When I entered my first semester of the IPP in Sacramento California, we were required to be of service to the Deaf Community-all was a new experience. Being able to serve the Deaf Community I quickly realized how many opportunities I have missed in the past to be dive deeper in the community. As I helped in the morning to prepare Personal Protective Equipment (PPE) and take them to the front of the office-I realized I enjoyed being of service and wanted to do it often. As the program continued as well as life-the only thing it left me was, a craving to serve the Deaf Community as much as I could.
Cuando entré en mi primer semestre del IPP en Sacramento, California, se nos pidió que estuviéramos al servicio de la comunidad sorda; todo fue una experiencia nueva. Al poder servir a la comunidad sorda, rápidamente me di cuenta de cuántas oportunidades había perdido en el pasado para sumergirme más profundamente en la comunidad. Mientras ayudaba en la mañana a preparar el Equipo de Protección Personal (EPP) y llevarlo al frente de la oficina, me di cuenta de que disfrutaba ser útil y quería hacerlo con frecuencia. Mientras el programa continuaba tan bien como la vida, lo único que me quedaba era un anhelo de servir a la comunidad de sordos tanto como pudiera.