Se estima que existen alrededor de 70 mil peruanos con VIH y SIDA que desconocen su condición de salud. En este sentido, es necesario exhortar a la población en general que lleva una vida sexual activa a realizarse la prueba de detección del virus, como primer paso para impulsar la prevención, el tratamiento y la atención de esta enfermedad.
El desconocimiento del estado de una persona en cuanto al VIH es actualmente uno de los principales factores que influyen en la propagación de la epidemia de Sida. Se calcula que en América Latina cerca de 1,7 millones de personas están infectadas con el virus y más de dos terceras partes de ellas no lo saben.
Varios estudios demuestran que la gente se resiste a hacerse la prueba para detectar el VIH por diversas razones, entre ellas el temor a los resultados y a la discriminación, aunque ya debería ser un obstáculo menor dado que ahora se dispone de medicamentos para detener el avance del virus.
Las personas que se someten a las pruebas de detección del virus y se enteran de que son positivas al VIH pueden buscar tratamiento para controlar el avance de la infección. Los que se enteran de que su prueba fue negativa tienen una motivación más para protegerse de la infección por el VIH.
Si una persona se hace la prueba y sabe cuál es su estado en cuanto al VIH está dando el primer paso para la prevención, el tratamiento y la atención de esta enfermedad.