¿La sacudida también fue local? Explorando las dinámicas subnacionales de las elecciones panameñas de 2024


Por: Juan Diego Alvarado (Universidad de Maryland, Estados Unidos)

El pasado 5 de mayo se realizaron en Panamá las séptimas elecciones generales desde la transición democrática del país a inicios de la década de 1990, las más convulsas de su historia reciente. En una sacudida sin precedentes, los principales actores del sistema de partidos fueron profundamente rechazados por las y los votantes. A nivel nacional, José Raúl Mulino (Realizando Metas, RM) fue elegido presidente con 34.2% del voto, seguido por Ricardo Lombana (Otro Camino, MOCA) con 24.6%. Dos partidos nuevos (RM y MOCA) concentraron más del 50% del voto, mientras que los tres partidos tradicionales (Partido Revolucionario Democrático, Partido Panameñista, Cambio Democrático) en el centro del sistema de partidos panameño se desplomaron, sin que ninguno haya alcanzado más del 7%. En los comicios legislativos, estos partidos perdieron enormes cuotas de poder, tan solo 12 de 60 diputadas y diputados que buscaban la reelección la alcanzaron, y un bloque de candidaturas independientes coaligadas bajo el nombre de Coalición Vamos irrumpió como el principal bloque parlamentario. 

Aunque todavía es muy temprano para hablar de colapso o derrumbe del sistema de partidos, las reverberaciones de esta sacudida electoral se extendieron al nivel subnacional, en las elecciones de alcaldes y representantes de corregimiento. Dicho esto, los resultados locales revelan rupturas y continuidades que nos ayudan a entender lo que pasó a nivel nacional. Por un lado, nuevas fuerzas conquistaron las alcaldías y los concejos municipales de los distritos más poblados en el área metropolitana, rompiendo así la hegemonía subnacional de los partidos tradicionales que se valían de maquinarias clientelares. Sin embargo, el partido oficialista, el Partido Revolucionario Democrático (PRD) se ha mantenido como la fuerza de mayor cobertura nacional en gobiernos locales. 


Sistema electoral panameño (en lógica subnacional)

El sistema político concibe cierto grado de descentralización pero Panamá es un estado firmemente unitario en su estructura. La división administrativo-política del país está compuesta de provincias y comarcas indígenas, que a su vez están divididas en unidades municipales llamadas distritos, los cuales, por su parte, anidan unidades sub-municipales llamadas corregimientos. Tanto alcaldes de distrito como representantes de corregimiento, funcionarios ejecutivos locales, son elegidos por mayoría simple. En cada provincia el Ejecutivo nombra libremente a un gobernador o gobernadora, quien le representa en esa circunscripción. Los representantes de corregimiento de la respectiva provincia integran un Consejo Provincial que actúa como órgano de consulta del Gobernador de la Provincia, autoridades provinciales y autoridades nacionales.

Como las y los gobernadores de provincia son designados con funciones ceremoniales, las y los alcaldes de distritos y las y los representantes de corregimiento protagonizan la política subnacional de Panamá. 

Para estas elecciones, las y los panameños votaron por alcalde en los 81 distritos y por representantes en los 701 corregimientos. Los alcaldes y alcaldesas son las figuras elegidas democráticamente para liderar el Municipio, cuyas funciones son, entre otras, ordenar el desarrollo de sus respectivos territorios, promover la participación ciudadana y el mejoramiento social y cultural de sus habitantes. Los representantes dirigen un cuerpo administrativo comunitario llamado junta comunal y están a cargo de “promover el desarrollo social, económico, político y cultural y para velar por la solución de sus problemas”. En este sentido, los representantes son la primera línea de interacción entre el gobierno y la población. Sus funciones ejecutivas son poco claras, pero la Constitución establece que los representantes también son miembros del Concejo Municipal, un cuerpo legislativo municipal que controla y revisa las acciones de las y los alcaldes. El Concejo Municipal es presidido por el o la alcaldesa y se conforma por un mínimo de cinco de las y los representantes de corregimiento de cada distrito. El Alcalde designa a las personas necesarias para llegar a ese mínimo con la investidura de Concejales. Durante las últimas décadas, Panamá ha intentado seguir un proceso de descentralización en el que se traspasan competencias y recursos a los gobiernos locales en Panamá. Sin embargo, datos del Barómetro de las Américas y del PNUD muestran que la ciudadanía no ve en los gobiernos locales la solución a sus problemas y necesidades básicas, recurriendo en mayor medida al Estado central.


Resultados subnacionales

Si bien los resultados presidenciales estuvieron claros hacia las 8:30 de la noche del día de la elección, los resultados locales tardaron más tiempo en revelarse. Una vez que todos los votos fueron escrutados y el polvo se asentó, podemos ver en qué medida el desplome de los partidos tradicionales se refleja a nivel subnacional. 

El voto del rechazo hacia los partidos tradicionales arrasó con los distritos más poblados y con mayor presupuesto. En el distrito capital de Panamá, el alcalde de turno, José Luis Fábrega del partido oficialista PRD, superó apenas el 7.0% del voto. En su lugar, ganó el empresario e influencer Mayer Mizrachi con el 32.5%, quien originalmente ofreció su candidatura a distintos partidos para que lo postularan, a cambio de independencia en la toma de decisiones. Mizrachi finalmente corrió por el Partido Popular pero es una figura que ha conseguido enorme popularidad por medio de redes sociales y controversiales intervenciones comunitarias, con un discurso de innovación y apelación al solucionismo tecnológico similar a Nayib Bukele de El Salvador. El distrito de Panamá tiene 26 corregimientos y ninguna fuerza se acerca a la mayoría en el Concejo Municipal. Además ninguno de los 26 elegidos ninguno forma parte del partido que lo postuló, por lo que la gobernabilidad municipal es incierta.

En San Miguelito, otro de los centros (sub)urbanos más poblados y económicamente desiguales del país, Irma Hernández, candidata independiente de la Coalición Vamos, se impuso a una oferta electoral de actores tradicionales con casi el 50% de los votos. Hernández corrió para el puesto de alcaldesa junto a las candidaturas a representantes de los nueve corregimientos que componen el distrito, de los cuales resultaron ganadores cuatro de Vamos.  A pesar de este resultado de Hernández, una de las grandes victorias de la jornada, la subrepresentación de las mujeres en la política subnacional es grave. La abrumadora mayoría de las candidaturas y las personas que ganaron el cargo en la política local en Panamá son hombres. Para esta última elección de 2024, 14.8% de alcaldesas fueron mujeres, mientras que de 701 representantes, tan solo el 11.5% fueron mujeres.

En términos partidarios, las alcaldías durante el periodo 2019-2024 estaban concentradas entre los tres partidos principales, con casi la mitad concentrada por el PRD. Sin embargo esta última elección fraccionó la repartición de poder municipal en Panamá. Los tres partidos tradicionales perdieron importantes alcaldías, en particular el partido Cambio Democrático y el Partido Panameñista, quedando solo con dos y 11 cargos ejecutivos distritales, respectivamente. En cambio, los partidos nuevos/alternativos y las candidaturas independientes (de libre postulación) obtuvieron cinco alcaldías, incluyendo algunas de las más pobladas como Panamá, Arraiján, Colón y San Miguelito (Tabla 1).  

Tabla 1. Distribución de las Alcaldías en 2019 y 2024

Fuente: Elaboración propia con resultados electorales de 2019 y resultados extraoficiales del servicio de Transmisión Extraoficial de Resultados del Tribunal Electoral

El número de distritos se ha mantenido estable en los últimos 30 años pero la cantidad de corregimientos (originalmente 505) ha aumentado con cada elección desde 1994. Entre 1994 y 2024 se crearon 190 nuevos corregimientos (Tabla 2), con representantes, juntas comunales y presupuestos correspondientes. Este crecimiento ha sido gradual, y en los últimos años ha estado en el centro de fuertes debates sobre el manejo presupuestario para política partidaria con los fondos de descentralización. No obstante, este proceso no le garantizó el éxito electoral al PRD. Entre 2019 y 2024 se formaron 22 nuevos corregimientos, entre los cuales solo cuatro eligieron representantes del partido de gobierno, el PRD. En la provincia de Bocas del Toro, que fue el epicentro de esta proliferación, el oficialista PRD tan solo pudo conseguir un representante en 11 corregimientos nuevos. Otro de los grandes escándalos políticos de la actual administración fueron las acusaciones de una “descentralización paralela” mediante la cual el partido oficialista presuntamente desvió fondos a juntas comunales de corregimientos controlados por alcaldes perredistas para alimentar sus oportunidades de reelección en 2024. 

Tabla 2. Crecimiento en el número de corregimientos entre 1994 y 2024

Fuente: Elaboración propia con resultados electorales de 2019 y resultados extraoficiales del servicio de Transmisión Extraoficial de Resultados del Tribunal Electoral

El sistema electoral de los corregimientos históricamente ha favorecido desproporcionadamente al PRD porque, al tratarse de sistemas de mayoría simple, beneficia a los partidos que han sacado más votos. La tabla 3 muestra el porcentaje de votos y de cargos de representantes de corregimiento para cada partido en la elección de 2024. Desde por lo menos la década de 2000, el PRD ha conseguido más de la mitad de las juntas comunales del país con tan solo un tercio del voto por elegirse por mayoría simple (Tabla 4). A pesar del descalabro electoral, el PRD ha mantenido el 40.6% de las juntas comunales del país en 2024, aunque se necesitará un análisis más desgranado de los resultados para constatar cómo esa proporción se traduce en mayorías en los Concejos Municipales. Aun si nuevos actores irrumpieron más claramente en alcaldías y corregimientos más visibles, en la distribución nacional quien capturó un número importante de juntas comunales fue el partido Realizando Metas, proyecto personalista del expresidente Ricardo Martinelli (Tabla 3).

Tabla 3. Porcentajes de corregimientos ganados en elecciones de representantes por cada partido (2024)

Fuente: Elaboración propia con resultados extraoficiales del servicio de Transmisión Extraoficial de Resultados del Tribunal Electoral

Tabla 4. (Des)proporcionalidad de votos a representantes de corregimientos y porcentaje de representantes electos por partido

Fuente: Elaboración propia con resultados electorales publicados por el Tribunal Electoral

Las recientes elecciones en Panamá han marcado un punto de inflexión en la política del país, evidenciando un rechazo sin precedentes hacia los partidos tradicionales y un ascenso significativo de nuevas fuerzas políticas y candidatos independientes. Este cambio se refleja tanto a nivel nacional como subnacional, donde el desplome de los partidos tradicionales ha dado paso a una distribución fragmentada del poder municipal y submunicipal. Todos los partidos tradicionales perdieron fuertes bases locales, pero el PRD mantiene su histórica extensión territorial. Ha habido un recambio enorme en la distribución del poder local: 50 de los 81 municipios del país han cambiado de partido y tan solo quince alcaldes en todo el territorio nacional lograron la elección. Los cuatro distritos más poblados del país, que concentran el 44.6% del electorado nacional, ahora están en manos de actores nuevos, cuya capacidad de gobernanza no está probada. Aunque el panorama político ha experimentado una sacudida, aún queda por analizar en detalle cómo se traducirán estos resultados en la dinámica de los Concejos Municipales y en la gobernabilidad local en los próximos años.