempeño a niveles nacionales, obteniendo 331.945 votos para el Senado ubicándose por detrás de la Alianza Senadores por la Patria que contaba con la estructura del principal partido de oposición, el PLRA, aliado a otros partidos minoritarios. A nivel presidencial, Paraguayo Cubas, obtuvo 692.429 votos.

Los resultados obtenidos por este partido han sido una sorpresa, logrando capitalizar de forma efectiva el hastío ciudadano con las formas políticas tradicionales y, sobre todo, con la insatisfacción generalizada con la democracia. El PCN se consolida tras las elecciones de abril como la tercera fuerza política desplazando, de momento, al Frente Guasú. Cubas ganó protagonismo con discurso anti sistema, acciones enérgicas y renegando de las formas tradicionales de la democracia.

Conclusiones

A diferencia de lo que se observa en el ámbito nacional - en donde se ha visto el desplazamiento de un sistema de partido hegemónico o predominante hacia otro de pluralismo moderado en el que otras fuerzas políticas han alcanzado peso y relevancia -, en la arena departamental se aprecia una tendencia hacia el bipartidismo en el que los partidos tradicionales concentran la gran mayoría de las preferencias electorales (Cerna y Solís, 2017).

Esta tendencia luego de las elecciones generales se mantiene; sin embargo, se están dando fenómenos locales y regionales con partidos y movimientos políticos independientes que, en coalición, adquieren protagonismo en regiones del país como Alto Paraná e Itapuá.

En estos territorios irrumpen liderazgos alternativos a los tradicionales partidarios que disputan electoralmente y son competitivos a los partidos tradicionales. Queda por seguir monitoreando estos procesos de consolidación, o no, de gobiernos de coalición opositora, en estos territorios, a fin de identificar si esta tendencia puede ampliarse hacia un escenario de mayor pluralismo partidario en los niveles subnacionales de gobierno. Por el momento, y con los resultados a la vista, parece todavía muy lejano.



[1] El partido Colorado obtuvo 766.841 votos para el Senado y 927.183 votos para Diputado en las pasadas elecciones del 2018.

[2] Ver Acuerdo y sentencia No. 15/2023 del Tribunal Superior de Justicia Electoral



Camilo Filártiga Callizo es Profesor e investigador de la Universidad Católica de Asunción y Fernanda Ojeda es politóloga de la Universidad Católica de Asunción.