La historia del Club según... Pedro Ruiz

Post date: Jun 1, 2014 4:47:20 PM

Corría el año 1.972, cuando en el bar Novelty, de la calle Mayor de Las Arenas, observé que se celebraba un certamen de ajedrez, en el que participaban unos dieciséis o veinte jugadores.

Aquello me interesó y me informé sobre el tema, y de quienes eran los organizadores. Allí estaban los hermanos Basteros, director y profesores en el Colegio San Agustín, rodeados de amigos y profesores asimismo.

Una buena nómina de ajedrecistas de primera del club Portugalete, como eran: Pedro María Vega, Angel y Antonio Serrano, Blázquez y algún otro, disfrutando el torneo a los Basteros, Ignacio Elorriaga (después presidente del Getxo y de la Federación Vizcaína), Meissmer y Mena, principalmente.

Yo, ya con treinta y cuatro años y olvidado del tema más de diez años, observé algunas partidas y pude recordar aperturas, clavadas, ataques de mates y… Desperté otra vez para el ajedrez.

Unos días después se convocó otro torneo, con los mismos jugadores, en el que fué ya la sede del Club de Getxo durante los ocho años siguientes. El Club Ciclista Santa Ana de la calle Mayor de Las Arenas, vivió el desarrollo y crecimiento lento de nuestro Club.

Y allí fuí yo a competir con aquellos jugadores de “perfil activo”. Jugadores de primera mezclados con terceras y segundas que acababan de llegar y sin categoría federativa.

Fué una buena experiencia volver a vivir aquel ambiente.

Vega y los Serranos, además de Javier garrido, disfrutaron con sus victorias. Blázquez solo era el animador, el aspirante que “nunca llegaba”. Y Juan Basteros, el mejor de los tres hermanos, no podía competir con aquellos jugadores. Al final, siempre le relegaban a un buen puesto final Y yo, pues recordé lo que pude y me batí bien. Lo mejor fué la victoria sobre Pedro Mari Vega, cuando ya iba destacado en cabeza. No aceptó las tablas que le ofrecí en una Siciliana y, poco después perdió un caballo… y se rindió.

El torneo no llegó a su fin (no recuerdo los motivos), pero a mí me sirvió para recordar la época de estancia en San Sebastián, donde puede hacer 7,5 puntos de nueve, en el torneo por equipos provincial. Más tarde perderíamos la semifinal en la copa ante la Peña Gazteiz, donde yo conseguí, ya en el primer tablero, 1,5 puntos ante un jugador de apellido Sismilov. Dos buenas partidas a mis 23 años, que nos dejaron en el camino, para ver cómo Eibar quedaba campeón.

El Club de Getxo continuó su marcha en solitario. Los jugadores del Club Portugalete volvieron a sus torneos y “nosotros” organizamos nuestros propios torneos. diez, doce poco más, luchábamos con más o menos suerte. Al final, la tabla clasificatoria no difería gran cosa.

Yo, gané tres años. Iturriaga hacía segundo alternando con Basteros y Meissner, un austriaco que agotaba mi paciencia (jugábamos sin reloj) y “me robó” alguna victoria haciéndome abandonar hasta con pieza de ventaja. Se limitaba a “pensar y no mover” y … a los demás la familia y los hijos nos llamaban…

Durante esos años fuimos participando en los torneos y ligas con suerte diversa, ya que el potencial del equipo no daba para más. Pedro Ruiz Luján, Angel Diaz, Ignacio Iturriaga, Meissner, Mera, Aldecoa y “la perla” de aquellos años Andrés Llompart, que contaba sus partidas por victorias: 8,5 puntos de diez posibles, en el cuarto tablero, formaban el equipo.

Logramos ascender a 2ª categoría. Después lo hicimos a 1ª, y esto fué el máximo logro hasta el año 1.980.

Puedo agregar que sufrí mucho en el primer tablero. La máxima puntuación que conseguí fueron 6,5 puntos de ocho posibles, y que aquel año se consiguió el ascenso a primera con los puntos de A. Llompart, siempre un seguro eficiente, y la buena ayuda de los demás componentes del equipo.

Y conseguimos más. Conseguimos que se nos conociera y respetara en tanto íbamos participando y consiguiendo ascensos individuales en los torneos oficiales. ¡ya éramos jugadores de primera!.

Después, solo Andrés Llompart conseguiría el ascenso a categoría preferente, aunque sus estudios de Física y su trabajo, en Mondragón primero, y en Vitoria después, le hicieron dejar parcialmente el ajedrez.

No eran fáciles aquellos torneos. ¡No! No lo eran, y tampoco el torneo “Primavera” de Portugalete, a donde íbamos a entrenar. Allí se daba cita la élite de aquellos días: Jose Luis Fernández, después Gran Maestro Internacional; Juan Mario Gómez, campeón de España y GMI,; Juan Carlos Fernández, magnífico jugador; Pablo Ugarte, excelente y retirado prematuramente; Jose Angel Vesga, dotado de clase innata y con los gambitos más sofisticados; Jose María Narbaiza, clase, elegancia. Y alrededor los demás: Javier Garrido, con poder de convocatoria, y un amplio etcétera. Todavía no sé cómo llegué a clasificarme quinto en uno de los torneos.

En aquellos días una corriente renovadora hizo que en 1.981 trasladáramos el Club a Fadura. Fué la gran eclosión. Veinticinco jugadores en el torneo de primavera. ¡Ver para creer! Narbaiza pasó a ser por derecho el primer tablero. Después Garrido, ya preferente, Llompart y Pedro Ruiz, trasladado a Palencia por motivos de trabajo, sólo jugó alguna partida.

Pero hacia 1982, la nómina fué aumentando en cantidad y calidad. Decidieron jugar con Getxo los magníficos Juan Carlos Fernández y Vesga, que reforzaron el equipo. El equipo de competición era aproximadamente:

    • Juan Carlos Fernández
    • Jose Angel Vesga.
    • Jose María Narbaiza
    • Javier Garrido
    • Andrés Llompart (un seguro a todo riesgo)

Y así, rápidamente, se consiguió el ascenso a categoría Preferente.

Mientras tanto, un segundo equipo sembraba el pánico en Primera Categoría: los hermanos César y Javier Rodriguez Balzategui, con apenas doce y catorce años más José Antonio Puertas (d.e.p.) y algún otro, iban labrando el futuro del Club.

En aquellos años, el equipo se batía con Rey Ardid, plagada de campeones de Vizcaya, Zuri Baltza, Basauri, etc.

Eran épicos los encuentros con Rey ardid: Zabala, Ochoa, Carnicero, Aguinagalde. Los campeones año tras año, enfrentados a Getxo que no paraba de crecer.

En el año 1.982 se celebró el último torneo de partidas rápidas con la ausencia de nuestras figuras más relevantes. Quedó campeón Narbaiza, y, contra todo pronóstico, Pedro Ruiz fué segundo. Tuvo que vencer en una Grünfeld, en el sistema Asa (?), al campeón, para relegar al tercer puesto a Llompart, y en el cuarto a J.A.Puertas.

El torneo Primavera no recuerdo quien lo ganó, pero si sé que gané otra Grünfeld a José Martín Naverán, aunque estuve ayudado por el reloj, ya que llegó tarde y se cargó de tiempo.

En 1983 aparece otro gran jugador de Club en escena. José Ramón Arrupe me es presentado por el presidente Juán Mas. Las palabras fueron “es un gran jugador” había sido campeón de Vizcaya y jugado el campeonato de España con Rey Ardid. Jugó el campeonato asimismo en Madrid, y se enfrentó en simultáneas a Spassky, Karpov y Annand. magníficas partidas, con algunas tablas contra estos campeones.

Y, al fin, hacia 1984 llega el Club Getxo a su esplendor. Fernández, Ugarte, Vesga y la nueva savia, Arrupe y los hermanos Rodríguez. ¡un maravilloso equipo! Fernández ganándole a Zabala, que acababa de vencer en el campeonato de España por equipos al G.M. Diez del Corral con una Trompovski.

José Ramón Arrupe, Ugarte y Vesga, entablando con Carnicero y dos buenos preferentes. Y en rondas alternas dando entrada en el equipo a César y a Javi Rodriguez.

No tardaron en conseguir el campeonato de Vizcaya, la Copa y los torneos de rápidas. Fueron unos años de gloria para el Club. Y hubo que jugar la Liga vasca… Los resultados ya no fueron iguales. Los equipos de Guipuzcoa, Gros, etc, reforzados con Grandes Maestros, fueron invencibles.

Comer a las doce, jugar de cuatro a nueve, más las partidas aplazadas. Regresar a las once de la noche… fué demasiado. Y nuestro equipo fué abandonándose.

Hubo partidas gloriosas, ¡claro que las hubo!. Aún recuerdo a César Rodríguez decirme: “Pedro, he preparado una partida para ganar en 27 movimientos”. No sé quién fué el contrario. Todos eran muy fuertes en la Liga Vasca, pero sí recuerdo que un jugador, tal vez de Gros, porque era de Guipúzcoa, rindió su rey ante un jaque de caballo en f6, en la jugada veintisiete… ¡aquello fue maravilloso!

Y mientras tanto Javi Rodríguez se hizo invencible en rápidas. Y el equipo tuvo una década dorada, del 84 al 95, aproximadamente. Los demás, con hijos y años, pasábamos a la reserva o a los equipos inferiores.

Vimos cómo Arrupe conseguía ser campeón de Vizcaya a los 62 años, y también cómo prácticamente se retiraban parcialmente los demás. Trabajo, matrimonio, hijos, etc. una losa que se opone al ajedrez aficionado. Pero el Club de Getxo ¡Había triunfado! Por el año 2000 pocos quedaban en activo y con ganas de competir a nivel de Liga Vasca, así que todo se reducía a las Ligas de Vizcaya.

Ya no había forma de reunir al equipo. Durante unos años César y Javier Rodriguez, con Arrupe, Galarza y A. Moretó, lucharon por mantener el prestigio. Pero nunca se lograba presentar el equipo completo. Uno o dos siempre faltaban, y el resultado caía evidentemente.

La época siguiente, el 2010 muy cerca, dió paso a otros jugadores, que en nada recordaban a los anteriores. Jugadores como Luis Rubio o César Herrero, y otros por el estilo llevaron el equipo adelante. Se perdió la categoría y hubo que luchar nuevamente en Primera y Segunda Categoría, A partir de 2009, el equipo se reestructuró algo:

Javier Rodriguez jugaba cuando podía; Arrupe le ayudaba, pero ya iba para los ochenta años; Salus comenzó a defender el segundo tablero; Gorka luchaba en el cuarto; Enrique, peleaba en el cuarto. Y más allá: Alfonso Tejedor, con técnica de Gran Maestro, jugaba dos o tres partidas en el año. Y sí, hasta Pedro Ruiz tuvo ocasión de jugar una partida por año, cuando no había jugadores para hacerlo, y con sus más de setenta años. (72-75)

Esta reestructuración llevó consigo el conseguir el ascenso a Preferente. Pero ese año se evidenció que faltaban jugadores como César Rodríguez, que figuraba en el equipo sin jugar una sola partida.

Y hemos llegado a 2014. Hemos dado nuestro adiós en 2013 a José Ramón Arrupe, a los 82 años de edad, y hemos celebrado un torneo de la Amistad en su honor, que, como es lógico, ganó el Club Sestao, con dos G.M. a la cabeza.

Nuestro Club se debate en Primera Categoría, y añora las proezas anteriores. Hay nuevos jugadores, Luis Naverán (hijo), sin olvidar a Benito, Jairo, Alvaro, Aitor o Peio y Jokin, pero aquel equipo glorioso será difícil de repetir. Esperemos que:

    • José Ramón Arrupe (d.e.p.)
    • César Rodríguez
    • Javier Rodriguez
    • Pablo Ugarte
    • Juan Carlos Fernández
    • José Angel Vesga
    • José María Narbaiza

hayan dejado semilla suficiente para la renovación de laureles. ¡Todos fueron formidables!

Mientras tanto, seguiremos luchando con equipos en Primera y Segunda categorías. Forjaremos nuevos valores empezando en Tercera. Y seguiremos pidiéndole a Javier Rodríguez que vaya al frente del equipo. si hay suerte, hasta César jugará alguna partida.

Y no deseo acabar sin dar las gracias a don Francisco Pérez (Paquito), por la colaboración qeu hace al equipo al ceder su local para el entrenamiento diario. Y el Club de Getxo invita a todos los jugadores que lo deseen a participar en las partidas rápidas que se celebran.

¡Viva el Club de Getxo!

29 de mayo de 2014

Nota: Otros verán otra historia. ¡Cómo no!. Pero esta es la mía. La que yo he vivido, a intervalos, con ilusión.