La red de espacios públicos y equipamientos es un servicio de los habitantes de nuestros pueblos y ciudades. La ubicación, el carácter y la calidad de estos espacios colectivos ciudadanos influyen de manera decisiva en nuestras relaciones y en el desarrollo de nuestra condición de comunidad.

Las demandas y necesidades con respecto al espacio responden a la diversidad de vivencias de las personas que conformamos la sociedad. Por lo tanto, debemos recoger múltiples puntos de vista y amplios aspectos para la organización de estas redes. Dentro de los procesos urbanísticos se encuentra la organización y diseño de la red pública, gestionada por la administración pública y guiada por profesionales de la arquitectura. Pero… ¿tenemos capacidad de entender e incorporar toda esta complejidad? ¿Las formas de creación de los profesionales de la arquitectura profundizan suficientemente en las múltiples necesidades de la sociedad?

Las comunidades se han organizado para satisfacer sus necesidades y esto nos ha demostrado que necesitamos nuevas formas de organización y gestión. Los arquitectos tenemos que colaborar con los agentes locales y en esta investigación proponemos la co-creación como modo de participación.