Aramaiona

Historia

Aramaio: Del primitivo «ARABA-DI-ONA» se habría llegado al nombre actual, pasando por los estadios intermedios de «Arama-di-ona», «Aramai-ona», «Ara-mayona».  Su significado sería: «la colina del conjunto de los llanos». ARAMAIO =  «pastizal» o «helechal», siendo Aramayona -una variación suya. La poblacion de Aramaiona está distribuída en nueve  anteiglesias.”Anteiglesia” se denominaba en Vizcaya  a la comunidad de vecinos que se reunían en el pórtico de la Iglesia para tratar los temas de interés general. Llegando a formar una entidad jurídica similar a la que luego se denominó Junta Administrativa.  Cada anteiglesia era soberana en sus competencias y dictaba las ordenanzas o tomaba los acuerdos pertinentes para regular su vida pública. Mas tarde surgieron los Concejos, que agrupaban a varias anteiglesias. Este valle, conformado por diferentes barrios y caseríos dispersos, lugares principales son, además de la Ibarra, Arejola, Azkoaga, Barajuen, Etxaguen, Ganzaga, Olaeta, Untzilla y Uribarri.   

El escudo de Aramaiona es muy simple: flor de lis en campo azul oscuro, sostenido por dos leones y coronado por corona mural. El motivo principal es la flor de lis. Los leones y la corona son meros adornos sin significado conocido. La flor de lis era el emblema de los primitivos señores del Valle, según se nos afirma en la obra de Fray Martín de Coscojales, «Antigüedades de Vizcaya», al relatarnos los enterramientos en la iglesia de Zalgo (ahora llamada Ibarra, en Aramaio).Y era también la marca con la que el Ayuntamiento señalaba a las pesas y medidas oficiales, para evitar fraudes. 

Tiene 1.350 habitantes, la mitad de los cuales vive en Ibarra. Hace 100 años eran casi el doble.

Situación geográfica

El valle de Aramaio, con 72 km. cuadrados, 175 caseríos, y 28 ermitas,  está situado en medio de Araba, Gipuzkoa y Bizkaia. En su orografía predominan las pendientes. Al norte y noroeste, están los montes de Arangio y Gantzaga, siendo Orixol e Izpizte las cimas más altas. El monte Anboto también se encuentra cerca, con sus 1.330 metros y frente a frente tiene a Udalaitz (1.117 m). Entre estas dos cimas, aparece Besaide, que con su monumento nos señala el lugar donde las tres provincias vascas se unen. Al este, se encuentra el Murugain con 774 metros y al sur, camino de Legutio, Jarindo (896 m).

Los pueblos que hacen frontera con Aramaio son: al norte Abadiano y Atxondo y al este en cambio, Arrasate y Aretxabaleta. Si vamos al sur, aparecen las tierras de Eskoriatza, Gatzaga y Legutio y por último, al oeste Otxandiano. La sierra de Arangio divide el pueblo en dos, formando dos vertientes de agua.

Por un lado, está el río Aramaio. Es alimentado por las aguas que bajan por las laderas del este y pasa por Ibarra. Sigue hacia Arrasate, para luego unirse al río Deba.  Por las laderas del oeste, los riachuelos bajan al barrio-Olaeta,-al-pantano-de-Albina. En el alto de Cruceta tenemos un mirador con una magnífica visión del conjunto, destacando a nuestra izquierda las sierras de Arangio y Anboto y por nuestra derecha el pico de Udala. Si seguimos descendiendo encontramos el barrio de Ibarra, al que los vecinos del valle, vasco parlantes en su mayoría, denominan como "la calle". Aquí una parada nos permitirá ver el Ayuntamiento, edificado en el siglo XVIII, el monumento al insigne músico Vicente de Goikoetxea o la parroquia de San Martín, de corte neoclásico, con una notable puerta del Sagrario, su moderno Frontón. 

La comarca, que tiene una parte de su extensión dentro del Parque Natural de Urkiola, se adentra en territorio guipuzcoano por Santa Agueda, en el camino a Arrasate-Mondragón, distante sólo siete kilómetros.

ANTEIGLESIA DE IBARRA, (también llamada hasta 1823 de ZALGO)

Iglesia Parroquial de S. Martín 

La anteiglesia de Ibarra ha tenido en su historia dos templos parroquiales: el actual, construido a comienzos del pasado siglo, y el anterior de Zalgo, derribado en la misma fecha. 

La Iglesia de Zalgo, Ibarra, Aramaiona estaba construida en el lugar hoy ocupado por el cementerio municipal. Mientras sirvió de parroquia, la anteiglesia de Ibarra era conocida como «La anteiglesia de Zalgo». Se perdió esta denominación al abrirse al culto el nuevo templo, en el año 1.823, sustituida por la actual «Anteiglesia de Ibarra». 

Los señores ejercían su derecho a patronazgo y la tenían como posesión propia, nombrando servidores y administrando sus ingresos. En las demás parroquias del Valle los sacerdotes los nombraba el Obispo de Calahorra entre los hijos de pueblo. Quienes contribuían al sostenimiento de las iglesias eran los hijos del pueblo con los diezmos y primicias de sus cosechas. 

Iglesia Parroquial  

Construída a lo largo de 15 años  en terrenos de la propiedad de Juan de Machain, en las cercanías de la capilla de Zastiña  dedicada a San Sebastián. El Consejo de Castilla interpone litigio contra el Conde obligándole a proceder a la nueva construcción dictando sentencia el 26 de Agosto de 1.803.  

El Obispo de Calahorra supervisa las obras para que no sobrepasen de bajo ningún concepto los 327.000 reales presupuestados. 

La mitad de los gastos los paga la condesa de Mora, sucesora del marques de Morata. La otra mitad a cuenta de la parroquia. 

Se vendieron en pública subasta, la Casa Cural de Zalgo (actual Galdos) la casilla de la serora y sus propiedades, las ermitas de S.Antolin, y Sta.Maria Magdalena, S.Torcuato y S.Andrés. 

Pero la mejor fuente de ingresos fue el vino, el Consistorio, gravó con un impuesto de cuatro maravedíes a cada azumbre de vino que entrase en el Valle. En las cuatro tabernas de Valle y en las de Olaeta y Gomilaz, se recaudaron 12.000 reales, lo que supone unos 200.000 litros al año. 

Como los tiempos no era propicios, España quedó arruinada tras las guerras napoleónicas, con las revueltas internas y las guerras carlistas. luego vino la Desamortización. Ante la falta de dinero, en 1.789 se vendió la torre de Sastiña, sus pórticos y su reloj, colocado en el tejado de la Casa Consistorial. Al final los gastos se acercaron a los 500.000 reales. 

De la iglesia anterior se trajeron las imágenes de San Sebastián, San José, el Cristo de la urna, el Sagrario y la Pila Bautismal, y  una campana. El resto se fabricó expresamente para el nuevo templo el 8 de Marzo de 1.808. 

Ignacio Ormaechea del caserío Arbinegi al morir legó 10.000 reales para imágenes y ornamentos. Con ello se pagaron las imágenes de La Piedad, y Ntra. Sra. Del Rosario. 

Es tradición en Ibarra que no se halló firme necesario, sino barro y agua, por lo que hubo que cimentar sobre troncos de haya, incorruptibles al agua. Toda la madera se trajo de los montes Betsaide, y “Kondebaso” en Albina, propiedad de la Condesa. 

La arena se saca del rio, la piedra de mampostería (4.000 carros) de la cantera  próxima a la ermita de San Pedro de Arraga, y la piedra de sillería, caliza, es de las canteras de Elosu, Ganzaga y Arriola. 

Ponderando el grosor y solidez de los muros del templo, hemos oído decir que los bueyes se paseaban sobre ellos con sus carros, teniendo suficiente espacio para dar la vuelta. Esto es verosímil si tenemos en cuenta que la construcción es rectangular en su exterior y circular en el interior con rellenos de hasta siete metros de espesor. 

Aprovechando todos los materiales de la iglesia vieja, entre ellos una hermosa lámpara de plata  valorada en 13.782 reales, legada en testamento en 1.692, por el capitán Juan de Ubago, natural del Valle y muerto en las Indias. Por su gran valor desde su compra no acarreaba más que problemas, tentando la codicia de los ladrones. Desde 1.714 la guardaban en un arca especial en casa de mayordomo, la sacaban en fiestas muy solemnes, también la llevaban a la ermita de Andra Mari de Ibabe el DIA de los Cofrades, éstos la vendieron para hacer el Salón de Juntas, en el año 1.784, pero el mayordomo de Salgo les denunció y la Cofradía tuvo  que entregar el producto de la venta, que en parte estaba gastada.  El Sagrario fue un regalo del primer conde de Barajuen. 

Finalmente el 16 de Enero de 1.823 se hizo el primer bautizo y el 11 de Febrero el primer funeral. El retablo mayor desaparecido en la reforma de 1854 era de poco valor. 

El órgano construído en 1.832 costó 15.000 reales, estuvo  funcionando hasta 1.964 en que fue suplantado  por otro electrónico, aunque se conserva mudo en el coro. 

En la Sacristía se guarda un Crucifijo de tamaño natural, obra de escultor local y tamborilero Domingo Etxeberria, esculpido en 1.917 por 30 pts.

La casa consistorial de Aramaiona 

Fue construida entre 1.742 y 1.746. Hasta esa fecha los documentos se guardaban en Satina. Las juntas de vecinos se celebran en ”so, el árbol de Barajuen” o en la plaza de Ibarra, tras el repique de campanas, o en la sala del hospital de Ibarra, que desde 1.676 contaba con una sala.  

El 20 de Marzo de 1.741 reunido el Concejo General de aramaioneses decidió comprando el antiguo caserón de Burgoa con su huerta, edificar  la nueva planta del Concejo con dos plantas, incluído el desván, con cinco arcos. 

(Al final fueron 8 arcos) en el zaguán, cárcel y alhóndiga incorporados, Sala de Concejo, y, vivienda para el alguacil carcelero, con dos habitaciones, cocina y recocina. Calculando el coste en 54.000 reales. 

El acarreo de materiales de los montes altos corría por cuenta del Ayuntamiento, que liberó a los de Ibarra que no disponían de bueyes, y toda pareja de éstos recibía en pago “medio azumbre de vino y un pan de cuatro cuartos” por cada viaje de servicio prestado. Se gastaron mas de 2.000 reales en abrir caminos nuevos y arreglar los viejos. Entre los accidentes destacan: el carro que pilló a Juan Gorostiza  y su curación costó 75 reales, por el  buey que se le descornó a Bengoa, se le abonó 104 reales, a Martín Arana la vaca se  le murió con su cría....


Se cargó con impuestos a tabernas, carnicerías o comercios; venta de ramaje, ”barullo” de sus montes de carbón, de la bellota de (Añebarri) para engorde de cerdos, impuesto de cuatro maravedíes por cada azumbre de vino que entrase en el Valle. Este impuesto supuso un sustancial ingreso: alrededor de 9.000 reales anuales: (un cálculo aproximado) si cada real valía 34 maravedíes y se recaudaron 9.000 reales cargando 4 maravedíes a cada azumbre(=dos litros), se consumían en el Valle 153.000 l. de vino al año.  Desde 1.868 el reloj de la torre fabricado y montado por Francisco Abaitua ha regulado las horas funcionando perfectamente hasta que en 1.981 fue sustituiído por uno electrónico.


Los documentos  mas antiguos se han guardado en zastiña  hasta 1.546, después en la iglesia de Azkoaga, y luego en la casa Consistorial, abundantes documentos desde el s. XV. Entre ellos más de doscientos expedientes de hidalguía.

HISTORIA DE ARAMAIONA 

El primer resto prehistórico del valle, es una clavija  ósea izquierda casi completa de URO, hallado en el caserío Iturroste en 1.983, animal cuyo último ejemplar se extinguió en el siglo XVII. 

Los siguientes restos son de un Dolmen  en la zona de Ambotoste, y otro Dolmen en Ollargain. A finales del Siglo IX aparecen  las primeras  herrerías en Ibarra y Olaeta 

Posteriormente aparecen  restos de tumbas cristianas en la loma de la Ermita de Letasur. Su descubrimiento (aunque era conocido por los vecinos de Arejola y Arriola) fue fortuito, al romper la tapa de la tumba una vaca que allí pastaba.  También hay restos en la ermita de San Miguel de Suña. 

Situación administrativa: 

Aramaio perteneció a Bizkaia hasta el año de 1.489, en que pasó a integrarse en las Hermandades de Araba, pero sólo a efectos de “defenderse de los caballeros y personas poderosas que les acosaban”, y dejando claro que los aramaioarras “han sido y son vecinos de la tierra llana y señorío de Bizkaia y han gozado de sus fueros, usos, costumbres y privilegios claramente y sin contradicción”. Es decir: que los de Aramaio fueron siempre y seguirían siendo bizkaínos originarios, gozando por tanto y sin más requisito de los privilegios que la Ley concedía a los nobles.