EXPLORANDO  EL MUNDO DE LA POESÍA

PILAR UÑA (3º B)

La poesía, ese arte milenario que cautiva corazones y despierta emociones, es un viaje fascinante a través de las palabras.

Desde tiempos inmemorables, la poesía ha sido el refugio de los sueños, el eco de las emociones más profundas y el testigo silencioso de la historia humana. A través de sus versos, poetas de todas épocas han plasmado sus visiones del mundo, sus alegrías, sus penas y sus anhelos.

La poesía ha servido como un medio para transmitir tradiciones y valores. Desde los clásicos griegos hasta los poetas contemporáneos, cada época y cada cultura han dejado su huella en el universo poético.

En el ámbito educativo, la poesía juega un papel importante en el desarrollo de habilidades lingüísticas y creativas. Además, la poesía desarrolla la imaginación: puedes experimentar con el lenguaje y jugar con los sentimientos y la manera en los que quieres expresarlos.

En resumen, la poesía es mucho más que un puñado de versos bien estructurados, la poesía es un arte que solo unos pocos entienden y la viven.

Dentro del mundo poético, destaca la Generación del 27, que fue un grupo de escritores, poetas y artistas españoles que surgió en la primera mitad del siglo XX. Encabezado por figuras emblemáticas como Federico García Lorca, Rafael Alberti, Luis Cernuda y Vicente Aleixandre, entre otros, la Generación del 27 derrochó mucho talento y creatividad que abrazó diversas corrientes literarias.

En conclusión, la Generación del 27 fue un movimiento cultural que desafió las convenciones sociales de su tiempo y abrió nuevas vías de expresión artística en España y más allá.

Me gustaría comentar y remarcar al poeta Federico García Lorca. En mi opinión es, sin duda, uno de los poetas más brillantes y emblemáticos de la literatura española y universal. Sus obras están impregnadas de una sensibilidad única y una profunda conexión con la tierra y la cultura andaluza.

Lo que más admiro de García Lorca es su capacidad para transmitir sus emociones a través de imágenes poéticas vívidas y con un lenguaje cargado de simbolismo. Sus poemas exploran temas tan diversos como el amor, la muerte, la injusticia social y la naturaleza con una profundidad y una originalidad incomparables.

Lorca fue un defensor apasionado de la libertad y la injusticia social. Se puede ver muy claro en su obra Romancero gitano, en mi opinión, una de las mejores junto a La zapatera prodigiosa.

Mi poema favorito de Lorca es “Verde que te quiero verde” no por su significado, que en parte también, sino porque tengo el recuerdo de que cuando era pequeña Celes, mi cuidadora, me lo leía muchas noches antes de ir a dormir. Gracias a ella ahora me gusta la poesía.

Lo que quiero decir con todo esto, es que la poesía no solo es algo aburrido que nos hacen estudiar en clase, sino que es un arte que, aunque a veces sí puede parecer algo tedioso, solo con esforzarse un poco en entenderlo, te darías cuenta de que es una manera preciosa de expresar lo que sientes y de jugar con ello.

 

“La poesía no quiere adeptos, quiere amantes” (Federico García Lorca)

VERANO ARDIENTE

En el verano ardiente, nació un amor,

bajo el sol que tejió nuestro fulgor

bailamos entre risas, en noches sin final,

dos almas perdidas en un cuento celestial.

 

Tus ojos reflejaban estrellas fugaces,

mientras el viento susurraba nuestras frases.

Pero el solsticio de nuestro amor llegó,

un destino oscuro que nadie anticipó.

 

Las olas del mar contaron nuestra historia,

un amor efímero, tan lleno de euforia.

Pero el tiempo, cruel en su transitar,

te llevo lejos, dejándome a sollozar.

 

Nuestro amor de verano, tan fugaz,

se desvaneció como el último haz.

La tragedia tocó nuestro corazón,

como una sombra, dejándonos sin razón.

 

En las noches estrelladas, susurro tu nombre,

un eco perdido en el vasto reino del hombre.

El amor de verano, dulce y cruel,

se convirtió en un cuento de tragedia y miel.

AMOR PROHIBIDO

Entre susurros secretos que no se revelan,

un amor prohibido, como las olas que desvelan.

En la penumbra de la noche, sus miradas se cruzan,

dos almas perdidas, en pasiones que nunca se cruzan.

 

Atracción prohibida, como un pecado callado,

sus corazones entrelazados, pero el destino marcado.

Caminan senderos paralelos, sin nunca tocarse,

un amor que florece, pero que no puede enlazarse.

 

Entre los muros de la realidad, se oculta su deseo,

un amor que florece pero que no se guía.

Susurran promesas al viento que las lleva

pero las barreras infranqueables de su amor deslleva.

 

En la danza del tiempo, sus caminos se desvían,

un amor que florece pero que no se guía.

Destinos entrelazados, pero distantes en verdad,

un amor imposible, que nunca verá la realidad.