Si tienes un taller, una pequeña empresa, o eres autónomo y utilizas máquinas o herramientas para tu trabajo, seguramente te has topado con esta normativa: el Real Decreto 1215/1997.
¿Pero qué significa? ¿Cómo te afecta? ¿Y qué debes hacer para no meterte en problemas?
No te preocupes, aquí te explico todo de forma clara y sencilla para que sepas exactamente cómo cumplir con esta ley y mantener tu negocio en regla.
Este Real Decreto, aprobado en 1997, es una norma de seguridad laboral. Su nombre completo es:
Real Decreto 1215/1997, de 18 de julio, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud para la utilización por los trabajadores de los equipos de trabajo.
En otras palabras, regula cómo deben ser las herramientas, máquinas e instalaciones que usas tú o tus empleados para trabajar.
¿Su objetivo? Evitar accidentes, proteger la salud y que todo funcione de manera segura.
A todos los que usan equipos de trabajo: ya seas una gran empresa, una pyme, o un autónomo con un taller, esta norma te afecta.
Incluso si solo tienes un empleado, o trabajas solo, pero usas maquinaria como:
Taladros eléctricos
Compresores
Elevadores
Soldadoras
Equipos de corte
Prensas
Entonces, esta ley es para ti.
Según el RD 1215/1997, es cualquier máquina, herramienta, aparato o instalación que se usa durante la jornada laboral.
Ejemplos:
Una radial (amoladora)
Una carretilla elevadora
Una grúa pequeña
Un compresor de aire
Un torno, fresadora, etc.
Incluso si compraste esa máquina hace años, también entra dentro de esta normativa.
Aquí viene lo importante: como empresario o autónomo, debes asegurarte de que tus equipos de trabajo sean seguros y estén en buenas condiciones.
Veamos los pasos clave:
Antes de empezar a usar un equipo por primera vez, hay que hacer una revisión técnica para asegurarse de que es seguro.
Aunque todo funcione bien, debes hacer revisiones cada cierto tiempo, sobre todo si:
Te llevas el equipo a otro lugar.
Lo has reparado o modificado.
Ha estado sin usar mucho tiempo.
Si tu equipo es anterior a 1995, probablemente no tenga marcado CE. En ese caso, debes hacer una adecuación a la normativa actual, instalando protecciones, sistemas de parada, señalización, etc.
Y no es un detalle menor: esto es obligatorio por ley.
Las consecuencias pueden ser graves:
Multas de hasta varios miles de euros.
Responsabilidad civil o penal si hay un accidente.
Paralización de tu actividad.
Problemas con seguros o inspecciones.
Y lo peor: el riesgo de un accidente grave para ti, tus empleados o tus clientes.
Lo más recomendable es contar con una empresa especializada que revise tus máquinas y te diga exactamente qué necesitas.
SIMECAL, por ejemplo, es una empresa experta en seguridad industrial que realiza:
Inspecciones de equipos.
Informes de adecuación al RD 1215/1997.
Planes de revisión y mantenimiento.
Asesoramiento personalizado, incluso para autónomos o microempresas.
Depende del tipo de equipo, del estado en el que esté, y de lo que le falte para cumplir con la ley.
Por eso, lo mejor es pedir un presupuesto personalizado. Muchas veces, se puede hacer la adecuación con pequeñas mejoras o protecciones y por un coste razonable.
Además, recuerda: más caro es no cumplir con la normativa.
El RD 1215/1997 no es solo “otro papel” más. Es una ley que te protege a ti y a tus trabajadores. Si usas maquinaria, esta normativa te obliga a:
✅ Revisar tus equipos.
✅ Hacerles mantenimiento.
✅ Adaptar lo antiguo a la normativa actual.
No necesitas saberlo todo, pero sí rodearte de los profesionales adecuados que te ayuden a cumplir y a estar tranquilo.
¿Tienes dudas sobre si tus máquinas cumplen o no? Contacta con expertos como SIMECAL y evita sustos.