Mi faceta docente me recompensa muchas veces con la frescura y energía de los jóvenes alumnos y de ellos, por supuesto, también aprendo cada día.Me gustaría que algunos me recordaran como la persona que les transmitió la emoción y pasión por el Arte.
También me preocupa mi postura respecto a ¿qué esperan de mi?, y no dudo en formarme e intentar escuchar sus demandas.