Bueno, la idea es que yo no enseño inglés, sino que guio a mis alumn@s en su proceso de aprendizaje, detecto y soluciono problemas de aprendizaje, motivo y aporto materiales de aprendizaje, e interacciono con ell@s en inglés.
En el aprendizaje de un lenguaje, ya sean las matemáticas, el español o el inglés, se deben dar dos componentes: por un lado el trabajo mecánico de repetición para adquirir los elementos del lenguaje, en nuestro caso el vocabulario, la gramática, la pronunciación o la entonación; y por otro su puesta en práctica, utilizandolo en casos reales para solventar problemas, retos o por el mero hecho de disfrutarlo.
Mis clases se estructuran en dos tiempos: un rato (20-30 min) dedicado a jugar Duolingo, donde mejoran su pronunciación, escucha, lectura y escritura y se motivan mostrando y compartiendo sus avances en el juego, a la vez que yo superviso su actividad en el juego; y otro, a que utilicen el inglés en clase de forma funcional y comunicativa.
En esta segunda parte practican cuentos de Duolingo, hacemos role plays, actividades relacionadas con efemérides, actividades eTwinning, visitas de nativos, etc... dentro de los proyectos que organicemos durante el curso. En este momento es cuando evalúo sus aprendizajes acorde a la adquisición de las competencias específicas de la materia.