MI PRIMARIA EN EL COLEGIO
Era yo un pequeño niño cuando mis padres decidieron ingresarme a un colegio cerca donde vivía.
Apenas logre dormir esa noche al saber que iba a estar en un nuevo ambiente, estaba muy asustado, iba a estar con mas niños cosa que nunca había hecho porque siempre me la pasaba en la casa y nunca salía.
A la mañana siguiente, los besos de mi madre, al decirme adiós, venían a enjuagar las muchas lagrimas vertidas en el amargor de nuestra separación.
Ese día fue muy extraño para mí, conocí un par de niños y fue muy bien, era muy antisocial, pero ellos me buscaban para jugar, ese día también conocí a mi profesora, me pareció muy bien pero había un problema y es que ella era una señora de avanzada edad y se la pasaba muy amargada.
Empezó la primera hora y fue la hora de presentación, se presentaron todos y faltaba yo, me levanté y dije, “mi nombre es Sebastián Vargas y tengo 6 años”, todavía me acuerdo, fue un momento donde sentí muchos nervios, pero bueno, todo salió muy bien.
Era la hora de la salida y yo estaba esperando a mi madre para que me recogiera, llego ella, me saludo y me dijo “como te fue”, le dije todo lo que me paso, conocí “amigos” me divertí mucho jugando con ellos, conocí a mi profesora y demás cosas, me dijo “me alegra que te haya ido bien”.
Llegamos a la casa, me sirvió el almuerzo y después de eso me puse hacer las tareas que me habían dejado.
Ese año fue muy bien, llego diciembre y me dieron la noticia de que ya había aprobado las materias, me sentí muy feliz
Llego febrero del siguiente año, empezaba nuevamente las clases y estaba ansioso por entrar y mirar con que me iba a encontrar y si llego el gran día, entre al colegio y vi rostros nuevos y conocí mas gente, nuevos profesores y nuevos compañeros me esforcé mucho ese año para que me fuera bien y así fue, llego final de año y aprobé todo, me sentí muy feliz porque mis padres estaban orgullosos de mí.
Llego el siguiente año y me dieron la noticia de que no podía seguir en el mismo colegio por lo que era privado y no podían seguir pagando la mensualidad.