Los inicios de la Congregación De La Salle en Paraguay
El sueño de contar con la presencia de las escuelas Cristianas de la Salle en Paraguay se acariciaba desde 1965. Sin embargo, en ese entonces no estaban dadas las condiciones para su fundación. En el año 1968, a petición del Vicario de la zona del Pilcomayo, Monseñor Sinforiano Lucas, la Congregación Lasallana inicia su presencia en el Paraguay, instalándose en la ciudad de Pozo Colorado, Chaco paraguayo, región occidental, en medio de la selva chaqueña, a unos 282 Kilómetros de la capital del país. La iniciativa se dio con la intención de ubicarse en una zona alejada y olvidada, casi sin centros educativos, para atender a los hijos de peones de estancias que son establecimientos ganaderos pertenecientes a gente de bastantes recursos económicos.
Fue así que surgió la necesidad de fundar una institución educativa que funcione como un internado donde los trabajadores de las estancias (peones) puedan llevar a sus hijos e hijas para que reciban educación, surgiendo en este contexto la Escuela internado San Isidro Labrador, el 12 de junio de 1968, hoy a más de 50 años de sus inicios, la institución alberga a cerca de 350 niños y niñas de la zona chaqueña del país.
Más adelante, en el año 1976, la Congregación se instaló en otra zona conocida como el bañado norte de la ciudad de Asunción, nombre que hace alusión a sitios no habitables por la inundación constante originada por el desborde del Río Paraguay en épocas de lluvias intensas. En esta realidad empezó a funcionar la Escuela La Salle en el barrio Virgen de Fátima, situada estratégicamente para dar respuesta a la necesidad del sector, debido a la ausencia de instituciones educativas cercanas que acojan a los niños y niñas de las zonas aledañas. La escuela se instaló en un terreno donado por una persona que explotaba canteras ubicadas en el barrio, el propietario del terreno otorgó a la Congregación el título de la propiedad y fue el que construyó las tres primeras aulas de la escuela, por lo que la institución educativa lleva el nombre de José María Bogarín (propietario del terreno).
Además, los Hermanos tuvieron presencia en otros dos lugares importantes del país, específicamente el sur, instalándose en la ciudad de PILAR, departamento de Ñe´embucu, donde trabajaron muchos años con un Centro de educación escolar básica. Otra de las obras de gran relevancia fundada por los lasallanos es el Centro de Formación San Francisco, más conocido como Escuela Técnica de Cerrito, Chaco; actualmente, bajo los términos de un Convenio, administrado por la Fundación Paraguaya.