Valle, Cauca y Nariño sitiados por el paro
Valle, Cauca y Nariño sitiados por el paro
Bajo el amparo de la protesta social, un grupo de camioneros no puede promover un nuevo bloqueo a la economía de los colombianos.
El paro camionero en la vía Panamericana pone de nuevo un sitio a la tranquilidad, la economía y el abastecimiento alimentario para millares de familias en Nariño, Cauca y Valle. Al margen de las motivaciones que alimentan el bloqueo, esta nueva acción golpea duramente los bolsillos de la gente y estimula la inflación.
Para nadie es desconocido que, tras este tipo de actividades, quienes encarecen el precio de los productos, no los bajan de nuevo. En pocas palabras, los especuladores son los más beneficiados.
La restricción en la venta de combustible y el suministro de gas domiciliario, ¿a quiénes afecta? Por supuesto, ese interrogante que despierta un alto grado de inconformidad, no figura entre las consideraciones de los organizadores de los bloqueos.
Lo que se jugó en Alto de Daza—próximo al puente de Rumichaca--, punto de concentración de los vehículos que impiden el paso entre Colombia y Ecuador, es el bienestar de infinidad de familias que hoy ven por las nubes el valor de la papa, la cebolla, la arveja, la zanahoria y otros productos básicos en la canasta familiar.
Quienes derivan el sustento de cultivar la tierra, otra vez enfrentan la zozobra de que sus cosechas o se pierden o las paguen como quieren quienes especulan y se favorecen del paro. Quien pierde es Juan Pueblo.
Esta vez se le puso la fresa al helado con bloqueos en la vía Pasto - Mocoa, a la altura del corregimiento El Encanto, y en las salidas de Pasto e Ipiales, así como en la vía Pasto y Tumaco, generando una de las parálisis sin parangón en los últimos años.
Sin duda, ese no es el camino apropiado para hacerle exigencias al gobierno nacional.
Doloroso que, como consecuencia, los campesinos han optado por utilizar rutas alternativas peligrosas, conocidas como trochas, para sacar sus productos. Es el desespero ante la realidad de perder lo poco que tienen, en las más recientes cosechas.
Lea la última edición del periódico SUGOV haciendo Clic Aquí