Contexto IES Barañáin

El IES Barañáin se creó en 1987 para dar respuesta a una necesidad educativa muy clara en la localidad, que en ese momento estaba en pleno crecimiento demográfico. Cuenta

en la actualidad con 61 profesores, 12 trabajadores de personal de Administración y Servicios y unos 450 alumnos/as provenientes en su mayoría de Barañáin y del barrio de

Etxabakoitz de Pamplona.

Dispone de dos edificios: el edificio central (el principal) acoge las aulas de 1º a 3º ESO y en algunas ocasiones a grupos de 4º, además de los departamentos didácticos, oficina y despachos de dirección. También en este edificio se encuentran las aulas específicas de Tecnología, Música, Dibujo y los laboratorios. También dispone de un aula de informática con 33 equipos y un aula Ikasnova.

En el otro edificio, el aulario, se encuentran las aulas de Bachillearto y alguno grupos de 4º. También dispone de otra aula de informática con 30 equipos.

Hay que señalar que en la actualidad, la localidad donde se sitúa el centro está sufriendo un proceso de regresión poblacional. Esta se debe a la ampliación que experimentó la localidad en los años noventa ya no tiene una incidencia tan importante en la natalidad por el envejecimiento de la población residente. Algo similar ocurre en el barrio de Etxabakoitz de Pamplona, muy próximo al Centro y desde el que también se recibe de forma habitual alumnado.

Por otro lado, se experimenta en la actualidad un ligero aumento de las incorporaciones procedentes de países extranjeros, lo que ha amortiguado el progresivo descenso de matrícula.

Cabe destacar el perfil socioeconómico medio de las familias ha bajado en los últimos cursos de manera sensible, teniéndose en el curso 22-23 entre un 20 y un 25% de familias en situación de vulnerabilidad.

Infraestructura

Equipamiento base de centro disponible en: https://inventario.educacion.navarra.es/glpi/front/central.php impresora 3D. Además del equipamiento que figura en el inventario GLPI el centro dispone de una impresora 3D,  20 kits Arduino y 16 kits mBot.

Justificación del Plan y su Contribución al Proyecto Educativo de Centro

La implementación de un plan digital de centro es fundamental para satisfacer las necesidades educativas y preparar a los estudiantes para un mundo cada vez más digitalizado. En la actualidad, la tecnología desempeña un papel central en la sociedad, y los estudiantes deben adquirir habilidades digitales para tener éxito en sus futuras carreras. Un plan digital de centro proporciona la planificación necesaria que garantice el acceso a recursos educativos en línea, fomenta la colaboración y la comunicación entre estudiantes y docentes, y promueve el aprendizaje personalizado. Además, permite la integración de herramientas y aplicaciones digitales en el currículo, lo que enriquece la enseñanza y facilita la adquisición de conocimientos. En resumen, el plan digital de centro garantizará que los estudiantes estén preparados para enfrentar los desafíos de un mundo digital en constante evolución.

Además, es crucial que el plan digital de centro promueva un liderazgo sólido que brinde orientación y dirección a la comunidad educativa en la implementación efectiva de la digitalización y la integración de la tecnología en la educación.

Proyecto Aula ikasNOVA

Título: Sin barreras. tecnología y mobiliario al servicio del aprendizaje significativo

Descripción del proyecto: se trata de utilizar el aula IkasNOVA tanto en la creación de proyectos interdisciplinares en 1o y 2o de ESO como en la implementación de la materia optativa “Iniciación a la Investigación” dentro del programa de Bachillerato de Investigación (Bi+).

Objetivos: El aprendizaje por proyectos y la indagación/investigación son dos de las metodologías activas más utilizadas en los últimos años en prácticamente todos los niveles educativos. La primera se basa en obtener un aprendizaje significativo en torno a la resolución de una pregunta. Sus principales características son la flexibilidad, el fomento del autoaprendizaje y del reparto de roles en el trabajo en equipo y la capacidad de trascender tanto las aulas como las materias para convertirse en interdisciplinar. Está basado en los principios del aprendizaje constructivista (Kokotsaki, Menzies y Wigings, 2016). Y puede definirse como una modalidad de enseñanza centrada en tareas a través de un proceso compartido de negociación entre los participantes; su objetivo principal es la obtención de un producto final. Es decir, el alumnado participa en la estructuración del proyecto y desarrolla estrategias de investigación, por lo que la dinámica lineal del tema-examen se rompe (García Valcárcel, Basiliota, 2017). En este ámbito, los procesos y la indagación se convierten en decisivos (Vals, 2016), a la vez que se superan las barreras físicas del aula y de las materias para llegar, en muchas ocasiones, a proyectos interdisciplinares, mucho más cercanos a la realidad que ofrece la sociedad. En estrecha relación con la primera metodología, el conjunto de las metodologías inductivas empleadas en los procesos de investigación pueden ofrecer un amplio panorama de actividades que hagan más significativo en práctica la formación de los investigadores.