Capítulo 46: La espada castiga el corazón

Yang Wugong apartó las manos de Shen Shengyi, secándose la sangre de sus labios, miró hacia arriba y se rió en voz alta.

Haciendo caso omiso de cómo cualquiera de los invitados, tropezó mientras salía corriendo.

"¡Shen Shengyi, no dejaré que te cases con ella hasta mi muerte! Jajaja!"

Shen Shengyi apretó los puños, las venas de su frente saltaron. Él se levantó bruscamente y alargó la mano para agarrarle. Se giró impaciente, pero cuando vio la profunda mirada de Liu Zhishang, la ira en su interior se calmó lentamente. Yang Wugong era el hijo de Yang Yifei, por lo que este último tenía que dar una explicación, con un acontecimiento tan grande sucediendo.

Conteniendo su ira se disculpó mientras pedía a sus sirvientes que trajeran rápidamente a Yang Wugong. Liu Wei le agarró la mano, pero él resopló con fuerza y la apartó de un manotazo. Una ceremonia nupcial se había convertido instantáneamente en una farsa. Fu Hui ya no estaba de humor para investigar nada, pero envió a la gente a buscar el paradero de Fu Wanqing.

¿Qué indicaban esas manchas de sangre en la habitación? Que la habilidad del secuestrador era extremadamente alta, o que habían sido inesperadas, agarrando a Lady Fu con la guardia baja.

A los ojos de jianghu, las excepcionalmente omnipotentes artes de la espada de Lady Fu había tenido ahora un momento de fracaso, por haber sido sacada por la fuerza de la mansión. Fu Hui caminaba por la cámara nupcial llena de cortinas rojas. Recogió el velo, lo frotó con la mano izquierda y quitó el fino polvo blanco que había en él.

"Líder Fu, tal y como yo lo veo, tenemos que preguntarle a ese chico Yang sobre esto. ¿No estaba insistiendo en no dejar que nuestro Hermano Mayor Shen se casara?" un discípulo de la Escuela Toque del Cielo realmente no pudo resistirse a gritar.

"Es demasiada coincidencia que él apareciera para causar problemas aquí, y entonces la Dama Fu ¡desapareciera en un abrir y cerrar de ojos! Debe haber estado desviando nuestra atención!"

"Eso tiene sentido para mí. La Mansión tiene trampas por todas partes, así que ¿Cómo podría cualquier persona entrar? Tuvo que haber sido alguien que estaba súper ¡familiarizado con el terreno! Incluso podría haber sido algo que uno de los suyos amor engendra odio, y manía. Este viejo ha visto mucho de eso en mi vida. El Joven Maestro Yang es, bueno, joven, por lo que probablemente no podría soportar la ira, ¿eh? Si nada hubiera pasado entonces, la Dama Fu sería su esposa. ¿Cómo podría tocarle a otro conseguirla?"

"Realmente no lo creo. ¿No podría haberlo hecho alguien de Credo de Agua Jadeíta, o del Palacio Sin Límites? Tal vez ellos no quieren que nuestra Alianza Sendero Blanco forme conexiones matrimoniales internas, así que hicieron algo como esto a propósito para romper la boda?"

"Está bien, está bien, ¿Qué sentido tienen estas suposiciones salvajes? Date prisa y ve ¡a buscar a la Dama Fu! Tan pronto como este matrimonio está atado, Líder Fu va a hacer lo que prometió y nos llevará a la Isla de la Niebla, ¿verdad?"

Fu Wanqing había sido realmente secuestrada por un anciano delgado que la había arrastrado a más de diez kilómetros de distancia de una sola vez, y luego la confinó en una cueva de la montaña.

Estaba oscureciendo, con sólo una hoguera parpadeando en la cueva. Fu Wanqing seguía vestida con su traje nupcial, su semblante ligeramente maquillado con adornos cosméticos que la hacían parecer una hermosa flor de melocotón bajo la luz del fuego. La leña que Zhang Zongyi había roto fue arrojada al fuego, emitiendo sonidos crepitantes y sonrió siniestramente. Esto no era una cueva ordinaria, parecía que había sido creado por un largo tiempo.

Sus miembros estaban encadenados, por lo que era incapaz de moverse, y sin embargo miraba su expresión sin miedo, sólo con una sonrisa cada vez más densa. Se levantó bruscamente, temblando.

La [1]kasaya roja resbaló de su cuerpo mientras él le daba una bofetada en la cara, sonriendo con maldad.

"Hoy es un gran día. Esos jianghu se están volviendo locos, ¿eh? Quiero hacer que Fu Hui pruebe el sabor de perder a una hija."

"¿Sable Diabólico, el experto número uno de las Regiones Occidentales?" Fu Wanqing ladeó la cabeza, riendo entre dientes. "Fuiste derrotado, así que tuviste que utilizar un método tan turbio como este".

"¡Jajaja!" Se rió, echando la cabeza hacia atrás. "Lady Fu, este viejo es de un camino nefasto, y hago cosas malvadas. El método no importa, dado que puedo lograr mi objetivo. ¿No entiendes esa lógica?, fuiste golpeado por mí, ¿eh? ¿Eso debe haber dejado una fea cicatriz? Déjame inspeccionarla yo mismo".

Su mirada se volvió extremadamente malévola, sonriendo mientras se acercaba a ella. Su mano se deslizó lentamente desde sus cejas hasta su cuello, y con un sonido, el vestido de novia rojo se rasgó, dejando al descubierto la nueva ropa interior. Los ojos de Fu Wanqing seguían llenos de sonrisas, y parecía tranquila, como una espectadora. La ira de Zhang Zongyi en su pecho floreció aún más. Tirando con fuerza, sus ropas interiores se abrieron, revelando aquellos hombros elegantes y tiernos.

"Se suponía que esta noche iba a ser tu noche de bonitas velas y la nupcial. Ese niño bonito no podrá disfrutarla, pero eso no importa. Este viejo puede sustituirlo..." Su cara estaba llena de lascivia. "Y ese tonto de Fu Hui se convertirá en mi suegro."

"Zhang Zongyi", llamó Fu Wanqing con una sonrisa. "La lujuria cuelga un cuchillo sobre la cabeza, ¿no lo sabes?" La mano de Zhang Zongyi que iba a su hombro se detuvo en el aire. Al cabo de un rato, soltó una mueca desdeñosa por la nariz.

"¿Has olvidado dónde estás ahora? Has sido reducida a una prisionera. ¿No eres incapaz de actuar contra mí? Deberías aceptar tu destino. Si me siento rejuvenecido, podría... podría perdonarte la vida". Aquella mano seca, como una garra de águila, se posó en su hombro.

Fu Wanqing no hiso ni un sonido, la repugnancia pasó rápidamente por sus ojos.

"De acuerdo. No puedo salvarme, pero alguien vendrá".

"¡Hahahaha! ¿Estás esperando a que Fu Hui traiga gente? Tendré mucho tiempo convertido en su yerno".

Era muy arrogante, no creía que el grupo de jianghu tuviera ninguna capacidad, al igual que tampoco tenía esperanzas en ellos. Bajando la cabeza, dejó que aquellas manos totalmente sucias recorrieran sus hombros, reprimiendo las ganas de vomitar mientras sus ojos se oscurecían cada vez más. Había innumerables personas que se habían perdido a sí mismas, y luego sus vidas. Ella había dicho la verdad, y sin embargo él la había tratado como una broma.

Luz de espada superó las llamas del fuego. Su arrogante Sable Diabólico ni siquiera salió de su funda. Miró fijamente mientras giraba lentamente la cabeza, aparentemente queriendo echar un vistazo a esta persona, pero la luz de la espada picó sus ojos, forzándolo a la ceguera. Así, un experto generacional de las Regiones Occidentales se desplomó en un charco de sangre, sin siquiera llegar a ver la cara de su enemigo.

Fu Wanqing seguía sujeta por las cadenas, sus ropas estaban desordenadas, y tenía moratones en la comisura del labio. Parecía más desaliñada que antes, aunque la sonrisa de sus ojos no había disminuido lo más mínimo. Levantó la cabeza, vio la figura de blanco y sonrió encaprichada.

"Dijiste que Huaixiu nunca se desenvainaría. También dijiste que se usaría para castigar el corazón. Entonces, ¿has venido a vengar a tu padre? ¿Has venido a matarme?" Yu Shengyan nunca se mantendría alejada.

Ella lo había sabido todo el tiempo.

"Sí. He venido a matarte." Los ojos del otro parecían congelados... de hielo. Se acercó, paso a paso, la mirada se posaron en el cuerpo de Fu Wanqing.

Con algunos tintineos, salpicaron chispas por todas partes, y las cadenas cayeron al suelo. Antes de que Fu Wanqing pudiera suspirar por la libertad, sus puntos de acupuntura fueron repentinamente sellados. Aquel vestido de novia rojo brillante estaba quemando los ojos de Yu Shengyan. La ropa ya rasgada se rompió completamente en pedazos bajo su palma.

Cuando el viento helado sopló, la piel de gallina de Fu Wanqing que estaba expuesta al exterior; ella tiró de las comisuras de su boca en un deseo de sonreír, pero el dolor vino a través, haciéndola murmurar. "Frío", voz baja.

Yu Shengyan ignoró lo que decía, levantó a Fu Wanqing y la llevó en brazos y salió de la cueva sin mirar al cadáver.

Bajo los rayos de la fría luna, las extrañas ramas del bosque se inclinaban. Aceleró a gran velocidad y sólo pudo oír el zumbido del viento en sus oídos. Con sus puntos de acupuntura sellados, el viento cortó como un cuchillo el rostro de Fu Wanqing, helándola sin sangre.

¿Estaba enfadada?

Tal pensamiento surgió en la mente de Fu Wanqing, y ella inmediatamente toda esa infelicidad y escalofrío quedaron completamente atrás. Oyó el sonido del agua, que empezó lejos y luego se acercó. Justo cuando pensó en preguntar, Yu Shengyan ya se había detenido ante un estanque.

El profundo estanque desprendía vapor; sólo mirarlo daba escalofríos. Fu Wanqing caminó unos pasos hasta el borde del estanque y se agachó, se agachó y cogió un puñado de agua. Aquel frío cortante la hizo estremecerse.

"¿Por qué has venido aquí?", preguntó con una sonrisa, frotándose las manos mientras se acercaba al otro lado.

"Entra", dijo fríamente Yu Shengyan, frunciendo el ceño, sin una pizca de broma en su rostro.

Fu Wanqing se sobresaltó y esbozó una sonrisa.

"El agua de este estanque está helada. Esto es sólo el comienzo de la primavera..."

"Entra", repitió Yu Shengyan, riendo burlonamente. "Tienes una profunda habilidad, Lady Fu. ¿Todavía tienes miedo de este poco de frío?". Su rostro estaba helado.

Fu Wanqing la miró durante un largo rato, luego esbozó una sonrisa encantadora. Las frías estrellas eran como puntos, la fría luna, un anzuelo. La blanca túnica interior se deslizó gradualmente por sus hombros.

Sonrió seductoramente mientras se quitaba la cubierta del cuerpo. Yu Shengyan la miró directamente, sin que su gélida observación cambiara lo más mínimo. Se oyó un chapoteo, el sonido de su salto al agua; se sumergió en el estanque como un pez, las ondas de su superficie volviendo gradualmente a la tranquilidad. Yu Shengyan observó el estanque en calma, casi inmóvil, y suspiró ligeramente.

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