El pulido de baldosas es un proceso diseñado para restaurar y mejorar la apariencia de superficies de cerámica, porcelana o piedra. Este servicio es ideal para eliminar manchas, rayones y el desgaste visible, devolviendo el brillo y la uniformidad a las baldosas.
1. _Limpieza Preliminar: Se realiza una limpieza profunda para remover suciedad, polvo y residuos, preparando la superficie para el pulido.
2. _Desmanchado: Se utilizan productos específicos para eliminar manchas difíciles y restaurar la superficie antes del pulido.
3. _Pulido: Se emplea maquinaria con discos abrasivos adecuados, que alisan y pulen la superficie, logrando un acabado brillante y uniforme.
4. _Sellado: Después del pulido, se puede aplicar un sellador para proteger las baldosas de futuras manchas y facilitar su limpieza.
5. _Inspección Final: Se revisa el trabajo finalizado para asegurar que se cumplan los estándares de calidad.
El pulido de baldosas no solo mejora la estética del espacio, sino que también prolonga la vida útil de las superficies, haciéndolas más fáciles de mantener y más atractivas visualmente.