Llamamiento para la confluencia municipal en Córdoba

Llamamiento a Ganemos Córdoba, IU, Podemos y Equo.

El diálogo de las fuerzas rupturistas, políticas y sociales debe reanudarse en Córdoba.

Hace escasos dos meses se anunció como definitiva la ruptura de las negociaciones entre Ganemos Córdoba, Izquierda Unida, Podemos y Equo para presentarse, de forma conjunta, a las próximas elecciones municipales, y se daba como por seguro que IU y Podemos se presentarían por un lado y Ganemos Córdoba por otro. Desconocemos lo que hará Equo.

Esta situación nos parte el corazón y el voto a muchas personas que, aunque entendemos que hay diferencias políticas e incluso ideológicas entre los diferentes grupos, creemos imprescindible que todas las fuerzas, políticas y sociales, a la izquierda del PSOE puedan dar una respuesta ante la toma del poder real por parte de grupos que no se presentan a elecciones, pero que hipotecan presente y futuro de la ciudadanía a través de representantes políticos en instituciones que hacen de marionetas suyos.

Vienen tiempos duros en los que necesitaremos capacidad de resiliencia y trabajar de forma unitaria para revertir la situación social de cada día más familias, para quienes la forma prioritaria de conseguirlo es ser conscientes de que la solución está en sus manos. Para ello, previo conocimiento exhaustivo de la realidad, habrá que tomar la vía colectiva más amplia para lograr la unión y la lucha como las formas más rápidas, eficaces y duraderas de crear un verdadero contrapoder popular. A pesar de llevar muchos años entendiendo que ese era el camino, creemos que la realidad es que no hemos hecho gran cosa al respecto.

Pedimos que Ganemos Córdoba, Izquierda Unida, Podemos y Equo retomen las negociaciones y entiendan que han de llegar a un acuerdo que convoque al día siguiente a los colectivos más activos de la ciudad, pero también a los sectores no organizados que peor lo están pasando, con el objetivo de llegar a un programa común, asumido y defendido en la calle y también en las instituciones a través de representantes elegidos de forma abierta y directa por quienes crean en este proyecto. Eso sería, en nuestra opinión, una verdadera confluencia donde las partes trabajen para conseguir un sujeto político que sea como las aguas de distintos ríos que, cuando llegan al mar, son una sola indistinguible y enriquecida por todas. Esto requerirá del esfuerzo de las militancias, y aportaría una herramienta para convertir la preocupación en ilusión, y demostraría que lejos de cundir el miedo, estamos en disposición de luchar por una vida digna.

Somos personas convencidas de que, de esta forma, podremos llegar a que se organice una fuerza unitaria para hacer una ciudad cuidadosa y cuidadora, habitable, valiente, solidaria, alegre, feminista, absolutamente respetuosa con el medio ambiente, alternativa y con el foco en quienes más lo necesitan, de forma que las soluciones sean desde la justicia redistributiva y no con el odio a la persona que proviene de otro lugar o a la que aún está peor que nosotros y nosotras. Será un trabajo que merecerá la pena y cambiará nuestro semblante.

Debe entenderse que la conformación de un proyecto así requiere un diálogo horizontal y desde abajo y no ser una mera suma de siglas teledirigida desde cúpulas políticas. La experiencia política nos demuestra que las uniones no pueden hacerse por decreto; los pactos por arriba no funcionan, las alianzas vertebradas desde la base sí. Empecemos a dialogar de inmediato para evitar llorar en futuras noches electorales por no tener alternativas desde la gente que lo pasa peor, que han de ser actores principales de ese cambio y no tener que asirse a mensajes xenófobos, racistas y llenos de odio.

La alternativa está en que las personas representantes en la institución sean reconocidas como las compañeras que hacen la parte del trabajo que toca ahí, y que las representadas sean las que hacen su parte en la calle. Cada una en un sitio, elegida de forma colectiva, pero todas con el mismo objetivo: la justicia social, la dignidad y el ecosistema y el ser humano en el centro de cualquier decisión.