La Joven Orquesta del Sagrado Corazón (JOSC) tiene su base en un proyecto escolar que se inició en el curso 1988-1989, como iniciativa del profesor de música Xema Senabre a partir de noviembre de 1988.
Un año después, surge la idea entre los músicos de crear una banda escolar dirigida por dicho profesor y compuesta por instrumentos tales como el saxofón, el bombardino, el clarinete o la flauta entre otros. El repertorio en esta época variaba desde adaptaciones musicales de la Marcha en G de J.S. Bach hasta el Rendez Vous de J. M. Jarré, pasando por recopilaciones de obras de los Beatles.
Entre 1992 y 1996 se habían producido diferentes modificaciones en la instrumentación y el estilo, lo que desembocó en un cambio drástico a partir de 1996. Fue entonces cuando la formación original se desdobló en dos agrupaciones diferenciadas: el “Taller de Música” y la “Camerata Musicae”.
Se abandonaron los instrumentos de banda y se suplieron por flautas renacentistas y guitarras españolas, con el fin de buscar nuevas sonoridades. En aquel momento, el Taller, a cargo de las guitarras, se especializa en repertorio del Nacionalismo Español, además de repertorio de rock de guitarra, con autores y grupos como Eric Clapton, Led Zeppelin, etc.
Mientras tanto, la Camerata, compuesta mayoritariamente por flautas barroco-renacentistas, analiza e interpreta obras profanas y religiosas de dicha época (repertorio de Tomás Luis de Victoria, Cántigas de Alfonso X el Sabio, J. B. Comes o el cancionero de Upsala, entre otros).
No obstante, a finales de este periodo se decidió fusionar ambas agrupaciones, aspecto que dotó de fuerza y energías renovadas a la JOSC, sin perder el carácter y el repertorio característico que las diferenciaba.
Durante estos años, la orquesta tuvo la oportunidad de realizar intercambios musicales con coros y orquestas de otros puntos de Europa (Bregenz, Nantes, Colombes, Tours, Helsinki y Hamburgo), fomentando el intercambio cultural europeo y el aprendizaje y uso de lenguas extranjeras, a través de un lenguaje común: la música.
Tras presentar Xema Senabre su dimisión en el curso 2003-2004, asumió la dirección Anabel Teruel, quien siguió fielmente el legado y tradición de la orquesta, enriqueciendo el repertorio con obras como el Magnificat de J.B. Comes, Danza Española nº 5 de Granados y River de Ennio Morricone, además de otros títulos.
Durante esta nueva etapa, la JOSC tuvo oportunidad de participar en diversos proyectos (festivales de ApaNadal y ApaSolidaria en el Palau de la Música de Valencia, conciertos pedagógicos en diferentes colegios, actuaciones en el asilo Sequera de Burjassot y el de San Antonio de Benagéber) y en intercambios nacionales (Pamplona, Hondarribia) e internacionales (Hamburgo, Colombes, Noisy-le-Roi, Tours, Bregenz, Nantes, Helsinki, Santa Clara-San Francisco (EEUU)).
A consecuencia de la dimisión de Anabel Teruel en marzo de 2008, Javier Olmos Lázaro, en compañía de miembros veteranos de la agrupación, asumió la ardua tarea de transformar una agrupación que había sido diezmada por un agresivo cambio generacional y afrontó el reto de preparar a una joven e inexperta orquesta para un gran proyecto, como fue el XX Aniversario de la agrupación.
Se dio un giro radical al repertorio y se adaptaron obras antiguas con una forma de interpretación distinta de las mismas. Así mismo, se priorizaron y reflotaron las actividades sociales y lúdicas de la asociación durante los primeros años.
Durante esta etapa se vivió un periodo de expansión con nuevas incorporaciones, nuevos proyectos y un modo de entender la música, que pasó a conocerse popularmente entre los integrantes como el “hacer JOSC”.
Viajes como el de Sevilla, intercambios como el de Hondarribia-San Sebastián y Noisy-le-Roi, aportaron una gran vitalidad a la asociación, la cual continuó el legado musical de generaciones pasadas, dotándose de un espíritu propio con obras variadas y estimulantes (Pedro y el Lobo, de Prokofiev; Danza Macabra, de Camille Saint-Saëns; El Barbero de Sevilla de Rossini), no dejando atrás el repertorio más actual (Hey Brother, de Avicii; Rather Be, de Clean Bandit) y el apasionante mundo de las Bandas Sonoras del mundo del cine, los musicales y los videojuegos (El Padrino, Zelda Ocarina of Time, Nine, Star Wars, etc),
Para la divulgación de un repertorio tan ecléctico, la JOSC estableció contacto con bandas y orquestas diversas como la Jazz Band de Noisy-le Roi (París, Francia), el coro de la Sophie Barat Schule (Hamburgo) o incluso la Jazz Band “Déjà Vú” de Santa Clara (California, EEUU).
Aparte de sus múltiples incursiones, nuestra orquesta también innovó en el aspecto musical durante estos años y participó, en conjunto con el grupo de teatro, el coro de primaria y el cuerpo de baile del colegio Sagrado Corazón, en Musicales como “La Maldición del Escorpión de Jade” (una adaptación de la película con titulo homónimo del clásico del cine de Woody Allen) y “Fausto 20/20” (una adaptación del clásico de la literatura “Fausto” de J. W. von Goethe, pendiente de estreno debido a la emergencia sanitaria de la pandemia del COVID-19).
Todo ello, forma parte del resumen de los más de 30 años de historia de nuestra asociación, una historia que está lejos de acabar y que tiene su origen en cientos de músicos y socios que han formado parte de ella a lo largo de todo este tiempo y a los cuales hacemos extensible un sincero agradecimiento.