La Evaluación de Necesidades y Recursos completada por el personal de Fay Elementary tiene como objetivo identificar las necesidades específicas de nuestra comunidad y los recursos disponibles para abordarlas. Estos datos valiosos permiten que nuestro personal adapte sus programas de manera efectiva, alinee sus esfuerzos con las necesidades de la comunidad y maximice su impacto positivo.
En nuestra iniciativa de escuela comunitaria, llevamos a cabo una evaluación de necesidades y recursos para el personal, que incluyó a 36 empleados certificados y 18 empleados clasificados. Esta evaluación tuvo como objetivo identificar el apoyo y los recursos que necesita nuestro equipo, al mismo tiempo que reconocemos sus fortalezas. Los datos recopilados se comparten con el personal para promover la transparencia e involucrarlos en el proceso de toma de decisiones, creando un ambiente colaborativo y de apoyo para nuestro trabajo y mejorando nuestras prácticas educativas.
Los datos muestran que el aumento de la colaboración y el trabajo en equipo recibió el porcentaje más alto de comentarios positivos con un 23.61%, lo que indica un fuerte reconocimiento del trabajo en equipo dentro de la comunidad escolar. La participación y asistencia de los estudiantes, así como los eventos y programas, también recibieron porcentajes significativos. Sin embargo, los desafíos y las áreas que necesitan mejoras obtuvieron un 12.5% de las respuestas, lo que sugiere aspectos que requieren atención y fortalecimiento. De cara al futuro, la creación de grupos de trabajo con socios educativos será crucial para continuar mejorando en Fay.
Parece que la oficina principal y los pasillos son las áreas que la mayoría de las personas consideran bien mantenidas y limpias, con un 68.5% y un 37% de los encuestados indicándolo, respectivamente. Los baños del segundo piso y el campo también recibieron porcentajes relativamente altos, con un 33.3% y un 42.6% de los encuestados considerando que están bien mantenidos y limpios. Por otro lado, áreas como los salones de clase, el MPR y el área de almuerzo recibieron porcentajes más bajos, lo que indica que podrían ser necesarias mejoras en el mantenimiento y la limpieza. Es evidente que hay áreas que se pueden mejorar, y el equipo de liderazgo trabajará para encontrar posibles opciones que aborden estas inquietudes en el futuro.
Los datos de la encuesta destacan las tres áreas principales que necesitan mejora: planes de comportamiento (70.4%), liderazgo y colaboración (50%) y comunicaciones a nivel escolar (48.1%). La necesidad de mejores planes de comportamiento sugiere que las estrategias actuales no son suficientes para manejar a los estudiantes disruptivos. Las preocupaciones sobre el liderazgo y la colaboración indican la necesidad de prácticas de liderazgo más efectivas y un proceso de toma de decisiones más inclusivo. Los problemas con las comunicaciones a nivel escolar señalan la necesidad de protocolos de comunicación más claros y eficientes.
El contexto adicional de la encuesta revela que la gestión del comportamiento (37.04%) es un problema importante que probablemente afecta el ambiente de aprendizaje. Las preocupaciones sobre el liderazgo (14.81%) y la infraestructura de colaboración (20.37%) sugieren que el personal puede sentirse poco apoyado, lo que impacta la efectividad del trabajo en equipo. Los problemas de comunicación (31.48%) resaltan la necesidad de un mejor intercambio de información, y las inquietudes sobre la supervisión durante el almuerzo y el recreo (24.07%) apuntan a posibles problemas de seguridad y organización.
Para abordar estos desafíos, nos enfocaremos en formar grupos de trabajo con el personal, los padres y los socios de la comunidad para ayudar a desarrollar e implementar soluciones, creando un entorno de aprendizaje más solidario y efectivo en la Escuela Primaria Fay.
Según los datos basados en las experiencias de los maestros en el aula, las tres principales barreras que afectan el aprendizaje de los estudiantes son las barreras del idioma (75.9 %), la falta de participación de los padres (74.1 %) y las dificultades de aprendizaje (74.1 %). El alto porcentaje de barreras del idioma y la falta de participación de los padres sugiere que muchos estudiantes enfrentan desafíos para comunicarse de manera efectiva y recibir apoyo de sus familias. Además, la prevalencia de dificultades de aprendizaje indica que una parte considerable de los estudiantes puede requerir apoyo adicional y adaptaciones para atender sus necesidades específicas de aprendizaje.
Para aumentar la participación de los estudiantes, los maestros identificaron varias estrategias efectivas basadas en sus experiencias en el aula. El enfoque más recomendado es el aprendizaje práctico (74.1%), que enfatiza la participación activa y el aprendizaje experiencial. Las conexiones con el mundo real (68.5%) y los sistemas de comportamiento positivo (70.4%) también son altamente valorados, lo que sugiere que hacer que el aprendizaje sea relevante para la vida de los estudiantes y fomentar un ambiente de apoyo son aspectos clave. La instrucción diferenciada (61.1%) es importante para atender las diversas necesidades de aprendizaje, mientras que el aprendizaje activo (46.3%) promueve la participación estudiantil y el pensamiento crítico. Además, la incorporación de la tecnología (33.3%) y la gamificación (33.3%) puede hacer que el aprendizaje sea más interactivo y agradable, aumentando aún más la participación.