En México y en otros países, el sistema de prefabricación se realiza en una planta fija, que cuenta con una infraestructura diseñada de acuerdo a sus necesidades y procedimiento constructivo, la cual tiene grandes espacios para el almacenamiento de su producto terminado, que finalmente serán transportados a la obra destinada para la cual fueron diseñados los precolados.

En estas plantas, se pueden realizar prefabricados de diferentes formas, acabados, y texturas diferentes según su diseño y tipo de obra.

El traslado de los prefabricados al sitio de la obra tiene el inconveniente de que se deterioran durante su transporte por los caminos, la topografía accidentada, los topes, vibradores, desniveles, el exceso de vibración. Al momento de librar éstos obstáculos, la flexión provocada a la plataforma repercute en la carga transportada, teniendo una alta posibilidad de que las piezas se fisuren y en el peor de los casos se fracturen.

Esto afecta directamente que el costo de prefabricado, se incremente por el simple hecho de su transportación, adicionándole a este el costo de reparaciones y dispositivos especiales que se colocan en las plataformas para el cuidado de los mismos.

Para evitar estas situaciones, se tiene como alternativa habilitar una planta móvil y fabricar en terrenos muy cercanos o a pie de obra y abatir los costos de transportación, tiempos de ejecución de obra, reparaciones, resanes y con el beneficio de fabricar los precolados con medidas exactas.