Fundada en el 59 a.C. por Julio César como Florentia, esta hermosa ciudad fascina por la belleza de sus palacios y plazas como la de la Signoria, con el Palazzo Vecchio y la logia de esculturas expuestas como un museo al aire libre. Cuna del Renacimiento gracias al mecenazgo de los Médicis, su patrimonio artístico, que cuenta con pinacotecas como la Galleria degli Uffizi y con museos como el de escultura Bargello o la colección del Palazzo Pitti, es deslumbrante. La iglesia de Santa Croce, convertida en panteón italiano, acoge las tumbas de Miguel Ángel, Dante, Galileo Galilei, Machiavelo y Giaccomo Rossini. Los domingos en la plaza frente a la iglesia se coloca un mercadillo de artesanía, al igual que en la plaza de Santo Espíritu.

El conservatorio Luigi Cherubini, llamado así en recuerdo del compositor y pedagogo florentino, es uno de los más antiguos de Italia, después de los de Roma, Venecia y Nápoles. La principal de las dos sedes ocupa parte de un antiguo convento benedictino de monjas reformado y está situada en pleno centro histórico, junto al Museo de la Academia, en la Plaza de las Bellas Artes. Briccialdi, el inventor de la llave de si bemol para el dedo pulgar de la flauta que lleva su nombre, fue profesor del conservatorio desde 1870 hasta el 1881, año de su muerte.

La permanencia Erasmus ha sido una experiencia muy enriquecedora tanto profesional como personalmente que espero que otros compañeros y compañeras se animen a solicitar así como que más alumnado tenga la oportunidad de disfrutar. Me ha encantado conocer a profesorado italiano y el conservatorio así como practicar el idioma que estudio y disfrutar de la belleza y del arte de esta increíble ciudad. Agradezco a los profesores Giuseppina Ledda y Romolo Balzano su cálida acogida y a Sonia Carillo sus consejos y ayuda en todo el proceso.

El conservatorio Luigi Cherubini ofrece estudios superiores agrupados en un Trienio y un Bienio. Al Trienio se accede mediante un examen de ingreso tras obtener el título de Bachillerato musical, desde otro tipo de bachillerato o a través de la modalidad "Joven talento" con un mínimo de edad de 15 años para las especialidades instrumentales y de 17 para los cantantes. Estos dos últimos tipos de acceso implican la realización de un examen de dos pruebas en vez de la única prueba que realizan los estudiantes que han cursado el bachillerato musical. Tras el examen final del Trienio se obtiene el Diploma académico de primer nivel o la Laurea Trienal y se accede mediante otra prueba al Bienio o dos años de especialización. Esta especialización puede ser en Canto y teatro musical, Didáctica de la música vocal o instrumental, Teoría y análisis, Dirección y composición o Interpretación instrumental. Cuenta además con departamentos de Música antigua así como de Música de Jazz y Música electrónica.  Tras el examen final del Bienio, se consigue el Diploma académico de segundo nivel o la Laurea Magistral. En este centro no se pueden cursar aún estudios de Máster salvo en Sonido e Imagen.

Durante mi estancia en el conservatorio, pude escuchar y participar en  las clases individuales y grupales de los dos profesores de flauta, Romolo Bolzano y Giuseppina Ledda, que fueron muy amables y atentos. Intercambié con ellos impresiones sobre el sistema educativo, repertorio y el panorama musical actual. Entre su alumnado destaca la presencia de bastantes alumnos extranjeros de Francia, Alemania y China.

Tuve también la oportunidad de probar la flauta travesera de ocho llaves que había llegado esa misma semana al centro, así como de visitar el enorme fondo de la biblioteca que, además del catálogo digitalizado, cuenta con otro en papel. La bibliotecaria Caterina Veddovi tuvo la amabilidad de mostrarme algunos de los tesoros musicales que guardan bajo llave, como el primer método para flauta: el Fontegara de Ganassi de 1535; cartas originales de Monteverdi y la partitura general de la Ópera Macbeth revisada y firmada por Verdi.  

Florencia desempeña un papel activo en la necesidad de superar las barreras limitantes y promover la inclusión. En el 2023 la ciudad celebró la primera edición de cine inclusivo llamado "Incinema" para discapacitados sensoriales. Mediante acceso adaptado a las salas y el uso de tecnología de vanguardia que proporcionaba subtítulos para las personas con discapacidad auditiva y descripciones para aquellas con discapacidad visual, se garantizó el disfrute de las proyecciones para todos los participantes. Asímismo, en museos de la ciudad como en el Palazzo Vecchio, el Palacio Pitti y en el aeropuerto se han colocado tablones en relieve y escritura Braille para personas con discapacidad visual, así como una sala en la Galería de los Uffizi con una escultura que puede tocarse.

Con esta misma intención, en el sector turismo, se inauguró el año pasado el primer hotel italiano con certificado LGBTQ+Friendly según el protocolo QueerVadis, para acoger a los visitantes de este colectivo. 

El conservatorio, que es un edificio antiguo, cuenta con ascensor y elevadores especiales para garantizar el acceso a las aulas de los pisos superiores.

Florencia participa en el proyecto europeo #NetZero2030 que aspira a la eliminación de las emisiones urbanas de CO2 para el ese año. Para favorecer la movilidad sostenible cuenta con una buena oferta de transporte público que incluye autobuses diurnos y nocturnos, cuatro líneas de autobuses eléctricos más pequeños adaptados a las estrechas calles del centro y dos líneas de tranvías, la T1 y la T2, muy frecuentes. Esta última comunica el aeropuerto con el centro de la ciudad en 15 minutos y circula cada cinco. 

Aprovechando que la ciudad es prácticamente llana, se usan mucho la bicicleta y el monopatín eléctrico, que cuentan con aparcamientos específicos señalizados (también junto al conservatorio). El carril bici se extiende a ambos lados del Arno, a veces compartido con los peatones, mientras que en el centro las bicis circulan por carretera.

El programa Firenze Città Circolare se ocupa de la cuidadosa separación de los residuos o raccolta differenziata, para su reciclaje. Hay dos contendores que cambian el  color respecto a los españoles: el amarillo es para el papel mientras que el azul es para los envases.

La ciudad cuenta con parques y zonas verdes como el Jardín de la Gherardesca, tramos de parque fluvial, el monte de San Miniato, parque de los Iris, sólo abierto entre abril y mayo cuando los iris florecen, los jardines de Bóboli, que pertenecen al Palazzo Pitti, los jardines Bardini, del palacio del mismo nombre o el jardín Botánico. 

La cuestión del manejo sostenible del turismo constituye una preocupación y una cuestión de debate, como he podido observar también en las librerías. Con una población aproximada de 372.000 habitantes, Florencia recibe más de 5 millones de visitantes al año, que representan una de las principales fuentes de ingreso de la ciudad. En el Museo de la Academia, donde se puede contemplar el David de Miguel Ángel reservando con semanas de antelación, se forman colas de turistas que llegan hasta la plaza del conservatorio.