Usar base, corrector o primer en los párpados. "Permitirá neutralizar la pigmentación propia del párpado para que la sombra, que será aplicada después, se vea en su tonalidad más pura", explica la maquilladora Connie Moreno.
Crear un solo punto de atención. "Para que el maquillaje tenga armonía y no caer en un estilo demasiado recargado, es importante destacar la boca o los ojos. Por ejemplo, un labial colorado quedará balanceado con un sombreado neutro o en la gama del marrón; y los smokey eyes, con los labios nude o neutros", aconseja Florencia Ducos, asesora de imagen y experta en marketing personal.