El Muro Vive y Siente
Nuestro proyecto de patrimonio
En el presente curso 2022/23, hemos dado continuidad al proyecto iniciado el pasado curso: El Muro vive y siente. El nombre del proyecto funciona, a la vez, como lema del mismo; pues enuncia el objetivo de llamar a la experiencia vivencial de la comunidad educativa desde nuestro centro, “El Muro”.
Y si el sueño finge muros
en la llanura del tiempo,
el tiempo le hace creer
que nace en aquel momento.
Federico García Lorca
Federico García Lorca escribe este poema como parte de una de sus obras de teatro. Poema que acaba convirtiéndose en sonido flamenco de la Bahía de Cádiz, donde se encuentra nuestro instituto, al cantarlo Camarón en su Leyenda del tiempo junto a otras voces y poesías populares, andaluzas y sufíes.
El sueño va sobre el tiempo y el tiempo es, precisamente, lo que nos hace designar al patrimonio bajo el término de “patrimonio”. Lo que nos hace transformar una jarra que servía para beber agua en una obra de arte que, a día de hoy, se expone en el Museo de Cádiz. Ciertamente, la gran mayoría de obras de arte que encontramos en los museos, enuncia el pedagogo y filósofo John Dewey, en su momento estuvieron impregnadas de vida y tuvieron su propósito y razón de ser.
La obra de arte se identifica a menudo con la existencia del edificio, del libro, de la pintura o de la estatua, independientemente de la experiencia humana que subyace en ella. [...] Cuando los objetos artísticos se separan tanto de las condiciones que los originan, como de su operación en la experiencia, se levanta un muro a su alrededor.
John Dewey, en "El arte como experiencia".
Precisamente sería, pues, ese “aislamiento” de la experiencia de la obra de arte y, también, el propio paso del tiempo, lo que levanta un muro metafórico en torno a ésta. En la misma línea, la poeta e intelectual Chantal Maillard lo explica así:
Me he situado ‘contra el arte’ [...] como quien se apoya ‘contra’ un muro que, al par que nos ampara, nos coarta. Muros, los de la metafísica, la ciencia, la moral, la política, la religión, las formas consensuadas de emocionarnos social y estéticamente, la filosofía o el arte, que hemos levantado para sostenernos [...] pero que, cuando cobran solidez, nos impiden ver al otro lado, traspasar el ámbito conocido y aprender otras maneras de caminar, de estar y de relacionarnos con las cosas.
Chantal Maillard, en "Contra el arte y otras imposturas".
Por eso, pretendemos ir más allá de cómo se entiende el patrimonio institucionalmente para conocerlo a través de la experiencia personal y la emoción; atravesando el muro para ir más allá. Así, nos planteamos alcanzar la capacidad de que nuestro alumnado viva y sienta el patrimonio desde “El Muro” que, además, es el sobrenombre por el que se conoce a nuestro instituto en Puerto Real.
Vivir y Sentir desde <El Muro>
Si lo interpretamos desde un punto de vista metafórico, con la música el muro reverbera y propaga las ondas del sonido. Además, es también en el muro donde podemos diseñar un teselado, colgar una pintura o escribir con caligrafía árabe los frisos de arquitectura andalusí. El muro que construye y delimita ciudades milenarias como Cádiz, o fronterizas como Jerez, entre otras del entorno. El que dispone las paredes entre las que ver representada una obra de teatro, una danza, componer una melodía o dibujar la naturaleza fractal de las marismas que vemos por la ventana.
El presente proyecto plantea ir más allá del concepto “patrimonio” como se plantea tradicionalmente en muchas clases; es decir, saliéndonos del libro de texto o la pantalla. Potenciando la vivencia y el sentir del mismo, asociándolo a la propia interpretación, recepción activa y creación por parte de los alumnos/as del Muro.