Mi historia 

Desde el colegio nos enseñan que el ciclo de la vida es nacer, vivir y morir. 

Pero esa última etapa es la más difícil de comprender y aceptar y más si es el ser al que tanto amas. La palabra muerte la conocemos y probablemente la entendemos, pero jamás podremos asimilarla, ni mucho menos estamos preparados para afrontarla.  

Mi nombre es Dayana Melgarejo, y tengo 17 años, y hoy contaré su historia, la de una mujer que siempre dio todo por sus hijos.  ¡Así a sido mi vida desde que mi mamá no está!! ¿Cáncer? Sí. Más que una enfermedad, para mí siempre fue una palabra extraña que nunca llegaría a mi vida ni a la de las personas que más amo. Pero sí, es real y a todos nos puede tocar. Es una enfermedad silenciosa que cuando llega hace ruido y estragos, más que cualquier otra.

El 21 de septiembre del 2022 fue el peor de mis días, ese día partió mi vida en dos. Ese día recibí esa noticia a la cual le tenía tanto miedo desde pequeña, mi mamá siempre me recalcaba que no siempre iba a estar para mí, pero hoy me doy cuenta de que sí que me duele no tenerte más conmigo.

Ese día estaba lista para ir a la técnica y estaba almorzando a las 11:30 de la mañana pues pensaba llegar temprano para insistirle al portero que me dejara verte.

Estaba almorzando y llego mi tío (su hermano) llego con lágrimas en la cara y nos dio la terrible noticia “ su mamá se murió"  quise jamás haber escuchado esas palabras, me quede  en shock  no lo creía, no podía creer que esto me estaba pasando a mí. Antes de contar mi historia, quisiera describir quien era mi mamá. Su vida no se puede, resumir a que fue una enferma de cáncer.

Mi madre se llamaba Anabel Guevara ortega, fue una mujer con vida, alegre, respetuosa, dedicada, una mujer llena de valores, era la mayor entre sus hermanos, esa hermana a seguir. Le gustaba ayudar a la gente, era muy dedicada a sus hijos, le encantaban los vallenatos, en sus ratos libres, al igual que a mi le gustaba mucho ver novelas, era amante de las películas románticas, pasábamos horas viendo novelas, y platicado acerca de ellas. Mi nona y personas más cercanas la llamaban" Anita". Yo la llamaba " Mami”; Aunque no fue solo una madre para mí.

Mamá era solamente la palabra común para llamarla, porque aparte de eso ella fue mi hermana y mi mejor amiga. Era la persona a quien despertaba en la madrugada cuando no podía dormir, la que me abrazaba cuando lloraba, la que me daba tan sabios consejos.

Así estuviera cansada siempre llegaba a casa con una sonrisa, así hubiera tenido un largo día. era la persona que me escuchaba hablar de mis problemas por largas horas. Fue la persona que se esmeró por muchos años para que yo fuera alguien en la vida.

No puedo decir que nuestra relación fue perfecta, porque si hubo problemas, había momentos de discusiones, pero también había otros en los cuales hablábamos hasta tarde, me acompañaba al baño cuando me daba miedo... reíamos y lloramos juntas; como extraño eso...

Siempre he sido de pocas amigas y ella, sin duda fue la mejor.

Todo comenzó a principios de abril del 2022, mi mamá trabajaba en comidas rápidas y se mataba mucho trabajando, tiempo después en junio falleció mi nona fue un golpe muy duro para todos, pero en especial para mí ya que eran muy unidas, esto le dio muy duro a mi mamá y se la pasaba llorando y casi no dormía ni comía.

Iba pasando el tiempo y mi mamá empezó a adelgazar, con mucho desaliento... todos pensábamos que era porque ya no comía igual y mi papá decidió llevarla al hospital allí le dijeron que mi mamá estaba muy mal que tenían que hacerle exámenes allí duro como 2 semanas pero los doctores no detectaban que era lo que tenía  y solo le mandaron medicamentos. Mi mamá volvió a la casa, estuvo bien como dos días, pero seguía enferma y cada vez estaba más delgada. 

A principios de septiembre la llevaron por urgencias a la clínica Santa Ana, allí la dejaron en observación y la dejaron allá en esa clínica.

Mi papá y mi nona siempre iban a visitarla, yo siempre preguntaba cómo estaba ella y muchas veces quise ir a visitarla, pero por ser menor de edad nunca me dejaban entrar.

El 8 de septiembre  hablé con el vigilante  le dije que ya casi cumplía los 18 y que ya tenía un mes sin ver a mi mama , y me dejó entrar por 5 minutos; yo estaba  muy contenta porque iba a verla, llegué y la abrase y le di un beso en la mejilla, estábamos muy contentas, casi no hablamos pero ella me preguntó que como iba en el colegio y como estaban mis hermanos , también hablamos de mi graduación , de cómo iba a ser  mi vestido, mi mamá me comentó que la iban a operar al otro día, a mí me dio mucho miedo porque era una operación; pero ella dijo que ni era peligrosa y que con el favor de Dios le iban a dar salida; con esto me aliviane y me despedí de ella porque ya no había tiempo, me dio un abrazo y me dio su bendición... jamás pensé que ese día sería la última vez que la veía, ni que ese abrazo sería el último. 

Al otro día fui al colegio y todo fue súper normal, cuando salí de la técnica me percaté que tenía llamadas de mi papá y como ya iba para la casa, no le devolví la llamada.

Cuando llegue a la casa, todos estaban muy tristes y mi papá me dijo con lágrimas en los ojos que la operación de mi mamá se había complicado y que estaba en UCI.

Me dio muy duro la noticia ya que tenía la esperanza que ya todo iba a acabar y que mi mamá volvería con nosotros a casa. 

Mi papá me dio palabras de aliento de que mi mamá iba a salir de allí, y me lo decía con tanta seguridad que de verdad tenia fe que todo iba a salir bien; pasaban los días y mi mamá  seguía igual ni mejoraba ni empeoraba,  y así pasaban los días hasta que pasó lo que nadie quería ni se esperaba " se había ido la mujer que más amaba " en ese momento todo pasó por mi cabeza, pasaba la idea de que ya nunca la iba a volver a ver, que ya nunca me  iba a dar un consejo y ya nunca más me daría un abrazo; en ese momento tuve que sacar fuerzas de donde no las tenía, tengo un hermano pequeño el cual era muy apegado a mi mamá y no entendía lo que estaba pasando, fue muy duro decirle esto a mi hermanito. 

Pasaban muchas cosas por mi cabeza, que todo era una pesadilla de la cual ya me quería despertar, pensaba que me había quedado sola, el día del velorio y el entierro no lo recuerdo muy bien, cuando pienso en aquel momento viene a mi mente gente que ni conocía diciéndome que lo sentía mucho. Recuerdo su ataúd y como se veía; increíblemente se veía muy linda y quedó sonriendo, esos días aún sentía que estaba conmigo.

Estando en el ataúd yo la abrase, me aferre tanto a ella, sabía que era la última vez que la veía. 

En el tiempo que ella estuvo enferma sabía que su muerte era una posibilidad   pero nunca me preparé para ello; Ahora tras un hecho que pasó hace un año todavía me duele que no esté aquí conmigo, ya casi me graduó y no va a estar :( 

He podido afrontar eso siguiendo su ejemplo ella me enseñó a tener fortaleza en medio de las dificultades y eso he tratado de hacer todo este tiempo.

Me enseñó a ver lo positivo en medio de la tempestad y eso me ha permitido ver que, aunque la extraño todos lo días, ella está mejor ahora. 

Y ahora solo me quedan los lindos recuerdos, las risas, esos regaños. Recordar y hacer lo que a ella le hubiera gustado que hiciera; atesorar sus consejos y sus palabras en mi corazón. 

No podría terminar esta historia sin decirles que valoren cada instante que pasan con sus padres, aprovechen cada momento, no sabemos cuándo será la última vez que los tenemos con nosotros.