El viernes 24N, en la iniciativa propuesta por Lilas (grupo feminista del centro), alumnado, profesorado, personal no docente se unieron en la construcción de una gran puerta morada para visibilizar la violencia generada hacía las mujeres. Cada persona a su vez, fue colgando en esa gran puerta, puertas más pequeñas, que llevaban escritos mensajes de violencias en su parte frontal, mensajes que queremos dejar atrás y mensajes de apoyo, de esperanza, de personas que nos esperan, nos dan la mano, dentro de la propia puerta, para poder atravesarla.