La inspección reglamentaria contra incendios es un requisito ineludible para garantizar la seguridad de las instalaciones en todo tipo de edificaciones: desde industrias hasta comunidades de propietarios. En un contexto donde el cumplimiento normativo es vital para evitar sanciones y proteger vidas, entender este proceso técnico y legal es clave.
En este artículo encontrarás todo lo que necesitas saber sobre las inspecciones contra incendios conforme al Reglamento de Instalaciones de Protección Contra Incendios (RIPCI), sus implicancias legales, los organismos autorizados (OCA), y cómo cumplir con la normativa sin complicaciones.
Es la evaluación técnica, periódica y obligatoria que verifica el estado y funcionamiento de los sistemas de protección contra incendios (detectores, extintores, BIEs, rociadores, sistemas de alarma, etc.), conforme a lo establecido en el RIPCI, aprobado por el Real Decreto 513/2017.
Validar que las instalaciones cumplan los requisitos técnicos y legales.
Detectar riesgos que puedan comprometer la vida, bienes o continuidad operativa.
Emitir informes técnicos con las medidas correctivas necesarias.
Los responsables de llevar a cabo esta tarea son los Organismos de Control Autorizado (OCA). Estos son entidades independientes acreditadas por ENAC (Entidad Nacional de Acreditación) y autorizadas por las administraciones autonómicas. Empresas como SIMECAL, por ejemplo, son referencia en este servicio en zonas como Madrid y Castilla y León.
Según ENAC, el 94% de las industrias inspeccionadas por un OCA que aplican correctivos a tiempo, evitan incidentes mayores en los cinco años posteriores [fuente: ENAC 2023].
El artículo 22 del RIPCI establece que las inspecciones reglamentarias deben realizarse cada 10 años desde la legalización de las instalaciones (salvo excepciones más restrictivas por comunidades autónomas). No obstante, sistemas como los de tipo industrial o de alto riesgo pueden requerir revisiones más frecuentes o complementarias.
Certificado de instalación.
Manuales y planos.
Registro de mantenimiento preventivo.
Informes previos si los hubiera.
No realizar las inspecciones reglamentarias de incendios puede acarrear sanciones económicas, inhabilitación de actividades e incluso responsabilidad penal en caso de siniestros. Las aseguradoras también pueden negarse a cubrir daños por incumplimiento normativo.
Según la Dirección General de Industria de la Comunidad de Madrid, durante 2023 se iniciaron más de 2.000 expedientes por incumplimientos relacionados con la inspección de seguridad industrial.
SIMECAL cuenta con décadas de experiencia, auditores certificados y equipos técnicos de última generación. Además, ofrecen asesoría integral que incluye:
Revisión documental previa.
Inspección in situ.
Informe técnico detallado.
Recomendaciones para subsanar deficiencias.
Esta metodología garantiza un proceso ágil, seguro y conforme a ley. Además, alinean su intervención con los requisitos de normativa europea y estándares de calidad como UNE-EN 54 (sistemas de detección).
1. ¿Cada cuánto se debe realizar la inspección contra incendios?
Cada 10 años según el RIPCI, aunque puede variar según la Comunidad Autónoma o el tipo de actividad del establecimiento.
2. ¿Qué instalaciones están obligadas a pasar esta inspección?
Toda edificación con sistemas de protección activa contra incendios, incluidos locales comerciales, oficinas, industrias, hoteles, hospitales, entre otros.
3. ¿Qué pasa si la instalación no supera la inspección?
Se emite un informe con las deficiencias detectadas y se establece un plazo para subsanarlas. La falta de corrección puede derivar en sanciones.
4. ¿Qué diferencia hay entre mantenimiento y una inspección OCA?
El mantenimiento es una labor interna o delegada periódica; la inspección OCA es una auditoría independiente y obligatoria regulada por la administración.
5. ¿Cuánto cuesta una inspección reglamentaria?
Depende del tamaño y complejidad de la instalación, pero puede oscilar entre 250 y 1.200 euros. Empresas como SIMECAL ofrecen presupuestos personalizados.