Prácticas culturales vinculados al proceso de crianza de los hijos e hijas de  madre migrante latinoamericana en Chile: una aproximación intercultural  desde la cotidianidad. 

Resumen:  Este trabajo da cuenta sobre las prácticas culturales desplegadas por la madre migrante  latinoamericana en el proceso de crianza de sus hijos /as, influenciados a su vez por los espacios precarios de subsistencia derivados de las condiciones de asentamiento de los colectivos migrantes  en Chile (Thayer, 2016) y por la existencia de una política pública de salud infantil, de carácter  hegemónico, que homogeneiza la crianza de los niños/as e invisibiliza la influencia sociocultural  y heterogeneidad de las prácticas de crianza (Peñaranda, 2011; Calquin, 2013). En relación a este  fenómeno, es necesario relevar la discriminación y sometimiento que vivencia la mujer-madre migrante producto de su pertenencia a colectivos situados en posición de subordinación (Izquierdo,  2004) y que limita su capacidad para abordar las aquellas prácticas de cuidado vinculadas a la  salud-bienestar de sus hijos/as desde su propia cosmovisión y espacios particulares y precarios de  subsistencia.  

Desde los supuestos teóricos que ofrece la interseccionalidad se espera, visibilizar las redes que se  imbrican a partir del género, etnia-raza y clase-status y que redundan en relaciones de desigualdad  establecidas entre el sistema de salud público chileno y las mujeres-madres-migrantes (Hill  Colllins, 2000; Santibañez, 2018) y que por lo tanto influencian las prácticas cotidianas de cuidado  y crianza de sus hijos/as. Como objetivo general se plantea analizar, desde la diversidad cultural,  como se conforma, durante los primeros cuatro años de vida, la práctica de crianza de los hijos/as  de madre migrante latinoamericana usuarios del sistema pre escolar y público de salud  pertenecientes a la Región Metropolitana. Como objetivos específicos se proyecta; indagar en las  prácticas de crianza desplegadas por la mujer-madre migrante a partir de los saberes propios y los  aprendidos desde su trayectoria migratoria, en la influencia de la precariedad de los espacios de  subsistencia y en la articulación de las pautas de crianza entregadas por el sistema de salud con sus  prácticas de crianza. Metodológicamente, se plantea un estudio cualitativo e interpretativo  sustentados, según Mead, en los supuestos teóricos del interaccionismo simbólico (Alexander,  1992; Polit & Hungler, 2000), a través de la realización de entrevistas semiestructuradas  focalizadas y grupos de discusión sometidas a análisis de contenido (Flick, 2007) desde una  perspectiva histórico social y de reconocimiento a la diversidad cultural (Van Dijk, 2016; Pardo,  2013) como manifestación de un fenómeno que representa la relación existente entre persona entorno-cuidado y salud (Leininger, 1999; 2002) y a la existencia de evidencia que da cuenta de  la influencia cultural y ambiental en las prácticas diferentes de crianza.