La Colectiva Las Guarangas nos pertenece a todas y a ninguna al mismo tiempo.
Nos proyectamos en un art-ivismo feminista para crear horizontal y autogestivamente; también reconocemos el aporte personal de cada una. Todas somos necesarias.

Las integrantes hemos ido cambiando con el tiempo de acuerdo a nuestras disponibilidades
y a las etapas que cada una atraviesa…y seguramente seguirá siendo así.

En la actualidad la palabra guarango tiene una connotación despectiva y peyorativa en el lenguaje cotidiano tal y como lo define la Real Academia Española. El término se utiliza para describir a alguien que es maleducado, grosero, incivil, desobediente o bruto. Esta carga semántica negativa arrastra una trama identitaria fundamental que degrada la diversidad cultural y la autonomía de los pueblos originarios.

Guarango era la forma despectiva que se usaba en la colonia para referirse a los hablantes monolingües del guaraní que no adoptaban  la lengua española. Era una referencia a la supuesta inferioridad de la lengua originaria frente al español.

En nosotras aún resuenan los castigos  por subirnos a los árboles, por jugar con los varones, por no sentarnos como señoritas…No seas Guaranga!, como si debiéramos avergonzarnos por existir y pedir permiso para vivir. 

Reivindicamos nuestras formas de estar en el mundo como queramos.

Como cada una lo sienta.

Somos, estamos,  guarangas.

Un fin de semana de octubre de 2018 llegamos varias mujeres desde un lugar geográfico y vivencial distinto hasta nuestro punto de encuentro a la eco-casa de Andrea, ubicada al pie de las sierras de San Luis-Argentina-Latinoamérica. El lugar es un paraje silvestre, rodeado de naturaleza y cercano al río. Allí nos propusimos pensarnos desde el arte y explorar nuestras identidades artísticas.

En este espacio nos encontramos, nos reconocimos, nos escuchamos, nos identificamos y construimos nuevos significados a partir de la convivencia colectiva. Nos interpelamos y posicionamos contrastando autoreferencias con  investigaciones artístico-político-sociales geosituadas en nuestra región desde una perspectiva feminista. 

Nuestros cuerpos se relajaron y reposaron sobre la geografía agreste junto al río. Nos permitimos ser libres y despojarnos de las cargas cotidianas mientras nos sentábamos sobre las enormes piedras. Este fue un espacio donde pudimos estar tal como siempre quisimos.

Así nació La Colectiva de Arte Las Guarangas.

En este contexto, también surgen los ejes principales que estructuran nuestro proyecto artístico: el tiempo libre, el tiempo al servicio para otres, tiempo para sí, mandatos sociales, roles y estereotipos de género, el desnudo y otros.