El exterminio de los tutsi ruandeses es calificado comúnmente como «el último genocidio del siglo XX», tras el que resonó con fuerza y claridad el grito: «¡Nunca más!». El genocidio de 1994 ha sido excepcional por su envergadura, rapidez y por su modo operatorio: más de medio millón de personas exterminadas en cien días, matadas generalmente por medio de armas rudimentarias utilizadas por un gran número de autores del crimen. Según las estadísticas de la justicia ruandesa, la relación autor-víctima es de en torno a dos por uno, lo que justifica la designación de «genocidio popular».
El presente ensayo trata de captar los resortes de esta tragedia. Una amplia parte está consagrada a los antecedentes, lejanos y más inmediatos, indispensables para comprender las dinámicas que se pusieron en práctica. El análisis no concluye en el momento del fin del genocidio, sino que aborda igualmente sus secuelas. La tragedia de 1994, en efecto, no es el fin de esta historia, ya que, por muy grave que pueda parecer, solo constituye una etapa de la misma. Sigue presente en la región de los Grandes Lagos y muy especialmente en Ruanda, donde uno vuelve a encontrar la violencia estructural que había precedido al genocidio y que podría, en el futuro, transformarse nuevamente en violencia aguda.
A través de un texto con secuencias narrativas, la autora da cuenta de lo alternativo en la experiencia de Yomol A’tel, empresa social que construye actualmente un modelo de economía solidaria en el sur de México, con familias indígenas tseltales productoras de café. El texto es fruto de una investigación crítica, cualitativa y multidisciplinaria desarrollada a lo largo de cuatro años y se adhiere al esfuerzo que la propia organización ha impulsado por sistematizar y construir de manera colectiva un conocimiento situado en el ámbito de la Economía Social y Solidaria en México. Con el énfasis puesto en la experiencia de los sujetos, la reflexión ética y el análisis de los sentidos que surgen en la práctica, este trabajo busca contribuir a la comprensión y materialización de la propuesta de Yomol A’tel y dar cuenta del camino recorrido para que otras propuestas análogas enriquezcan su propio análisis.
Este libro se dedica a uno de los debates internacionales en curso sobre los desafíos conceptuales y prácticas que la diversidad cultural de sociedades pluriculturales ha generado en el ámbito de la justicia transicional. El presente trabajo sobre pueblos indígenas y justicia transicional, fundamentado en una investigación antropológica jurídica en Guatemala, pretende contribuir a reducir la brecha de conocimiento en torno a entendimientos y prácticas indígenas sobre justicia, reparación, búsqueda de verdad y reconciliación para enfrentar las graves violaciones de derechos humanos sufridos durante el conflicto armado (1960-1996). Un hallazgo central de esta investigación es que los procesos de justicia transicional en las comunidades indígenas están permeados por una fuerte dimensión espiritual que problematiza aceptaciones antropocéntricas de los derechos humanos. Este estudio concluye que la visión hegemónica de justicia transicional aún no se ha enfrentado a los retos apremiantes que provocan las visiones indígenas que cuestionan las divisiones de la ontología moderna dominante entre cultura/naturaleza, mente/cuerpo, humanos/no humanos, creencia/realidad. El libro concluye con recomendaciones que los diseñadores de políticas de justicia transicional deberían tomar en consideración cuando elaboran sus intervenciones y mecanismos de justicia transicional para sobrevivientes y comunidades indígenas que enfrentan las secuelas de un pasado lleno de atrocidades.