El WiFi
En la clase en la que estáis ahora mismo estáis totalmente rodeados de ondas que van desde vuestros móviles y iPads a las torres de telefonía móvil de los tejalos y los routers del edificio. Nos rodean invisiblemente en un continuo intercambio de datos.
Así como el aire de alrededor está lleno de datos e información en el mundo invisible de las ondas, así está lleno de vida el mundo de la fe. A veces tan sólo nos falta afinar nuestras antenas interiores y trabajar nuestra oración personal. Así como el WiFi a veces se atasca, también nuestra oración necesita de un repaso de vez en cuando. Todo para que la comunicación con Dios sea como un diálogo entre dos amigos.
Dedica un minuto a tener un breve momento de diálogo con el Señor.
¿Quién es Dios para ti en este momento? ¿Qué te gustaría decirle en esta mañana?
Dios existe entre nosotros más íntimamente
de lo que existimos en nosotros mismos
Louis Evely