Una metodología activa busca provocar cambios en el aula, que permitan pasar de un aprendizaje memorístico a uno interactivo, de comunicación permanente, de profesor a estudiante y estudiante a estudiante, entre otros actores
Método de enseñanza-aprendizaje en el que los y las estudiantes llevan a cabo la realización de un proyecto en un tiempo determinado para resolver un problema o abordar una tarea mediante la planificación, diseño y realización de una serie de actividades, y todo ello a partir del desarrollo y aplicación de aprendizajes adquiridos y del uso efectivo de recursos.
El aprendizaje Basado en Problemas es un método de enseñanza-aprendizaje, que se caracteriza por que está centrado en el/la estudiante, promoviendo que este sea un aprendizaje significativo, además de desarrollar una serie de habilidades y competencias indispensables en el entorno actual.
El modelo de la clase invertida (o Flipped Classroom) es una variedad del aprendizaje semipresencial, que tiene por objetivo lograr que los/as estudiantes gestionen su aprendizaje interactuando con material audiovisual y trabajando de manera colaborativa. Esta metodología usa principalmente las TIC, para proporcionar una experiencia de aprendizaje autónomo, utilizando recursos multimediales fuera de la clase y previo a ella (Bergmann y Sams, 2014).
Ventajas y desventajas de la metodología activa
Ponen fin a la enseñanza basada en las clases magistrales y la memorización.
Permiten aprender a través de la indagación y el descubrimiento.
Se centra en la observación y la emisión de juicios en base a hechos y acciones.
Orienta el trabajo a la resolución de problemas.
Ritmo de clase duro para el profesor.
Difícil cubrir todo el material curricular.
Resistencia, sobre todo al inicio, del alumnado a la metodología activa.
Cambio del modelo de evaluación que se imagina el alumno.
Provoca desorden e indisciplina, cuando las instrucciones son mal dadas y ejecutadas.