LOS SACRAMENTOS

En esta página vas a encontrar reflexiones y representaciones sobre los diferentes sacramentos que te ayudarán a entender lo que hemos estudiado en clase sobre este tema.

Recuerda que no sabemos todo y por eso estudiamos, dialogamos y buscamos la Verdad.

¡PAZ y BIEN!

El Papa Francisco nos habla del Bautismo

LA EUCARISTÍA: Dios entra en nosotros y formamos uno con Él.

LA COMÚN UNIÓN (Comunión)

El Papa Francisco nos explica el Sacramento de la CONFIRMACIÓN

SACRAMENTOS DE CURACIÓN:

RECONCILIACIÓN

y

UNCIÓN DE ENFERMOS.


SACRAMENTO

DE

LA CONFESIÓN

LOS SACRAMENTOS SON PARA

LOS VIVOS.

La Unción de enfermos

SACRAMENTOS PARA AYUDAR A TOD@S.

SACRAMENTOS AL SERVICIO DE TODA LA COMUNIDAD:

ORDEN SACERDOTAL y MATRIMONIO

Joseph Caraway nos cuenta cómo obró Dios para hacer saltar los «perfectos planes» que él se había hecho y llevarle así a la verdadera felicidad. ¿Qué es lo que hace que un chico deportista, con una buena beca en la universidad y una buena novia cambie sus planes de futuro completamente? Dios habla al corazón del hombre para decirle qué quiere de él. Descúbrelo en este programa de «Cambio de Agujas».

SACRAMENTO

DEL MATRIMONIO

RECETAS DEL MATRIMONIO

por Papa Francisco

El sacramento del Matrimonio en el Catecismo de la Iglesia Católica1659 S. Pablo dice: "Maridos, amad a vuestras mujeres como Cristo amó a la Iglesia...Gran misterio es éste, lo digo con respecto a Cristo y la Iglesia" (Ef 5,25.32). 1660 La alianza matrimonial, por la que un hombre y una mujer constituyen una íntima comunidad de vida y de amor, fue fundada y dotada de sus leyes propias por el Creador. Por su naturaleza está ordenada al bien de los cónyuges así como a la generación y educación de los hijos. Entre bautizados, el matrimonio ha sido elevado por Cristo Señor a la dignidad de sacramento (cf. GS 48,1; CIC, can. 1055,1). 1661 El sacramento del matrimonio significa la unión de Cristo con la Iglesia. Da a los esposos la gracia de amarse con el amor con que Cristo amó a su Iglesia; la gracia del sacramento perfecciona así el amor humano de los esposos, reafirma su unidad indisoluble y los santifica en el camino de la vida eterna (cf. Cc. de Trento: DS 1799). 1662 El matrimonio se funda en el consentimiento de los contrayentes, es decir, en la voluntad de darse mutua y definitivamente con el fin de vivir una alianza de amor fiel y fecundo. 1663 Dado que el matrimonio establece a los cónyuges en un estado público de vida en la Iglesia, la celebración del mismo se hace ordinariamente de modo público, en el marco de una celebración litúrgica, ante el sacerdote (o el testigo cualificado de la Iglesia), los testigos y la asamblea de los fieles. 1664 La unidad, la indisolubilidad, y la apertura a la fecundidad son esenciales al matrimonio. La poligamia es incompatible con la unidad del matrimonio; el divorcio separa lo que Dios ha unido; el rechazo de la fecundidad priva la vida conyugal de su "don más excelente", el hijo (GS 50,1). 1665 Contraer un nuevo matrimonio por parte de los divorciados mientras viven sus cónyuges legítimos contradice el plan y la ley de Dios enseñados por Cristo. Los que viven en esta situación no están separados de la Iglesia pero no pueden acceder a la comunión eucarística. Pueden vivir su vida cristiana sobre todo educando a sus hijos en la fe. 1666 El hogar cristiano es el lugar en que los hijos reciben el primer anuncio de la fe. Por eso la casa familiar es llamada justamente "Iglesia doméstica", comunidad de gracia y de oración, escuela de virtudes humanas y de caridad cristiana.