¿Por qué es importante leer y conocer la Biblia?

Muy pocas personas entienden la gran importancia de leer y conocer la Biblia. A lo largo de la Biblia, Dios continuamente nos pide y nos amonesta a leer y estudiar Su Palabra. Siendo esto así, ¿no deberíamos obedecerle? ¿Hay alguno de nosotros que no pueda dedicar 15 minutos al día? Si un lector promedio hiciera esto, toda la Biblia podría completarse en siete meses o menos. Pregúntese: “¿Hay 15 minutos diarios para rendirse?” Eso es aproximadamente 1/100 de un día de 24 horas. ¿No deberíamos al menos darle a la Palabra de Dios al menos tanto tiempo?

A continuación hay algunas escrituras para enfatizar por qué deberíamos:

-- El respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. (Mateo 4: 4, BVM)

-- En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti. (Salmo 119: 11, BVM)

-- Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad. (2 Timoteo 2:15, BVM)

-- Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres. (Juan 8: 31, 32, BVM)

-- Mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna. (Juan 4:14, BVM)

-- Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí. (Juan 5:39, BVM)

-- ¡He aquí, vengo pronto! Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro. (Apocalipsis 22: 7, BVM)

-- Pero si nuestro evangelio está aún encubierto, entre los que se pierden está encubierto (2 Corintios 4: 3, BVM)

-- Y éstos eran más nobles que los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así. (Hechos 17:11, BVM)

-- Hijo mío, está atento a mis palabras; Inclina tu oído a mis razones. No se aparten de tus ojos; Guárdalas en medio de tu corazón. (Proverbios 4: 20-21, BVM)

-- Y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. (Jeremías 29:13, BVM)

No puedo enfatizar lo suficiente la importancia que Dios le da a la lectura y al estudio de Su Palabra. Que Dios lo repita una y otra vez muestra que es de gran importancia. Solo unos pocos textos han sido citados anteriormente. Hay más de mil. Siendo esto así, ¿no deberíamos ser obedientes a Él?

Muchos hoy, incluso los predicadores del Evangelio de Cristo, fallan en alentar y enfatizar la importancia de conocer la Palabra de Dios al leerla y estudiarla diariamente. ¿Cómo podemos saber cómo hacer la voluntad de Dios si no conocemos su Palabra? Tenga en cuenta que nos comunicamos con Dios mediante la oración y que a menudo nos habla por medio de Su Palabra Divina, la Biblia. ¡Es esencial saber que la comunicación es una calle de doble sentido! Escuchar sermones es bueno, pero no cubre todas las verdades de Dios. Leamos y estudiemos por nosotros mismos, porque es entonces cuando se puede decir que somos estudiantes de Su Palabra. Sus tesoros están ocultos y son ilimitados. ¿Por qué no buscarlos?

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BVM: Biblia Versión Moderna