Ayuda a conservar la memoria. Esto es debido a que es rico en potasio, magnesio y fluoruro. Por lo tanto, a la larga también previene enfermedades como el Parkinson o el Alzheimer. No obstante, en cuanto al Parkinson se refiere, no está claro si tiene una influencia directa con el café o no. Un estudio de la Universidad de Hawai demostró que las personas con más alto grado de cafeína en la sangre eran menos propensas a sufrir esta enfermedad. Sin embargo, otros estudios llevados a cabo no encuentran ninguna relación entre el café y el Parkinson.
Aumenta el rendimiento físico y mental. Esto quizás no es ningún misterio…¿Qué haríamos sino sin nuestra dosis diaria de café por las mañanas?
Tiene alto grado de antioxidantes. Gracias a esto, puede tanto retardar el proceso celular de envejecimiento, como combatir contra el estrés oxidativo de la diabetes del tipo 2.
La cafeína dilata los bronquios. De esta forma ayuda, entre otras cuestiones, a poder respirar mejor, lo cual es una buena noticia para los asmáticos.
También dilata los vasos sanguíneos. Como causa-efecto, ayuda a disminuir los dolores de cabeza y la mala circulación sanguínea. Y este último dato es especialmente interesante para las mujeres: puesto que reactiva la circulación sanguínea, es perfecto para eliminar la celulitis y quemar las grasas que se instalan entre nuestros tejidos musculares.
La Stevia, es originaria de la cordillera de Amambay entre Paraguay y Brasil y era consumida por los indios Guaraní antes de la llegada de los españoles, por esto se puede decir que es uno de los edulcorantes más antiguos de los que se tiene registro. Esta planta puede consumirse en forma líquida, granulada y como hoja seca en polvo
Tiene 0 calorías, es totalmente acalórica.
Beneficia a personas con hipertensión, la Stevia actúa como hipotensor y cardiotónico, es decir, regula la tensión arterial y estimula los latidos del corazón.
La Stevia es vasodilatadora, lo que significa que aumenta el diámetro de los vasos sanguíneos, por consecuencia mejora la circulación y es de gran ayuda para personas que padecen enfermedades de origen vascular.
Esta planta es ideal para los diabéticos, pues su composición permite que pueda ser un sustituto bastante saludable del azúcar.
La Stevia tiene propiedades antibióticas, las hojas de esta planta brindan protección antibacterial contra bacterias de la mucosa bucal y hongos, como la Candidiasis vaginal. Adicionalmente, este se usa en dentífricos y chicles porque su uso ayuda a prevenir las caries.
Además las persona que consumen Stevia son menos propensas a refriados y gripes.
Inclusive, también se utiliza como cicatrizante y antiséptico en heridas y quemaduras.
Aconsejable para perder peso ya que reduce la ansiedad por la comida (tomar de 10 a 15 gotitas 20 minutos antes de las comidas) y al regular la insulina el cuerpo almacena menos grasas.
La stevia disminuye el deseo o apetencia por tomar dulces y grasas.
Realza el aroma de las infusiones o alimentos donde se añada.
Puede ayudar en la desintoxicación del tabaco y del alcohol, ya que el té de stevia reduce el deseo hacia estos dos tóxicos.
Previene e inhibe la reproducción de bacterias y organismos infecciosos.
La hoja de Stevia es entre 30 y 45 veces más dulce que el azúcar.
Es mas aconsejable para uso alimentario o para cocinar ya que a altas temperaturas, es más estable que el resto de edulcorantes
Ultimamente, y debido a una serie de problemas hormonales, he estado investigando como sustituir a mis sustitutos del azúcar. Llevo usando desde hace años stevia, sirope de agave, miel y panela para endulzar mi vida, y como alternativas a los edulcorantes artificiales, durante estos años me han sido de utilidad, pero parece que últimamente ya no son soluciones válidas para mi (al menos, temporalmente), por eso os voy a hablar del yacón.
Aunque todos estos edulcorantes proceden de plantas y productos naturales, no están exentos de la mano industrial y su consecuente refinamiento.
Por otra parte, y este es el punto que me ha traído hasta aquí, todos ellos sean naturales o no, hacen saltar tu índice glucémico en sangre.
Pero para entender toda esta demandante (de consumidores) oferta de edulcorantes, vamos a empezar por el principio, una apropiada clasificación, para haceros ver porqué, al final, me he decidido a probar el yacón.
La Stevia, es originaria de la cordillera de Amambay entre Paraguay y Brasil y era consumida por los indios Guaraní antes de la llegada de los españoles, por esto se puede decir que es uno de los edulcorantes más antiguos de los que se tiene registro. Esta planta puede consumirse en forma líquida, granulada y como hoja seca en polvo
Tiene 0 calorías, es totalmente acalórica.
Beneficia a personas con hipertensión, la Stevia actúa como hipotensor y cardiotónico, es decir, regula la tensión arterial y estimula los latidos del corazón.
La Stevia es vasodilatadora, lo que significa que aumenta el diámetro de los vasos sanguíneos, por consecuencia mejora la circulación y es de gran ayuda para personas que padecen enfermedades de origen vascular.
Esta planta es ideal para los diabéticos, pues su composición permite que pueda ser un sustituto bastante saludable del azúcar.
La Stevia tiene propiedades antibióticas, las hojas de esta planta brindan protección antibacterial contra bacterias de la mucosa bucal y hongos, como la Candidiasis vaginal. Adicionalmente, este se usa en dentífricos y chicles porque su uso ayuda a prevenir las caries.
Además las persona que consumen Stevia son menos propensas a refriados y gripes.
Inclusive, también se utiliza como cicatrizante y antiséptico en heridas y quemaduras.
Aconsejable para perder peso ya que reduce la ansiedad por la comida (tomar de 10 a 15 gotitas 20 minutos antes de las comidas) y al regular la insulina el cuerpo almacena menos grasas.
La stevia disminuye el deseo o apetencia por tomar dulces y grasas.
Realza el aroma de las infusiones o alimentos donde se añada.
Puede ayudar en la desintoxicación del tabaco y del alcohol, ya que el té de stevia reduce el deseo hacia estos dos tóxicos.
Previene e inhibe la reproducción de bacterias y organismos infecciosos.
La hoja de Stevia es entre 30 y 45 veces más dulce que el azúcar.
Es mas aconsejable para uso alimentario o para cocinar ya que a altas temperaturas, es más estable que el resto de edulcorantes
Ultimamente, y debido a una serie de problemas hormonales, he estado investigando como sustituir a mis sustitutos del azúcar. Llevo usando desde hace años stevia, sirope de agave, miel y panela para endulzar mi vida, y como alternativas a los edulcorantes artificiales, durante estos años me han sido de utilidad, pero parece que últimamente ya no son soluciones válidas para mi (al menos, temporalmente), por eso os voy a hablar del yacón.
Aunque todos estos edulcorantes proceden de plantas y productos naturales, no están exentos de la mano industrial y su consecuente refinamiento.
Por otra parte, y este es el punto que me ha traído hasta aquí, todos ellos sean naturales o no, hacen saltar tu índice glucémico en sangre.
Pero para entender toda esta demandante (de consumidores) oferta de edulcorantes, vamos a empezar por el principio, una apropiada clasificación, para haceros ver porqué, al final, me he decidido a probar el yacón.