Historia


Web de José Ramón Francia Silva

Descendientes del Solar de Tejada en El Horcajo

Para hacernos una idea de lo que podía ser El Horcajo a partir del siglo X, que es desde que se tiene constancia por los descendientes del Solar de Tejada, es conveniente leer lo relativo al Solar de Tejada en el apartado que aparece en esta web y así comprender no solamente la cantidad de habitantes que hubo, sino también la relación entre todos los convecinos de las aldeas del municipio de Lumbreras :

Las primeras investigaciones de San Martín Pérez (2006) dan estos resultados:

El linaje de los Codés

Linaje Codés. Descendencia de don Juan de Codés. Marqueses del Romeral y de Montesa.

· Décima rama, los Codés de El Horcajo.

APELLIDOS: Codés y Hernández, Codés y Mudo, Codés y Codés, Gómez y Fraile, Codés y Gómez, Jorro y Sánchez Riscos, Codés y Jorro, Torres y Taracena, Codés Tejada y Torre, Codés Tejada y Martínez, Codés Rubio y Tejada, Martínez y del Río, Codés y Torre, Codés Tejada y Rubio, Codés y la Cámara, Rubio y Martínez, Hernández Riscos y Hernández, Codés y Hernández Riscos, Cámara y Lumbreras, Cámara y Elgueta, Lumbreras y Gregorio, Torre y García de Olalla, Torre y Martínez, García y de Olalla, Cámara y Codés, Torre y Codés, Martínez Terroba y Mudo, Martínez Terroba y Pérez, Río y Rubio, Codés y García de Olalla, García Rade y Fraile, Codés y del Río, García Rade y Rubio, García Rade y Codés, Cámara y Torre, Cámara y Lumbreras, Torre y García de Olalla, Codés y García Rade, Blanco y Rubio, Codés y Blanco, Pérez y Martínez Yanguas, Codés y Pérez, Martínez Terroba y la Peña, Codés y Terroba, Jorro y Martínez.

TÍTULOS: Señores de Tejada.

Catastro del Marqués de la Ensenada: El Horcajo (1749)

En total había en el pueblo 1.236 ovejas, 89 cabras y 10 vacas.

El vecino Juan Martínez Terroba tenía 1.220 ovejas. Pedro José de Codés 266 ovejas y Pedro León Martínez 108 ovejas.

Tres vecinos tenían entre 80 y 90 cabezas de ganado lanar.

Seis vecinos entre 50 y 80 ovejas.

Cinco vecinos entre 25 y 49.

Y seis vecinos más, menos de 25.

Nacimientos entre 1750 y 1800: Efectos de la trashumancia

Sin duda uno de los datos más significativos ha sido el plasmado mes a mes, y año tras año en la parroquia, en la iglesia. El número de nacimientos, por la fecha bautismal dejada, nos hace adentrarnos en aquella sociedad de hace siglos que vivía, sobre todo dependiendo de la trashumancia

Efectos de la trashumancia en los nacimientos

Producto anual imponible

Por otra parte, en el Producto Anual Imponible, en 1850, vemos que D. Miguel Sáez, vecino del Horcajo, estaba colocado en el tercer puesto de todo el municipio (ver gráfica en Lumbreras)

El Horcajo en el Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de España..

El Horcajo según Pascual Madoz en 1850

Emigración a América desde El Horcajo

Podemos ver la emigración que hubo entre los años 1880 y 1930: Emigración a América.

Fueron, entre otros, varios de la familia Codés García. Obtendremos información complementaria, en la Web, de Lumbreras, Emigración de Lumbreras de Cameros a América.

De entre los emigrados a América he podido contactar con un biznieto de D. Isidoro Codés García (1849-1904), D. Álvaro Checa Calvo de Codés. Su antepasado emigró a México, posiblemente con su hermano Lorenzo Codés García, al que cito en esta Web (Hijos Ilustres de Lumbreras).

D. Isidoro Codés García

Vivió en este país americano pero luego pasó a residir en Madrid, donde ostentó la representación de varias marcas de cigarros puros americanos.

La familia que “levantó” el Pueblo

Los vecinos de los diferentes pueblos siempre han querido mejorar el suyo. Antiguamente tenían que ser los propios habitantes los que se tenían que poner “manos a la obra” para mejorar los edificios comunes y su hábitat, ya que las diferentes administraciones locales, autonómicas o nacionales hacían muy poco por los pueblos, sobre todo si eran pequeños. Y eso le pasó a éste. Así fue precisamente D. Juan Gómez y sus hijos los que se preocuparon y tuvieron que con una excavadora y a “pico y pala” hacer el camino para poder tener entrada con coches hasta el pueblo. Como decía el periódico “La Rioja” en diciembre de 1979 “solamente un camino de cabras llega hasta el pueblo”. La visión que hacía este diario no podía ser peor: “En El Horcajo no hay agua corriente, no hay luz, no hay nada.. La iglesia tiene hasta el reloj parado”.

Hasta que el Ayuntamiento de Lumbreras, en los últimos años se implicó de lleno en la mejora de las condiciones de vida, la familia Gómez-Martínez se preocupó y trabajó por su pueblo: El primer arreglo de la fuente se hizo con el dinero de Dñª Francisca Martínez. La Iglesia con sus frescos ahora restaurados está conservada porque esta familia no dejó que el mal estado del tejado acabara en hundimiento. Un trabajo duro les resultó también la traída del agua hasta sus casas y los hermanos Gómez Martínez tuvieron que llevarlo a cabo.

Casa de D. Juan y de Dña Francisca. Ella asomada al balcón; él sentado a la entrada. (Fot. La Rioja)

D. Juan Gómez arreglando la salma. Un invento de madera que puesto sobre la caballería sirve para transportar la hierba "mies", etc..

Podemos decir que los descendientes de Juan y Francisca: Juan, Pablo, Matilde, Elvira, Alicia, Consuelo, Rosario y Angelines se han preocupado y “son los responsables” de que El Horcajo se conserve con vida en sus casas y calles, de que haya habido también bodas y bautizos y no sea otro pueblo fantasma, como desgraciadamente ocurre por otros lugares.

El penúltimo vecino se fue a Torrecilla

Hasta 1980 aproximadamente, habitaba en El Horcajo también un pastor-curandero de gran fama en el entorno y fuera de él: D. Tomás García, hijo del también curandero “Tío Trifón”. Decían “Consigue prodigios en cuanto a devolver tendones a sus cauces musculares”. Todos lo sabemos y no hace falta que lo digan los diarios.

D. Tomás García (Fot. La Rioja)

Y era verdad lo que todos decían, que solucionaba los problemas de salida y rotura de huesos, sobre todo en las extremidades, de forma satisfactoria. Luego se marchó ya anciano a vivir con un familiar a Torrecilla.

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