HISTORIA INSTITUCIONAL

Nuestra Asociación de Sordos se crea a partir de la inquietud de un grupo de personas Sordas interesadas en progresar como comunidad, por lo que desde el inicio todos los miembros fueron Sordos. La fundación institucional data del día 23 de noviembre de 1956. Rescatando la época de 1956, en Mar del Plata existía una veintena de personas Sordas, algunos adultos y otros menores de edad, quienes lograron el sueño largamente postergado: un lugar propio representativo de las personas Sordas en la sociedad. Derecho a su identidad. Las primeras reuniones fueron en las casas particulares de los socios y en aulas prestadas de las escuelas públicas. Poco a poco se fue concretando uno de los objetivos, la compra de un terreno con mínima edificación en zona céntrica, donde actualmente se encuentra ubicado el inmueble que es nuestra sede social, sita en la calle Belgrano 3908 de la ciudad de Mar del Plata. Esto se pudo realizar con el aporte particular de cada socio y con la obtención de ingresos por el otorgamiento del Municipio de una concesión de alquiler de sombrillas durante un año, en las playas públicas. 

Entre las actividades que ha desarrollado ASMAR es importante destacar el enorme apoyo brindado por nuestros socios para la creación, el 7 de marzo de 1960, de la primera Escuela para Niños Sordos de Mar del Plata. De la misma manera, se interviene en apoyo a la creación de C.E.F.A. Centro de Fonoaudiología y Escuela Privada para Niños Sordos, que funcionara reuniéndose en espacios de nuestra institución hasta que posteriormente lograra su propia sede. ASMAR aportó su ayuda y reconocimiento ante el Ministerio de Educación de la Provincia de Buenos Aires.

A lo largo de 63 años de trayectoria, ASMAR ha afrontado con mucho esfuerzo el sostenimiento de la sede, dedicándonos a la contención social, al progreso de las personas Sordas en sentido amplio, incluyendo su integración en la comunidad marplatense, contando económicamente solo con el aporte de los socios. Hemos pasado años muy difíciles por la limitada salida laboral de las personas Sordas en general. 

Con cada cambio de Comisión Directiva, se han desarrollado diferentes actividades, muy diversas, que se fueron perdiendo con el transcurso del tiempo y la evolución de la sociedad en general. Tuvimos también una época dorada, con equipos deportivos de fútbol tanto masculinos como femeninos y el tradicional concurso anual donde cada verano se elegía a una mujer Sorda como la Reina del Carnaval, con la participación de turistas provenientes de muchas provincias y especialmente de Capital.  Hubo talleres de diferentes oficios, en la sede y en ámbitos del Ministerio de Trabajo de la Nación, por convenio, con salida laboral. También cursos de enseñanza de la Lengua de Señas Argentina, LSA. Participábamos de actos públicos oficiales convocados por el Municipio. Siempre fuimos (y somos) referente de la comunidad Sorda en la ciudad. Desde el año 2013 la sede se encuentra cerrada al público por los graves problemas del edifico, filtraciones de agua, peligrosidad del tendido eléctrico. ASMAR continuó y continúa trabajando fuertemente, aunque lo hacemos en sedes prestadas, en casas de los socios, en cafés, en otras instituciones solidarias, por eso decimos que trabajamos “a puertas cerradas”. No significa que estemos dentro de la sede, ya que ni siquiera un número reducido de socios puede ingresar. Hay riesgo de vida. 

Nuestra actividad principal de este momento: nos encontramos tratando de solventar, con muchas dificultades, la cuestión edilicia. 

Nuestro objetivo: ¡poder hacer un nuevo techo y reabrir la sede!