Ponencia
Miércoles 14 de octubre
Doctor Cesáreo Rodríguez Hernández

Extractos vegetales; una alternativa, no para matar ni manejar plagas, sino para proteger cultivos

El doctor Rodríguez es ingeniero agrónomo, especialista en Parasitología Agrícola de la Universidad Autónoma Chapingo, con maestría en Ciencias en Entomología y Acarología agrícola en el Colegio de Postgraduados en Ciencias Agrícolas, y doctorado en Ciencias en Entomología de la Universidad de San Paulo, Brasil.

Tiene 39 años de experiencia en el control alternativo de plagas, y su principal área de investigación, enseñanza y divulgación es sobre insecticidas vegetales, y en los últimos diez años la agrohomeopatía contra plagas. Actualmente es profesor investigador titular del Colegio de Postgraduados en Ciencias Agrícolas. Ha impartido múltiples conferencias, cursos y talleres a estudiantes, técnicos y productores para propiciar el cambio de paradigma: de no matar plagas, a la protección de los cultivos.

Resumen

Extractos vegetales; una alternativa, no para matar ni manejar plagas, sino para proteger cultivos.

Rodríguez Hernández, C.

Profesor Investigador Titular. Programa de Entomología y Acarología, Campus Montecillo, Colegio de Postgraduados en ciencias agrícolas. 56230 Montecillo, Texcoco, Estado de México, México.

Tel: 59595-17374. Correo electrónico: crhernan@colpos.mx

Las plantas plaguicidas se usaron contra plagas agrícolas desde hace más de 3,000 años, luego se fueron relegando y olvidando por el surgimiento de plaguicidas inorgánicos y posteriormente de los plaguicidas organosintéticos, que tenían como objetivo matar más rápido las plagas. En la actualidad han resurgido como una alternativa al desarrollo de resistencia en las plagas, a la contaminación al ambiente, intoxicación a organismos vivos, acumulación de residuos en los alimentos y por la dependencia tecnológica que han ocasionado los plaguicidas organosintéticos en los últimos 81 años. No obstante, en el mismo afán de seguir matando plagas se ha abusado de las dosis, frecuencias de aplicación y mezclas de estos plaguicidas vegetales sin propiciar un real cambio de paradigma. Con la finalidad de evitar el seguimiento con la misma intención se ha recomendado el uso de extractos vegetales no para matar, sino para repeler plagas, evitar o disminuir la oviposición, afectar el crecimiento, reducir el peso, el desarrollo y la viabilidad, entre otros efectos plaguistáticos. No obstante, este nuevo enfoque en uno de los experimentos se observó algo inusitado. Al disminuir las dosis y aplicarlos al follaje, con la posterior presencia del insecto plaga, se observó que se protegió la hoja, se redujo considerablemente la defoliación de 95 a 100% y no se eliminó a la plaga y se resolvió el problema de manera diferente. Esto llevó al cambio de la percepción; a usar las sustancias vegetales no para matar ni manejar plagas sino para proteger cultivos. Con esta nueva visión, se buscó el uso de otros preparados vegetales y seguir disminuyendo las dosis para evitar el daño y mejorar el sistema de defensa del cultivo. Entre varias opciones se encontró la perspectiva de los biodinamizados y fermentados. Los primeros con suma de energía mediante un proceso sistematizado de dinamización y los segundos mediante un proceso natural de fermentación. Ambos se diluyen en agua y se aplican al suelo y al cultivo para bioestimular y fortalecer al cultivo e inducir resistencia contra plagas y enfermedades. En la implementación de otras formas de incorporar energía al disolvente y seguir disminuyendo las dosis se empezaron a trabajar sucusiones y ultradiluciones, de esta manera se inició con la agrohomeopatía para proteger cultivos. Varios homeopáticos vegetales no solamente protegen cultivos, sino que aumentan el crecimiento y el rendimiento. Además de éstos también se han preparado y aplicado los nosodes de la propia plaga o enfermedad. El nosode del virus del mosaico de la calabaza inhibió el desarrollo de este virus en 73.3%. El nosode de la roya del café Hemileia vastatrix en mezcla con otros homeopáticos evita la defoliación; así al no caerse la hoja por el daño del hongo, se realiza la fotosíntesis normal y hay producción. En la conchuela del frijol Epilachna varivestis, mosca mexicana de la fruta Anastrepha ludens, en el gorgojo del maíz Sitophilus zeamais y mosquito del dengue Aedes aegypti también se ha observado efecto; no obstante su mejor actividad es en el cultivo, donde se evita la acumulación de compuestos secundarios no terminados, equilibra la biosíntesis de aleloquímicos, elimina el estrés, regula la fisiología y el metabolismo, incentiva los mecanismos de defensa, restituye la salud de la planta y propugna la verdadera fito-sanidad.