Estos son los pasos que vamos a seguir:
1. Crea un héroe o una heroína. No olvides que, según la definición que hemos visto más arriba, el héroe (o heroína) de un mito debe ser alguien sobrenatural, un dios o un ser extraordinario.
¿Por qué tu héroe tiene ese talento especial? ¿Es un dios? ¿Los dioses lo bendijeron?
2. Presenta el escenario y el personaje principal. Algunos consejos:
Ubica al mito en un pasado muy distante o en algún lugar lejano. Piensa en todas las historias que conozcas que empiecen con “Érase una vez”, “En un lugar muy lejano”, o incluso con “Hace mucho tiempo atrás”.
Describe al tipo de héroe que la gente espera que esté en los mitos, un héroe famoso o una diosa. Describe su aspecto y sus poderes.
3. Escribe en un lenguaje sencillo y directo. Los mitos cuentan una historia en forma directa, como si estuviera relatando hechos reales. Presenta todo como si se tratara de la realidad, aunque sea irreal.
4. Inventa un motivo por el cual el personaje principal tendrá que hacer algo. Podrías comenzar escribiendo el tema central de tu historia, explicando por ejemplo que “ Prometeo decidió robar el fuego para dárselo a la gente”. Sin embargo, sería una historia más interesante si el personaje tuviera un motivo para comportarse del modo en que lo hace. Aquí hay algunos ejemplos:
Prometeo se dio cuenta que la gente temblaba en el invierno y rogaban por encontrar una manera de abrigarse.
Una reina ignora que sus súbditos están sufriendo. Los dioses envían una plaga a su hija y la reina debe aprender a ayudar a la gente a cambio de que curen a su hija.
5. Dale un final. Sigue escribiendo hasta que hayas terminado con lo que deseas explicar o hasta que el héroe haya vencido todos los desafíos y haya aprendido la lección.