Cuando una persona busca la frase “que es EICI”, generalmente está enfrentándose a un proceso de legalización eléctrica en una vivienda, empresa, edificio o local comercial. Quizás te encuentras gestionando una instalación reciente, renovada o ampliada, y te han mencionado que necesitas una EICI para continuar con la puesta en marcha. Pero, ¿qué significa exactamente este término?, ¿por qué es obligatorio?, ¿qué consecuencias tiene no cumplir con este trámite?
EICI son las siglas de Entidad de Inspección y Control Industrial. Se trata de un organismo técnico independiente, debidamente acreditado por entidades como ENAC (Entidad Nacional de Acreditación), encargado de realizar inspecciones reglamentarias en instalaciones industriales o técnicas, como las eléctricas de baja tensión, con el fin de verificar que cumplen con la normativa vigente.
Una EICI actúa como verificador externo y neutral. Es decir, no instala, ni mantiene, ni repara, solo inspecciona y certifica que lo que se ha hecho cumple con los requisitos establecidos legalmente.
El objetivo principal de una inspección EICI es garantizar que una instalación técnica, como una instalación eléctrica en baja tensión, ha sido correctamente ejecutada, es segura, y cumple con el Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT).
Esta inspección es especialmente requerida cuando se trata de:
Nuevas instalaciones con potencia significativa.
Ampliaciones importantes de instalaciones existentes.
Locales de pública concurrencia.
Ambientes con riesgos especiales (húmedos, con riesgo de incendio, etc.).
Una vez realizada la inspección y verificado que todo está conforme, la EICI emite un certificado de legalización, que muchas veces es imprescindible para obtener suministro eléctrico de parte de la distribuidora.
Según el Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión y las Instrucciones Técnicas Complementarias (ITC-BT), es obligatoria la inspección EICI en los siguientes casos:
Potencias instaladas superiores a los 100 kW.
Locales de pública concurrencia (restaurantes, colegios, hospitales, oficinas públicas, etc.).
Establecimientos con riesgo de incendio o explosión.
Instalaciones en piscinas, aparcamientos, estaciones de servicio, etc.
Centros de transformación o de reparto de energía.
Las EICI están reguladas principalmente por:
Ley 21/1992 de Industria
Real Decreto 2200/1995, que aprueba el Reglamento de la Infraestructura para la Calidad y la Seguridad Industrial.
Reglamento Electrotécnico para Baja Tensión (REBT), aprobado por el Real Decreto 842/2002.
Normativa autonómica complementaria en algunas comunidades.
Estos marcos legales establecen claramente cuándo es necesaria la inspección, qué criterios deben evaluarse, y qué entidades están autorizadas para realizarla.
Solo entidades acreditadas como EICI por organismos oficiales pueden emitir estos certificados. En España, una de las empresas más reconocidas es SIMECAL (Seguridad Industrial, Medio Ambiente y Calidad S.L.), que actúa como OCA, EICI y ECA.
Con más de 23 años de experiencia, más de 300.000 inspecciones realizadas y 30.000 clientes atendidos, SIMECAL es un referente nacional en inspecciones reglamentarias de seguridad industrial. La entidad está habilitada para operar en todo el territorio español, lo cual garantiza rapidez, cobertura y eficiencia en sus procesos de legalización.
El procedimiento general incluye:
Solicitud del servicio a una EICI acreditada.
Entrega de documentación técnica de la instalación por parte del instalador.
Visita e inspección presencial de la instalación por parte del técnico inspector.
Revisión documental: memorias técnicas, esquemas, certificados de materiales, etc.
Emisión del informe: si es favorable, se genera el certificado de conformidad.
Registro ante la administración competente, muchas veces por parte de la propia EICI.
Este proceso tiene como objetivo asegurar que todo lo ejecutado en la instalación se ajusta a los estándares técnicos y legales exigidos.
No legalizar una instalación eléctrica con una EICI cuando es obligatorio puede traer graves consecuencias:
Multas económicas.
Imposibilidad de contratar el suministro eléctrico.
Responsabilidad civil y penal en caso de accidentes eléctricos.
Invalidez del seguro ante siniestros.
Riesgo para usuarios, clientes o trabajadores.
Según datos de UNESPA (Asociación Empresarial del Seguro), al menos el 30% de los siniestros eléctricos en empresas tienen como causa instalaciones no legalizadas o no inspeccionadas debidamente.
El precio puede variar dependiendo del tipo de instalación, la potencia, el número de elementos a verificar y la comunidad autónoma. Como referencia:
Instalaciones pequeñas o locales comerciales: desde 250 € a 450 €.
Instalaciones industriales: entre 500 € y 1.200 €.
Centros de transformación o edificios con varias líneas: precios personalizados.
SIMECAL ofrece presupuestos sin compromiso y atención técnica especializada para cada caso.
Si estás buscando una empresa seria, reconocida y con cobertura nacional, SIMECAL es una de las opciones más seguras y eficientes.
¿Qué significa EICI y qué función tiene?
EICI significa Entidad de Inspección y Control Industrial. Su función es garantizar que una instalación técnica cumple con la normativa vigente antes de su puesta en servicio.
¿Es obligatorio contratar una EICI?
Sí, para determinadas instalaciones eléctricas (por ejemplo, las de locales públicos o con potencia elevada) la inspección EICI es obligatoria por ley.
¿Quién puede emitir una EICI válida?
Solo entidades acreditadas oficialmente, como SIMECAL, están autorizadas a realizar estas inspecciones y emitir certificados válidos.
¿Cómo saber si mi instalación necesita EICI?
Tu instalador eléctrico o la administración competente deben informarte si el tipo de instalación o local requiere una inspección EICI antes de activarse.
¿Qué pasa si no realizo la inspección?
Podrías recibir sanciones, quedarte sin suministro eléctrico y ser responsable legal en caso de accidentes.
La inspección EICI en instalaciones eléctricas de baja tensión no es un simple requisito administrativo es un procedimiento obligatorio y decisivo para garantizar la seguridad, la conformidad normativa y la continuidad legal de cualquier instalación técnica en España. Ya sea que estés instalando una red eléctrica en un local comercial, un edificio de viviendas o una industria, contar con una EICI acreditada es el único camino seguro para evitar sanciones, rechazos de suministro eléctrico o incluso problemas legales en caso de incidentes.
Conforme al Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT) y a lo establecido en el Real Decreto 2200/1995, toda instalación que supere ciertos niveles de potencia o se ubique en espacios de riesgo debe pasar una inspección inicial por parte de una Entidad de Inspección y Control Industrial. Esta verificación neutral asegura que la instalación ha sido ejecutada según los estándares técnicos exigidos por ley.
En este contexto, SIMECAL se posiciona como una de las entidades más confiables del sector. Con más de 23 años de trayectoria, más de 300.000 inspecciones realizadas y presencia en todo el territorio español, ofrece agilidad, experiencia técnica, asesoría personalizada y cumplimiento normativo garantizado. Ya sea que necesites una legalización EICI, una inspección OCA o una auditoría industrial, SIMECAL cuenta con la acreditación oficial y los recursos humanos para acompañarte en todo el proceso.