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"Nunca nadie me miró con tanta ternura y complicidad como vos" . Y si abriendo una puerta en la utopía del tiempo, nos encontramos en el aire de los días que no fueron... Y si por un instante te sientas a mi lado y con tu mano en mi mano me vuelves a mirar así, tan así!..., quizás antes de que se vuelva a cerrar la puerta de la utopía te quedes conmigo, o me lleves para siempre contigo... Marilyn!!
jcp
Caracas, 2017
Por el borde sensual y clandestino de la noche cabalgo la danza hechicera de tu encanto, colmando de pasión nuestros febriles antojos... Más en el hondo sentir del alma voy amandote en silencio tras el cristal empañado de un sueño... esperando que un día por fin te quedes para siempre conmigo... Mientras tanto respiro entre tus brazos, con la danza embargando los corazones en un mísmo latido y tus pasos con sus dibujos siguiendo los mios. Estos instántes de amante milonga y encanto robados al azar son para mi la vida.
jcp
Caracas, 2017
El día que me quieras nos iremos en bici a rodar todos los sueños que tuve contigo... Entonces en el camino, palmo a palmo y sonriente por el espejo del alma, sabrás que no hubo lugar ni tiempo que no hayas ocupado en mi mente...
A vos que sos sustancia de mis sueños!
jcp
Caracas 2016
Plaza Dorrego, domingos de Carlitos, Contursi, Manzi, La Merello, Sosa y Fresedo..., el Polaco, las alas de Eladia, los versos de Carriego... Baldosas con cortes del Indio Benavente..., Osvaldo y Pochi sobre el equilibrio de un adoquín amacando el 2x4 de la vitrola..., sacada y puente... Entre anticuarios, zaguanes abiertos, vereditas y adoquines, revoltijo de feria e historia... cobre, vidrio, plata, vinilo, acuarela, maní, café y tango... Un tibio sol de otoño asoma entre el barullo y los toldos de los vendedores de vintage y rancio. Tras un ventanal abierto de par en par invitación al paseo..., un improvisado gardeliano arrecostado al mostrador afina la viola, a su lado estampa de pebeta, con insinuante tajo en su falda y micrófono en mano, la misma sonrisa de la morocha que anoche en la milonga mientras bailaba con otro, me clavó sus faroles haciéndome sentir que era Delon... Utopias!..., historias sin terminar y otras por empezar... poesía de barrio arrancada del ayer flotando en el aire... Te quiero San Telmo!, melancólico y misterioso rastro porteño..., cuando estoy desorientado y no se que trole hay que tomar para seguir, aquí me siento sin prisa a escuchar el tiempo...
jcp
Caracas, 2016
"Se detuvo 10 segundos frente a mi..., y en el melancólico e insinuante aire de su mirada, se abrió una ventana al alma, donde daba todo el sol que jamás yo vi"
Primavera del 74, era el segundo día de mi primer París en una soleada y fresca mañana dominguera, con cercanos susurros del Sena... Salí del hotel, camine varias cuadras fantaseando con el estilo, el romanticismo y la magia parisina... Glamur y bohemia!!... Montmartre con sus cabarets, acordionistas y pintores, la majestuosa Torre Eiffel, Los Campos Eliseos (empezaría en el Arco del Triunfo, bajaría hasta Concorde y seguiría hasta el Louvre, y de ahí hasta la Ópera), la Ópera, el Louvre, la Gioconda... Después me juntaría almorzar en la casa de un matrimonio, amigos argentinos, luego iriamos a ver el partido de Rugby entre Francia e Iglaterra... Pero para comenzar el tour nada mejor que un desayuno en la exquisita bohemia de sus cafés. MMmm para mi Croissants Creme at Le Flore!! Di vuelta en alguna esquina, crucé el Boulevar Saint-Germain buscando una mesa libre para meterme de lleno en la historia del mítico Café de Flore, donde años "A" tenían cita y mesa fija entre otros personajes, nada menos que André Derain, Jean-Paul Sartre, Picasso, Ernest Hemingway, Truman Capote, etc... Todas las mesas en la calle estaban ocupadas, casi al final de la esquina, diviso una bella y coqueta dama de pantalones y campera de jean con el cuello levantado y gorro de lana negro al estilo musulmán, que llama al mozo y paga, deja un billete bajo la taza, saca un cigarrillo de su petaca, entonces me acerco solícito con mi encendedor en mano, ella se para y al voltearse me encuentro con su mirada... me paralice!, era la británica más hermosa del celuloide en persona. A medio metro de distancia la utopía del cine se desbarató ante aquella ineludible realidad de cuerpo presente, que iluminaba "todo" mostrando su femenino y sensual encanto. En aquel París de "película" me encontraba hipnotizado frente a la diva que tantas noches su imagen pobló de fantasías mi bohemia y sueños de Musset, novela y almohada... Y allí yo mágicamente frente a ella, como si la escena fuera un día cualquiera en Montevideo en las mesitas "Norteña" en la vereda del Bar Torrado de Uruguayana y Capurro, ofreciéndole el fuego de mi viejo "Zippo" a mecha, piedra y disán que gané en una Kermese de la escuela Capurro, parloteando francés con las cuatro o cinco palabras que mal aprendí en el Liceo Bauza del Prado... Te juro que se me salía el alma por los poros... Todo el París que me habían contado, leído e imaginado pasó a ser una anécdota mas quedando pequeñito y perdido ante ese supremo instante de emoción... Un grito interior me surgió de las entrañas... el Fénix no baja!!, aludiendo al grito de "guerra" que normalmente dábamos alentando al equipo de fútbol de mi barrio cuando corríamos peligro de irnos a la "B". Respiré hondo y arremetí... S'il vous plaît madame!!!... Con un rasgo de amabilidad, leve sonrisa y sosteniéndome la mirada, enciende en mi fuego su cigarrillo, mientras yo me desmayo en el tierno y melancólico aire de esa profunda y esmeralda mirada. Me saluda... Bonjour!! Merci!!... Bonjour madame!! respondí por instinto..., y ya con mi corazón latiendo a mil y mi precario francés que a esa altura no alcanzaba para transmitir el inmenso sentimiento que me provocaba, puse toda mi ternura en el asador y en uruguayo le lancé... ¿Mimí... cómo te gusta que te quieran para que en mi mañana parisina te quedes un ratito más ?... Creo que fueron 10 o 15 segundos sus "faroles verde esmeralda" pestañaron y se apoderaron de todos mis sentidos... Colgó su cartera al hombro y antes de ponerse los grandes anteojos oscuros..., en una actitud anti-diva, tan cálida y cercana, como si fuera la vecina de la vuelta de casa, con su mirada abrazadora, en una sonrisa cómplice que entibiaba más que el primaveral sol parisino, me susurró en un español afrancesado... Mimi!!... un ratito mas? jaja!!... J'ai aimé tu tangó argentino!!... jaja! merci!!... y cortesmente se despidió, no sin antes ofrecerme su mano mientras me regalaba otro bello paisaje de su calma y adorada sonrisa... A la prochain, bon dimanche!!... y se marchó... Me quede sentado como en una butaca de cine al finalizar una película que caló hondo, sin aliento, apoyando las yemas de mis dedos en el borde de la taza donde posaron sus labios, viendo su andar de gacela como se alejaba mezclándose entre la magia de las calles parisinas... Mientras por mi cabeza daba vueltas una y otra vez su dulce voz repitiendo la frase... "Mimí un ratito más jaja... J'ai aimé tu tangó argentino"... Su fragancia se había metido en lo más hondo de mi ser perdurando oculta hasta el día de hoy ahi donde se gestan los sueños... el lado virgen del corazón. En ese melancólico e insinuante aire de su mirada y en su dulce voz, me pasó en un minuto la vida y todo, todo el amor por el alma, el corazón y la cabeza. Es que en el ámbito del sentir la utopía es como respirar, por un instante sublime se transforma en certeza. Mimí!! hoy te fui a ver al cine !... "Welcome to New York" En tu madura edad seguís estando increíblemente interesante y guapa..., y tus ojos verde esmeralda en este San Valentín me volvieron a enamorar como en el París del 74... es que vos sabes? al verte en la pantalla, recordé en lo más hondo, aquella primavera cuando en la inmensa soledad del tiempo acerté a cruzarme con tus ojos... y en tu mirada se abrió una ventana al alma, donde daba todo el sol que jamás yo vi!! Bajo el cielo de París hay cosas increíbles que suceden solo una vez, y que unicamente la poesía del Tango puede identificar, dibujar o nombrar... Mi Mimí Jacqueline Bisset..., yo te soñe y te encontre en mi destino..., igual que ayer hoy te veo y te presiento, evocandote con mis delirios de poeta en esta inmensa soledad del tiempo...
jcp
Caracas, 2016
A donde va a parar el amor que no se consume... y los sueños sin concretar... En que rincón del Universo están los besos, las caricias, los abrazos, los afectos que nos dieron, los que dimos... a los que están y a los que se fueron... Los amores de abuelos, de padres, de hijos, de hermanos, de amigos... de amantes legales y de los escondidos... Donde están los amores amados por los siglos de los siglos ya sin cuerpo donde vibrar... Todos, todos junto a los sueños que tuvimos, en que lugar del Universo están, donde fueron a parar... En este bohemio andar, yo sólo se que las margaritas de otoño que hoy quedan al pie de mi umbral un día también partirán, y ya no tendré ojos para guiñar, voz para piropear, manos para acariciar, brazos para abrazar, labios para besar... entonces ya "ausente de lo vivido" bajaran y también se llevaran para ese lugar mi mayor posesión, mi más grande capital..., "los sueños que tuve y que se quedaron en mi almohada sin poderse levantar"... "Mientras Tanto"... sólo vos me ves querida mía... aquí sentado al abrigo de una sonrisa tuya, imagino un corso de astronautas con la luna a cuestas bailando por Callao hasta la eternidad...
jcp - Caracas, 2015
Y nos ibamos riendo vos y yo del brazo bajo la lluvia, sin más pretexto que el amor, con la única certeza en la piel y en el alma, que para nosotros siempre brillaba el sol.
jcp - Caracas, 2016
No es ternura lo grandioso, lo que sobresale y resalta..., sino el escondite..., el beso..., una sonrisa, la insinuación..., el abrazo, una flor... el abrigo, tu nombre titilando en mi celular, el café de la mañana en tu compañía..., el detalle de tu mano para cruzar aferrándose a la mía... No es ternura lo grandioso, lo que sobresale y resalta..., sino lo simple y espontáneo de tus cosas conversando con las mías...
No es ternura lo grandioso, lo que sobresale y resalta. Ternura es el embrujo de tu mirada escondida en mi sentir entibiandome los días...
jcp - Caracas, 2017
Y yo te esperaba apoyado en la barra del bar, con todas las ansias del tipo enamorado..., girando el hielo en el vaso de whisky, fumando un cigarro, haciéndome el superado ante las miradas de los demás, pero por dentro mi corazón latiendo a más no poder... Y vos llegabas igual que la luna llena cuando se posa sobre las montañas... luminosa, sonriente, bella, asomandote por sobre toda la gente..., buscándome con ese embrujo embriagador de tus ojos moros...
En ese fecundo y cálido instante, no necesitaba más que la caricia de tu mirada para saber que mi vida te pertenecía, que mi mundo sólo eras vos!!!
jcp - Caracas, 2017
De regreso la noche se va haciendo profunda y silente, con la bruma me pierdo dejandome llevar por el viento. Doblo la esquina del bar..., enfrente un vigilante hace ronda... Entre las ramas del pino se asoma sonriente la luna, juega sobre el muro con trazos de sombra... Para mis ojos te dibuja bella y sensual como ninguna. Siento tu fragancia en la brisa..., es que esta noche te hicieron para mi el pino, el viento y la luna. Te calzas los tacones, te sueltas el pelo y bajas del muro, veo tu movimiento, me acerco... te tomo de la cintura beso tu mejilla y sonríes..., te levanto entre mis brazos... con el brillo de la luna me miras y te inclinas, metiendote toda hasta el final de mi pensamiento... Camino, me doy vuelta, entre las ramas del pino me guiña la luna danzando con el viento... Contigo dentro me abraza la noche profunda, me voy durmiendo lento...
jcp - Caracas, 2017
Quinielero de suertes extrañas, camareros de pajarita en blanco y negro, sobre mesas de madera agrietadas de sueños azules por el alcohol, con emociones talladas a cortaplumas en el añejo mostrador, con el carrusel alegórico de la vida dialogando entre pasado y presente mientras San Telmo gira a tu alrededor... En esa escena cotidiana y en la huella de tu suelo damero, donde anónimos parroquianos buscan la inmortalidad, me diste en oro y en el sublime descaro de la juventud un puñado de amigos, copas, naipes, café, tabaco y filosofía... Domingos!... Domingos de aceitunas, Fernet con Coca o Gancia con soda y limón. Revoltijos de feria..., historia latente y patente. Domingos de kiosko en las tapas de Clarín, Crónica y La Nación... En Vicente López Balbín abrazado con Perón..., "Ringo" Bonavena y "Goyo" Peralta cruzan guantes en el Luna, "Pichuco" Troilo y Pa´ que bailen los muchachos en el Colón... Mientras, atravesando el Lezama, subiendo por Defensa bajo la autopista desde las vías y Alte. Brown, el arcano hechizo del fútbol con el "Ronco" y "Rojitas" va asomando en la tarde de clásico rumores de goool.
Dentro de tus ventanales... tango, política, romances, chimentos, fútbol, box y discusión. La jóven compañía y la vieja soledad se confunden al son de tazas, cucharitas y copas... sonriendo discretamente en el sordo murmullo de un descascarado sifón. Afuera sobre adoquines fileteados con historias de suelas criollas y forasteras..., plaza, gorriones pardos, saltimbanquis y entreveros del tiempo con su semántico barullo de barrio, pintaban en mi alma urbana poesía con afecto y mil un color... En la bohemia de tus noches de febrero con la luna turca colgada sobre el viejo ombú, entre cerveza tirada, cascaritas de maní y piropos de baldosas y esquina, mi premio mayor... la "Rusita" vecina, su melena al viento y esa sensual manera de taconear, mientras me sostenía el "deseo" en sus dulces y tentadores ojos negros llenos de misterios como el fondo del mar. Con ese atravesado y simpático acento ruso-español que le metía música del Volga y Riachuelo a mis oídos... Que te llamo, que me llamas, que te hago la seña corriendo la cortina... Después..., después pasos y abrazos de tango en lo del "Indio" Benavente, así en cuatro compases milongueros creció nuestro romance universal..., besos de zaguán y promesas bajo la higuera del patio español..., la pieza del conventillo de Humberto Primo y en el medio del pecho, aquella cálida esperanza de amor...
Cafetín... como un tesoro de todas tus cosas almacené por siempre esos días de gloria en la memoria del corazón. Fueron sólo tres años, porque quiso el destino..., quinielero de suertes extrañas, que mis pasiones, mis posturas, mis noches de ilusión y todas mis locuras... todo, todo lo perdí aquella tarde de febrero del 75 que la "Rusita" Tatiana con maleta y pasaje sin retorno a Moscú, subiendo al taxi en un doliente adiós besó mi mejilla y dando vuelta por última vez tu esquina, rumbo a Ezeiza se llevó para siempre mi juventud, encanto sublime, descarado y efímero de la vida. Mi sueño más feliz murió en aquel adiós...
Cafetín... "Sobre tus mesas que nunca preguntan, lloré esa tarde el primer desengaño..."
jcp - Caracas, 2016
Malena a veces repaso nuestras horas aquellas y te presiento, cuando en las tardes de invierno, al regreso del laburo venias por Rivadavia a mi encuentro, esperando en la esquina de "Las Violetas"... y yo con el corazón en el bolsillo... Un café, una charla amena, unos mimos y nos íbamos del brazo mas allá del pensamiento.... Cuando solamente tu sonrisa de tierna griseta alcanzaba para desmayarme de amor..., para embarcarme en cualquier camino del destino..., para beber de un trago contigo como sea la vida entera...
Estas en mi!... seguís en mi!... y en este febril delirio de poeta por Rivadavia y Medrano, tu sonrisa de griseta cada día vuelvo a ver...
Hoy cuando en sueños tu silueta se aparece, atravesando la niebla del tiempo como una estrella fugaz sobre mi almohada..., eso tan tuyo, ese algo tuyo que envolvió y encantó todo mi ser, sigue abrazándome el alma, animando de tibia esperanza mis noches de soledad.
jcp - Caracas, 2016
Con el sol de cada mañana llegaras a Casa Pueblo sin anunciarte, mientras el rumor del mar al besar la playa nos traerá el repique de un candombe en tu tambor... Y en cada puesta de sol, te despedirás bajo el aplauso, ahora junto a los de Figari y Picasso, el horizonte del este uruguayo también llevará los trazos de tu color...
Julio César Pisón
Caracas, 01 de marzo 2014
Abrazado en un suspiro a tu sentimiento, cuando suena un tango en el devaneo del 2x4, me dejo llevar por los latidos del corazón, por tu respiración..., y el aire que nos cruza el pensamiento. Entonces cuando vos y yo giramos al unísono sobre nuestras sombras, siento que todo lo que deseo de la vida y tengo, se resume en eso... Tanda de Pugliese! Remembranza! Venga el abrazo flaca! entre tus pasos y los míos quiero eternizar ese único y mágico momento...
jcp - Caracas, 14 de noviembre 2017
Mientras Malena canta el tango como ninguna... Elisa lo baila..., y en cada paso pone alma y corazón... Cuando las sombras giran sobre la pista y sólo se escucha la pena del bandoneón, su cuerpo se estremece en el abrazo, iluminado la escena de sensualidad y pasión...
A Elisa D´Angela (Padua, Italia)
jcp - Caracas, 4 diciembre 2016
Si alguna vez tus ojos me dejaran de mirar, a ningún lado yo sabria regresar. Sombras y reflejos de la vida y del breve espacio en que no estas..., vocación y ocupación de todo mi ser buscando acompasar los latidos de tu corazón. Antes que el olvido me lleve por sus caminos de sombras quiero plantar en el femenino y sensual jardín de tu humanidad mi expreso imaginario, para dar a luz el amor que desde siglos guardo en un cofre azul..., el amor que espera estrenar un corazón en dos tiempos..., el tuyo y el mío, singular contrapunto de mi más añorada utopía! Sombras y reflejos de nuestros caminos que por un instante acertaron cruzarse en la inmensa soledad del tiempo.
Es todo tan fugaz, por favor no te distraigas y mírame..., sos todo lo que quiero y siento..., mírame que una vida no me alcanza para amarte!
jcp - Caracas, 19/11/2017
Son Osvaldo y Viviana a puro corte y quebrada marcando el aire y los adoquines sobre el tapiz de un domingo gris, mientras Pochi espera sentada la próxima tanda entre maní y maní. Es San Telmo en invierno, es San Telmo de siempre..., es San Telmo, historia porteña contada entre anticuarios, rumores, pasos de tango y feria...
jcp - Caracas, 2017
11 de septiembre del 2001, en el mundo todo da vueltas! El terror y el dolor sacuden New York... En Buenos Aires, Malabia y Costa Rica, Palermo Soho, una adelantada primavera con fragancia caraqueña se asoma al balcón y apoyando su cabeza en mi hombro me abraza, entibiándome el alma..., arrancándome de amor la vida... Bajamos a la plaza? Dale!!...
Caracas 11 de septiembre del 2017, 6:30AM, pensaba ir a la pintoresca Colonia Tovar a pasar el día pero amaneció lloviendo... El majestuoso Ávila se borronea tras las gotas que se deslizan como lágrimas sobre el cristal del ventanal... La fragancia del café de la mañana ocupa el aire de la habitación y me puede apurando las ganas de servir una taza más. Caracas de gris y lloviendo mete mucha melancolía y mis ganas de abrir el viejo baúl. Con nostalgia revuelvo y observo mis recuerdos más preciados: una franela negra con imagen de Palafitos y un CD de Enya que pongo a sonar son lo más!... Entonces todo me da vueltas: vos y la música!, la música y vos!... Vos! como siempre dándole color y ndulzando la retrospectiva de mis pensamientos... Si! caminando del brazo por la Costanera Sur, Palermo, Puerto Madero, San Isidro,,,, en lancha por el Tigre o comprando antiguedades en San Telmo... que más da!... Historia sin final... Nada más que una vez amé en la vida, si! cuando nuestras miradas acertaron cruzarse en la inmensa soledad del tiempo, y entre mimos y promesas, acaricié por un instante sublime, el ensueño de estar contigo, de sentir latir tu corazón junto al a mio... Pero el reloj de nuestro tango no detuvo las horas... "Mándame las fotos! adiós! cuídate!..." La puerta del embarque se cerró detrás de ti..., rugieron las turbinas del Airbus de Aerolíneas Argentinas sobre Ezeiza rumbo a Caracas, llevándose toda mi ilusión...
Hoy a pesar de la distancia, del tiempo y las circunstancias que rodean a cada uno el andar, te susurro estas cosas del corazón al oído, para que no te lleguen por ahí extraños cuentos, o un domingo cualquiera lo publiquen en chimentos los paparazzi del Universal..., que contra todo pronóstico después de 16 años no te dejo de pensar..., que como un pirata romántico y amante de finales del siglo XVIII, a espaldas de la "cultura y las buenas costumbres" te sigo soñando, te sigo queriendo sin más!... Porque vos fuístes, sos y serás mi utopía, la casualidad más bella que perfumó mis días... Definitivamente cautivo de tu femenino encanto y sin renunciación al prodigio de amar, en la memoria más profunda y sensible del corazón te sigo sintiendo muy mía. Por eso contra viento y marea día a día, voy cruzando los mares de locura en los molinos de mis pensamientos tras tu canto de sirena...
Brindo por vos!! No se tu!... Yo he querido en esta "solicitada" piropearte, recordar en el aire que respiro lo que fuiste para mi... En fin, si un día descubres por ahí estas desgarbadas "letras al viento" y me lees en lo profundo, veras que yo sólo quería que lo supieras, y algo más pretencioso aún..., imaginarme que tus labios esbozaran un: que locooooo! mientras se dibuja una tierna y cómplice sonrisa en tu corazón...
"No hay mayor nostalgia que añorar lo que nunca sucedió... Un'emozione senza fine"...
jcp - Caracas, 11/9/2017
La belleza no necesita tiempo ni presentación, late tras el velo de los años su femenina y sensual ternura, basta observar el aire de una mirada, para reconocer en el alma esa sensación...
"Por siempre Marilyn eterna como el sol"
jcp - Caracas, 2015
Mientras el silencio del tiempo va cubriendo con su penumbra el alma, entibian mis sueños de otoño los rayos de un cálido sol carioca. Es tu dulce y nostálgica mirada que en un cruce de samba, bossa nova y caipirinha, en aquel bar de Itapuá se quedó para siempre en la huella de mi mirada. Es tu danza sensual y despreocupada, es el después de tu mano caminado lento por la playa, con los besos en flor, los te quiero, y mil caricias... Es el temblor del amor, es la pasión de lo vivido juntos pecho adentro... Luego tus cartas..., en cada palabra tuya fué mi vida... Es esta añeja e insistente utopía del tiempo, sensación que me embriaga al andar abrazado a tu recuerdo en la brisa, sintiéndote mía a pesar de la distancia, a pesar de esta peregrina y constante agonía...
Ayúdame a pensar con tu corazón, o me perderé sin tiempo en la melancólica memoria de esta sinrazón... Busco en tus cartas amarillas!
No se tu Luana!
jcp - Caracas, 2017
No importa si este sábado o el domingo hace frío o llueve... Al fin de cuenta al abrigo de los sentimientos, al corazón lo único que le importa es que a quien esperas... llegue!!
jcp - Caracas, 2017
Mirar la vida y un sueño a conquistar a través de la ventana de aquel viejo bar de San Telmo, para mi bohemia, tenía un encanto envolvente y embriagador... Si!! con el primer sorbo de café podía transformar la fragante utopía que asomaba por mi alma en color de certeza, mientras del otro lado del cristal me guiñaba la poesía.
jcp - Buenos Aires, 2001
Caracas... Lunes! allá arriba noche de luna turca entre la bruma flotando sobre el Ávila... Más acá la llovizna tenue salpica cientos de luces en el pavimento de la ciudad. Me sirvo otro ron, desde la ventana del hall la autopista serpetea y se mete en un túnel de neblina..., antes que desaparezca brinco y me trepo a ella en un sólo pensamiento... Suena T-Bone Walke con su "Stormy monday", entonces me dejo llevar por el misterio de la música y las galerías de la noche, para soñar y homenajear dentro del pecho, la melancolía y las voces libertarias del blues en los algodonales, que por siempre en estas melodías quedaron eternizadas
jcp - Caracas, 2017
A veces la vida se detiene frente a nosotros en un cálido guiño,
entonces por un instante sublime podemos palpar y palpitar sus
bellas y variadas formas con todos los sentidos... Te acordás L.R. ?,
1975 un rincón de ensueño lejos del mundanal ruido de la civilización,
vos pediste un Bítter Torino con naranja, yo una cerveza y el fotógrafo
casual nos regaló para siempre el bello detalle final...
jcp - Caracas, 2016
En todo tiempo hubo quien se fué en busca de un futuro más próspero del que estaba aconteciendo en la tierra natal... más el precio que se paga con nostalgia por los afectos arraigados que allá quedaron es muy alto y deja heridas idelebles en el alma, como también el inacabable desvelo de algún día poder volver...
Rindo mi humilde homenaje, a los inmigrantes que en sus diferentes destinos del mundo le pusieron y le ponen cada día, alma, corazón y vida a sus sueños de libertad Simplemente desde mi visión y sentimiento rioplatense, dejo este sencillo collage de sensaciones teñidas de tango. Son imágenes que recopilé de internet más escenas de cine tomadas de la película "Tango" de Carlos Saura.
jcp - Caracas, 4/9/2016
Su andar de gacela, su sensual taconear doblando la esquina del bar, su sonrisa repartiendo estrellas a los saltimbanquis del barrio... Me miraba y el sol, la luna y la brisa sobraban... Amor de fango, amor silvestre..., tierna alegría... Mientras tanto todo era tan bueno... todo era tan simple!...
La amé por la rambla desierta, en aquellas crudas tardes invernales, con el viento sur cruzando desde la bahía y las olas rompiendo contra el murallón... En ese destemplado paisaje, nuestra sensación térmica era la locura del amor, mientras las gaviotas planeaban sobre las olas y el maquinista del lento tren carguero nos pitaba y se reía... La amé cuando el saco no me alcanzaba para abrigar sus sueños, ni para el maní con chocolate y mucho menos para una entrada al cine Capurro..., salvo cuando el "petizo" Benze me hacía un guiño y en el intervalo de contraseñas nos colábamos en la matinée... La amé cuando iba al almacén del armenio Bartán a comprar con libreta, y al dar vuelta la esquina por Coraceros para abajo, yo salía detrás del árbol y cruzaba la calle corriendo a robar los pájaros de sus labios carnosos... La amé a media luz en aquel pasaje de adoquines con transparentes cómplices, mientras la luna cuchicheaba en su pelo un cuento con fragancia de jazmines y glicinas... La amé en primavera sentados en las escalinatas del parque donde charlábamos con palabras sencillas y tiernas bajo los tibios rayos del sol, y entre los colores de las mariposas descubríamos los placeres del amor... La amé a escondidas de su padre que era albañil, y cuando mis manos buscaron las faldas, supe que todo el ardiente febrero estaba escondido en sus muslos... La amé cuando la lluvia caía sobre aquel galpón de cinc en la carpintería del ruso y yo la miraba dormir mientras dibujaba remolinos en su melena azabache...
Suspiraba..., era hondamente mía... Que me quieres!! que te quiero!! ... que siempre seremos!!... Amor de fango, amor silvestre, tierna alegría..., todo era tan bueno... todo era tan simple!...
Después..., después por las calles del olvido corriéndole un telón al corazón, vino la vida con su tango de púrpuras y grises... Adiós castillo de barajas, el viento sur se lo llevó...
Hoy después de tanto tiempo volví al lugar donde me esperabas... Llueve!... todo está cambiado, el parque lo han cortado, la rambla señalizada, el bar cerrado, hay otras caras, muros extraños y alumbrado... pero nadie, nadie que me diga donde estas... si vives aún...
Llueve!..., para bien o para mal, desde que me fui de aquel lugar llevo amarrado en mi andar un susurro de barrio...
jcp - Caracas, 2016
La quietud, el movimiento y la distancia se funden con la inmensidad en una danza sin tiempo... Solo la ingenieria de la imaginación y el reflejo devenido de ella estan aptos para captar el instante de suprema conjunción... después, después son tan sólo nuestras libres interpretaciones...
jcp - Caracas, 2017