RESEÑAS

"Todo buen poema debería contar con desagradables imprevistos"

"Desde el principio, nos emociona su visión de una verdad sobrecogedora, cuando, para el poeta, la memoria va llenando espacios con la intensidad de lo vivido". Pilar Quirosa -Cheyrouze en Ideal.

"José Luis Martínez Clares es de Granada desde el 72, es maestro desde siempre, es poeta desde antes y travieso con las letras para dejarnos palabras con premios a sus espaldas. Y sin embargo viene y nos cuenta: Tengo un par de versos en busca de poema. Y respira". Ramón Llanes en Diario de Huelva.

"La poesía de Martínez Clares, popular en esencia, se engrandece para hacerla cada vez más accesible, sin que pierda por ello filosofía, contenido y calidad, sino que, a través de un vocabulario acertado, va haciéndose más cercana y palpable, buscando la universalidad". María Ángeles Lonardi en Todo Literatura.

"Un poemario cuyas voces se dejan oír emergidas de la penumbra. Unas palabras nacidas de un amor no efímero sino perdurable, el amor por el lenguaje". Setefilla Almenara, en Mi lápiz tan manso sobre "Palabras efímeras".


"Doctorado en vientos" es el arma frente al exceso y la grandilocuencia de un autor que desafía el encorsetamiento teórico. José Luis Martínez Clares forcejea con sus contradicciones en márgenes peligrosos mientras bebe del recuerdo para Javier Egea. Sus constantes emocionales y el trayecto vital se vinculan rechazando el discurso pretencioso y totalizador que castra la poética de tantos, para encontrarse en la quietud y el movimiento de los espacios de tránsito, en las islas comunes donde dolerse, en mares distintos y laberintos plagados de referencias que sería egoísta desvelar aquí". Laura Fjäder sobre "Doctorado en vientos".


José Luis Martínez Clares… poeta, escritor almeriense contemporáneo, profesor, fotógrafo… en su mirada navegan versos y sus libros son islas para salvarnos. Colorín Colorado, durante la presentación de la Ruta con Encanto "Poesía en la calle", en Serón.

"No crea el amable lector que este poemario carece de virtudes estrictamente líricas, por más que el aliento verbal lo impregne y haya una trama novelística, si uno sabe hurgar". Emilio Calvo de Mora en El espejo de los sueños, sobre "Música de carreteras".

"Valiéndose de las páginas de este libro y siempre a través de carreteras secundarias, Martínez Clares nos lleva de viaje hasta un futuro que tal vez no entienda de poemas, y nos libera de la rutina para después quitarnos la miel de los labios y devolvernos a ella, y traslada a la gente sin pueblo hasta los pueblos sin gente, y se detiene en los barrios que transitan los condenados a rondar los márgenes del mundo". Diego Martínez en Diario de Almería, sobre "Música de carreteras".

"Supongo que este libro contiene casi todo lo que me conmueve de la poesía española de los últimos cincuenta años: el dominio del lenguaje, propio de un José Ángel Valente romántico ("Comité de crisis"); la referencia culta a otros campos artísticos, en este caso el cinematográfico ("Buñuel y el deseo"); la hondura expresiva cercana a Ángel González o José Hierro ("Partos"); el estilo en parte deudor de la "poesía de la experiencia" predominante en buena parte de las cuarenta páginas ("Levemente diciembre", "Servidumbre de paso")". Rafael Indi, en Pequeño animal en disturbio sobre "Vísperas de casi nada".


"Es una tragedia cultural que la poesía actual española circule en su mayor parte casi clandestinamente en el mercado alternativo y minoritario de la lucidez y las lecturas múltiples, porque refugiada, salvo excepciones, en los límites de la literatura publicada en provincias -tantas veces heroico foco de resistencia frente a la mera repetición de modelos de éxito en que se mueven las grandes editoriales-, siempre parecerá más difícil que una obra de tanta hondura, belleza y singularidad como la de Martínez Clares llegue a hacerse oír con la amplificación que merece". Juan Herrezuelo sobre "Lo que mirarán tus ojos".


"En Doctorado en vientos se muestra, con extraordinaria finura poética, una filosofía del yo como búsqueda activa de sí mismo a través de ese territorio extraño que es la vida y sus espejos, donde siempre es más fácil perderse que encontrarse, donde nada hay que dar por sabido, sobre todo acerca del propio ser". Manuel Cruz sobre "Doctorado en vientos".


Y otro aspecto que siempre busco en toda literatura ajena a la que yo practico también lo encuentro aquí: clarividencia. Que un ejercicio de estilo signifique algo más que subjetividad, que ofrezca síes redondos, como buen profesor y heredero de "La otra sentimentalidad" es el autor. 

Rafael Indi, sobre "Doctorado en vientos".