En nuestra institución, la acumulación de hojas de mango representa un problema ambiental y de salud que no puede ignorarse. Estas hojas se depositan constantemente en patios y senderos, provocando obstrucción del paso, dificultad en la limpieza y acumulación de humedad, creando un ambiente propicio para la reproducción de mosquitos y el riesgo de enfermedades.
La falta de un manejo adecuado de este residuo natural genera un impacto negativo directo en la calidad del entorno, la seguridad de los estudiantes y el bienestar general de la comunidad educativa. Por lo tanto, se hace imprescindible implementar una solución efectiva que transforme este problema en una oportunidad.
El proyecto de compostaje con hojas de mango no solo aborda esta problemática de manera sostenible, sino que tiene el potencial de mejorar significativamente las áreas verdes de la institución, al convertir un residuo perjudicial en un fertilizante natural que promueve el crecimiento saludable de las plantas y contribuye a un ambiente más limpio y seguro para todos.