¿Ya habéis aterrizado en Nueva York? ¡Qué rapidez!
A continuación, veréis una lista de tareas que realizaréis por parejas o de manera individual, según se os indique.
A medida que las vayáis realizando, tendréis que compartirlas conmigo enviándolas a la dirección de correo electrónico que figura en la portada.
Leedlas con atención y seguid sus indicaciones.
¡Seguro que realizáis interesantes descubrimientos!
Escuchad la versión tradicional del cuento de "Caperucita Roja" (encontraréis el enlace al audio en la pestaña de "Recursos y materiales") y, después, cread mediante Google Drive una tabla en la que comparéis los rasgos de los personajes de dicha versión con los que aparecen en Caperucita en Manhattan.
A continuación, responded en el mismo documento a las siguientes preguntas:
Sara Allen, la protagonista de Caperucita en Manhattan, adora las farfanías, esto es, palabras inventadas por ella misma, y dotarlas de significado. Para ella, este juego le permite crear su propio lenguaje y expresar ideas mucho más interesantes que la cháchara de sus padres.
La actividad que os propongo es levemente distinta. A continuación veréis una lista de palabras curiosas y bellas del castellano. Uno de vosotros dos tendrá que escribir en un documento de Google Drive la definición de las primeras tres y, después, acudir al enlace de la segunda tarea (en la sección de "Recursos y materiales") para descubrir su definición real. Después, leerá ambas definiciones (la real y la inventada) a su compañero o compañera para ver si es capaz de acertar cuál es cuál.
Cuando terminéis, os intercambiaréis los roles y repetiréis el mismo proceso con las cuatro siguientes palabras.
Finalmente, cada uno de vosotros creará y escribirá en el mismo documento tres palabras totalmente inventadas y les asignará una definición. De esta manera, contaréis con vuestras propias farfanías.
¡Mucha suerte, y a inventar!
Lista de palabras (primera ronda):
Lista de palabras (segunda ronda):
En la novela, Sara Allen compara la isla de Manhattan con un jamón que tiene un pastel de espinacas en el medio (el pastel sería Central Park).
A lo largo del libro, cuando se habla de "el jamón", los lectores sabemos que esta palabra se usa a modo de metáfora.
Las metáforas nos permiten encontrar similitudes entre cosas aparentemente inconexas. Además, dotan de un toque de fantasía a lo cotidiano y, así, nos permiten ver el mundo con ojos nuevos.
Ya que nos encontramos en la Gran Manzana (metáfora de Nueva York), os invito a pasaros por la sección de "Recursos y materiales" y ver un breve vídeo lleno de las metáforas muy insólitas (se trata de las greguerías de Ramón Gómez de la Serna, que mezclan lo metafórico con el humor).
Después de ver el vídeo, os reto a crear metáforas a partir de las siguientes palabras (no olvidéis escribirlas en un documento de Google Drive):
Árbol: Un árbol es...
Sombrero: Un sombrero es...
Abrazo:
Estatua:
Cuento:
Puente:
Parque:
Como bien sabéis tras haber leído el libro, Sara Allen soñaba con visitar la librería de Aurelio Roncali, que imaginaba como un reino en el que él era el rey.
Entre sus historias favoritas se hallaban Alicia en el País de las Maravillas, Robinson Crusoe y Caperucita Roja, por supuesto, porque a través de ellas descubrió el valor de la libertad.
En un archivo de audio, esta vez de forma individual, cada uno de vosotros narrará qué historias o libros de la infancia le han marcado de forma especial y por qué (la duración mínima del audio será de 4 minutos y el audio deberá ser editado mediante el software libre Audacity).
A continuación, iréis a la pestaña de "Recursos y materiales" y haréis clic en el botón "Recomendador" de la revista digital El Templo de las Mil Puertas para descubrir cuál será vuestra próxima lectura especial y comentaréis cuál es el que habéis escogido de entre los resultados que os han salido a partir de las preguntas que el recomendador os ha planteado y por qué creéis que puede gustaros (grabad y editad esta información en un nuevo archivo de audio).
Por cierto, en la pestaña "Recursos y materiales" os he incluido una reseña de Caperucita en Manhattan y un artículo sobre Carmen Martín Gaite por si queréis saber más acerca de la autora y su obra.
A Sara Allen no le gustaban los finales de sus cuentos favoritos: no entendía por qué el lobo tenía que ser malvado, ni por qué Alicia debía despertar de su sueño, ni por qué Robinson Crusoe debía volver a la civilización, y por eso se sentía libre de jugar a cambiarles cosas y a inventarles otros finales.
Esto mismo es lo que hace Carmen Martín Gaite en Caperucita en Manhattan: coge un cuento clásico y lo reescribe para adaptarlo a nuestros tiempos y transmitir un mensaje de amor por la libertad.
Pero es que, además, la propia Sara Allen es capaz de reescribir su cuento y tomar sus propias decisiones.
En un documento de Google Drive, y de forma individual, responded a las siguientes preguntas:
Una vez hayáis contestado a estas preguntas, os propongo continuar con Caperucita en Manhattan a partir de su final (esta tarea también será individual y tendrá un mínimo de 500 palabras):
¿Qué es lo que ocurre una vez Sara Allen atraviesa la alcantarilla rumbo a la Libertad?
Para ayudaros, en la sección de "Recursos y materiales" encontraréis un mapa de Nueva York, un poema de Carmen Martín Gaite leído por la propia autora y una lista de hermosas canciones que hablan sobre la libertad.
¡Disfrutadlo!