Jardín Histórico

El “Complejo Costa Martiánez” en su totalidad está catalogado desde el año 2005 como Bien de Interés Cultural en la categoría de Jardín Histórico, tanto por su belleza monumental como por la exuberancia de sus jardines, en los que árboles, plantas, arbustos y flores se entrelazan con las rocas del paisaje volcánico creado por César Manrique.


Aunque la vegetación ha ido cambiando con el paso de los años, actualmente destacan las especies autóctonas y endémicas del litoral canario, así como otras introducidas en las islas, pero que se encuentran perfectamente adaptadas a su favorable clima.


Algunas de las especies más comunes en el complejo son el tarajal canario (Tamarix canariensis), el cardón (Euphorbia canariensis), la tabaiba dulce (Euphorbia balsamifera), el drago (Dracaena draco), la palmera canaria (Phoenix canariensis), el cocotero (Cocos nucifera), la palmera washingtonia (Washingtonia filifera), el aloe vera (Aloe Barbadensis Miller) y la chumbera (Opuntia maxima).


Además, hasta hace no muchos años encontrábamos macetas colgantes formando frondosos ramos, principalmente de geranios (Pelargonium × hortorum), que hoy en día se han perdido casi en su totalidad, quedando solo unos pocos ejemplares a la entrada de “Los Alisios”.


Prestando un poco de atención a su alrededor, comprobará como la unión de arte y naturaleza, siempre presente en la obra de Manrique, se acentúa gracias a la vegetación que recorre todo el complejo y contrasta con la aridez de la piedra volcánica que da forma a piscinas y estanques.


La luz natural, que incide sobre los árboles formando sombras y reflejos en el agua, no es un mero elemento aleatorio, sino medido cuidadosamente por Manrique, formando asimismo parte de su obra.