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1.- Bajar de peso de verdad... y sin sufrir!

Para bajar de peso de verdad, se tiene que estar muy conciente del “motivo” por el que se quiere hacerlo, de manera que uno esté convencido de la decisión. De esta manera, inclusive, si durante el proceso se siente hambre, no se sufre; sino que por el contrario, hasta se disfruta esa hambre, sabiendo que eso nos indica que se está en el camino deseado, que nos llevará al fin buscado.

 

Bajar de peso es similar a la decisión que se toma cuando se deja de fumar. No se tiene que hacer poco a poco, o buscar las condiciones “óptimas” para hacerlo, o el momento ideal para comenzar. Se comienza y listo!!!

 

Que es importante saber. Lo que nos hace engordar, bajar de peso o mantenernos en un peso (puede ser el ideal de salud, el ideal de figura, el de sobre peso o cualquier otro) es el día a día, no las excepciones. En otras palabras, lo que comemos en nuestra vida “diaria, durante nuestros días normales, durante nuestra rutina”, es los que va a definir nuestro peso, nuestra figura y nuestra salud. Si estamos en un peso “deseado”, no vamos a engordar descomunalmente porque un día especial (fin de semana, cumpleaños, otro) nos demos un gusto comiendo demás, o algo con muchas grasas o calorías. La piedra se orada por la gota que cae todo el tiempo y por mucho tiempo, no por el chorro de agua que puede caer de golpe una vez, para luego desaparecer.

 

Como ejemplo: Cuando uno está con un sobrepeso estable durante mucho tiempo, ha logrado un “equilibrio de sobrepeso”. Come normal según esa persona, a veces se da unos gustos, a veces se controla un poco y hace todo de manera que ese peso de sobre peso, gira alrededor de un promedio.

 

Cuando se baja de peso, lo que tiene que hacerse es lograr ese mismo “equilibrio”, pero en el peso ideal o el deseado. Eso implica un cambio de hábitos en la forma de comer y alimentarnos, pero no radical, sino de un “nuevo equilibrio”, de manera que nos conservemos en nuestro peso deseado.

 

Claves para lograrlo:

 

1. Comer menos en cada comida, sin dejar de comer las 5 comidas principales: desayuno, almuerzo y cena además de 2 meriendas a media mañana y media tarde.

·         El estómago es como un globo de goma. Si se lo infla una vez, aunque luego se lo desinfle, queda agrandado (me refiero por dentro, no a lo que se ve por fuera).

·         Es como un recipiente grande, que para llenarse requiere mayor cantidad de comida de la que en realidad necesita diariamente.  Si no se llena completamente, uno se siente con hambre.

                                  i. Lo que hay que hacer es reducir el tamaño del estómago. Gracias a Dios, nuestro estómago no es exactamente igual que el globo, que una vez agrandado no se puede reducir. Somos cuerpos vivos que podemos revertir cosas en base a decisión, fuerza de voluntad y perseverancia.

1.     Cuando nos estemos sirviendo nuestras comidas, no busquemos saciar primero la vista, aumentando comida al plato antes de haber terminado, o peor aún, antes de haber comenzado. (no saciar la vista, sino el requerimiento de alimento necesario)

2.     Servirse menor cantidad de comida de la que comemos en nuestro equilibrio de sobrepeso según lo que deseemos rebajar, y evaluar al terminar el plato pequeño, si realmente seguimos con hambre, o si ya estamos “satisfechos”, no llenos. Verán que sí es posible hacerlo si se combina con el siguiente consejo

 

2. Comer más lento

·         Se ha comprobado que la verdadera sensación de satisfacción, no se da en el estómago, sino en el cerebro. Es decir que el cerebro recibe la información del estómago cuando éste está recibiendo alimento, pero esta información se envía recién a los 12 o 15 minutos de haberse comenzado a ingerir alimentos. Esto es importante considerar, ya que si por comer rápido, terminamos nuestra cantidad de comida de reducción de peso antes de este plazo, seguiremos sintiendo hambre por simple lógica.

                                  i. Para comprobarlo hay que acordarse las veces en las que hemos sentido hambre a la hora de una comida, y por motivos varios (no había mucha comida en un viaje, no había tiempo, no había cubiertos, etc.) no pudimos comer lo que nos hubiera gustado, sino solo un poco y luego de algún tiempo, como que ya no teníamos esa hambre que sentíamos antes de comer lo poco que pudimos. A veces en estas circunstancias, con una galleta, un pedazo de sándwich o hasta con un yogurt, se pasó el hambre.

·         Otro aspecto importante de comer lento, es que si tenemos un plato pequeño y lo terminamos rápido, antes que los demás, tendremos antojos de los platos que los otros siguen comiendo, y comenzaremos a hacer piqueos y robos simpáticos (que en realidad son antipáticos) de los platos de los demás, o a hacer pequeños aumentos de la fuente, hasta que los demás terminan su comida.

·         Normalmente cuando se lleva un bocado a la boca, ya se está preparando el próximo mientras se mastica. Eso hace que se coma rápido. Una maña para lograr comer lento, es dejar los cubiertos en los platos entre bocado y bocado. Cuando se trague el que está en la boca, recién se prepara el otro. “Al sentarse a la mesa, comprométase consigo mismo, a ser el último en terminar su comida, por más que sea poca la cantidad que se sirvió”. Así no tendrá antojos y dejará que su cerebro capte la sensación de saciedad en los tiempos normales del ser humano.

 

3. Mejor comida

Comer mejor comida que en vez de llenarnos, nos alimente, es decir nos de la energía que necesitamos. Es importante tomar conciencia que la comida no es un fin, sino un medio para cargar la energía que nuestro cuerpo necesita para funcionar adecuadamente. Al menos en nuestra vida diaria (no cuando tenemos un antojo), tenemos que comer los alimentos que nos dan las proteínas, nutrientes y demás elementos que necesitamos para vivir bien.

·         Desde chicos hemos visto en películas americanas, que el campesino americano toma un desayuno poderoso con huevos, tocino, leche, mantequilla y otros más, que se ha llegado a denominar el “desayuno americano”. Obviamente ese agricultor americano necesita todos esos nutrientes para poder trabajar todo un día la tierra, al sol, al aire libre, cargando, empujando cosas y otros más. Pero si nos ponemos a pensar que nuestra vida (casi de todos los que tenemos sobrepeso) ahora sobre todo, es estar sentados en un escritorio después de bajar de un auto para llegar a la oficina, y luego descansar en la casa viendo tele o estudiando sentados en el colegio, ese “desayuno americano” es súper excesivo en relación a lo que en realidad necesitamos.

·         Lo que hay que hacer es comer cosas más nutritivas pero en menor cantidad, porque sino los excesos no consumidos, se van acumulando en los tanques de reserva del cuerpo humano que en términos comunes, son los rollos y las grasas que van a apareciendo en todo lado. Más aun, debemos considerar que esas grasas que las vemos por fuera, también están por dentro alrededor de nuestros órganos vitales y nuestra sangre. No las vemos y no nos torturan como las grasas que vemos, pero son las que nos hacen daño y nos pueden llegar a matar.

·         Hay gente que piensa que yendo al gimnasio dos o tres veces a la semana va a bajar de peso comiendo lo mismo que los ha vuelto gordos. Eso no es cierto. Si volvemos al ejemplo del campesino americano, no es lo mismo hacer ejercicio dos horas durante tres días a la semana, que hacer esfuerzo físico durante ocho horas todos los días de la semana de lunes a viernes mientras cultiva su parcela.

·         Al menos que una persona sea deportista profesional y ejercite su cuerpo todos los días en la mañana y en la tarde, el ejercicio no nos hará bajar de peso. El ir al gimnasio lunes, miércoles y viernes de 7 a 8.30 para hacer spinning, aeróbicos, pesas o bien salir a caminar o trotar los fines de semana, sólo nos ayuda a mejorar nuestra condición física y mental bajando el estrés, pero no nos hará bajar de peso de manera sostenible, si no bajamos el volumen de nuestra comida. Tal vez nos vuelva una “bola más dura”, pero de ahí no pasa. Es posible bajar de peso sin hacer ejercicio, yo lo hice. Bajé de 84 kilos a 72 en tres meses, sin hacer ni un solo ejercicio. Solo la programación mental y las mañitas que en este texto se explican.

 

4. Tomar agua en buenas cantidades, mejor si son más de 2 litros por día adicionales a los jugos, cafés, mates, tes y otros que consumimos durante el día.

·         Hay gente que piensa que por tomar agua va a enflaquecer como por arte de magia y dejan todo el trabajo al agua. Lo que en realidad sucede es que cuando tomamos mucha agua entre comida y comida, lo que hacemos es llenarnos con agua, y como el estómago no tiene cerebro propio para darse cuenta de la situación, no tiene hambre.

·         Si se puede tomar agua antes de cada comida mejor, así queda poco espacio y no se tiene que hacer muchos esfuerzos para no comer más cantidad en las comidas del día.

·         Obviamente se sabe que el 60% de nuestro cuerpo es agua y por lo tanto si vemos desde otro punto de vista, el agua es lo que más nos ayuda a estar bien, ya que somos como esponjas a través de las cuales esa agua, va a fluir limpiando lo que está sucio. Eso es bueno desde todo punto de vista, pero no es la clave para enflaquecer, sino para estar bien por dentro.

 

Hay gente que cree que con tomar té verde, estevia, mates mágicos y cosas similares, “adicionales a lo que ya los engorda”, van a poder bajar de peso comiendo lo mismo, pero eso es mentira. Si somos personas sanas, “y de este planeta y no de otro”, lo único que de verdad logra el cambio de vida que nos va a permitir bajar de peso y mantenernos en el peso que queremos, es COMER MENOS Y DE MEJOR FORMA

 

Punteo de claves:

Finalmente, tomar conciencia de lo que se desea lograr, para sentirse bien con lo que se está haciendo.  


2.- ¿Qué es mejor? ¿Ser vegano, vegetariano u omnívoro?

Los seres humanos somo "omnívoros" por naturaleza, es decir que consumimos tanto alimentos carnívoros como herbívoros. Eso es además así, por cuanto nuestro cuerpo requiere de todos los elementos que la dieta carnívora y herbívora nos brinda para desarrollarnos sanos y saludables.

En más de un estudio, se ha comprobado comparando personas que comían mucha carne en su dieta, con personas vegetarianas y personas veganas, que las personas que comen mucha carne en su dieta, tienden a tener problemas de obesidad, gastritis, colesterol, úlceras y otras patologías más de exagerar con carnes. En el otro extremo, los veganos resultaron mostrando algunas deficiencias en proteínas y otros elementos más que obtenemos del reino animal, para el cual estamos aptos para consumir.

Finalmente, se concluyó que los vegetarianos acababan siendo los más equilibrados y con mejor salud a largo plazo, por cuanto mantenían la provisión de todos los nutrientes que el cuerpo "necesita" combinando vegetales con proteínas del reino animal, que no necesariamente requieren de comer carne. Basta con que se coman huevos, leche, queso y otros del reino animal para contar con el equilibrio de dieta.

Como verás, respeto a las personas que no quieren comer carne, pero sugiero que no dejes de consumir proteínas del reino animal, para que tu dieta sea equilibrada y saludable.

3.- ¿Qué es una dieta cetogénica?

Una dieta cetogénica, es una dieta donde se hace más énfasis en las proteínas y las grasas, más que en los carbohidratos. El objetivo es llevar al cuerpo a un estado de cetosis, donde el cuerpo busca energía, pero al no encontrarla en la glucosa en la sangre, comienza a recurrir a las grasas acumuladas, de manera que se comienza a bajar de peso suavemente, evitando el efecto rebote. Esta dieta se conoce también como las dietas Keto, como una abreviación de ketogenic, en el idioma inglés.

4.- El tomate ¿Hace subir el ácido úrico?

La creencia popular dice que el tomate hace daño al ácido úrico. Como primera cosa, los dizque estudios que **vinculan el consumo de tomate a una mayor prevalencia de gota** son solo observacionales y no confirmar tal relación. En otras palabras, **no hay evidencia suficiente** al respecto.

Por otro lado, las tablas de composición de alimentos de Sandoz Nutrición. Barcelona, 1977, muestran que el tomate no tienen nada de purinas ni de ácido úrico.

En todo caso, el tomate contiene vitamina C y fibras, lo que se constituye en una buena ayuda para bajar la hiperglucemia en la sangre.

Por lo dicho, el tomate no eleva el ácido úrico en la sangre…

5.- ¿Qué tipo de azúcar tiene el mango?

El mango en fruta fresca tiene por cada 100 gramos la siguiente composición de azúcares:

Por este motivo, esta considera entre las frutas top en contenido de azúcar. Si eres una persona diabética, trata de consumir el mango como postre y en comidas equilibradas y cantidades controladas (no más de 80 gramos por ejemplo).

Eso sí a tomar en cuenta. El mango deshidratado y el néctar de mango, tienen mayor concentración de azúcar, por lo que su consumo debes evitarlo si tienes problemas de diabetes. Si es así, te sugiero que solo lo comas en fruta fresca.

Diferencia entre fructosa, glucosa y sacarosa:

Fructosa: La fructosa es absorbida en el intestino delgado y pasa a la vena porta que es un vaso sanguíneo que transporta la sangre desde los intestinos, el bazo, el páncreas y la vesícula biliar hasta el hígado. Para su metabolismo no es necesaria la participación de la insulina. Cuando hay un exceso de fructosa en la comida, sobre todo en el consumo de bebidas edulcoradas, se puede transformar en triglicéridos. Por este motivo, la fructosa tiene incidencia sobre el hígado graso.

Glucosa: Cuando hablamos de azúcar de la sangre, estamos refiriéndonos a la cantidad de glucosa que circula en la sangre. En los seres humanos, la glucosa es almacenada en el hígado y los músculos, como glucógeno. La glucosa es absorbida en las células intestinales y rápidamente pasa a la circulación sanguínea. El metabolismo de la glucosa en los humanos está regulado por la insulina y glucagón. El exceso de glucosa en la sangre de forma crónica se conoce como diabetes.

Sacarosa: La sacarosa es un disacárido conformado por la unión de la glucosa y la fructosa. Se conoce comúnmente como azúcar de mesa. Se extrae sobre todo de la caña de azúcar o de la remolacha. Únicamente se presenta en las plantas, ya que es el compuesto que las éstas usan para transportar el exceso de precursores de azúcar desde las hojas hasta las otras partes de la misma. En el aparato digestivo de los seres humanos, la sacarosa se divide en glucosa y fructosa y son absorbidos cada uno por las células intestinales.

6.- Nutrición  - Composición de los alimentos

La forma de alimentación, la dieta y la nutrición son muy importantes en el mantenimiento de la salud y la prevención de las enfermedades. La selección y consumo de nuestros alimentos condiciona nuestro estado de salud, ya sea para bien o para mal. Las enfermedades que más afectan a los países en desarrollo son por falta de vitamina A, Hierro y Yodo, mientras que en los países desarrollados, las enfermedades llamadas “de la abundancia” son la obesidad, diabetes, enfermedad cardio vascular, hipertensión, osteoporosis, algunos cánceres. Entre el 50 y 66% de las causas, se encuentran los hábitos alimenticios.

 

Lo bueno de todo, es que se trata de un factor que está bajo nuestro control y que puede revertirse en base a fuerza de voluntad y deseo de hacerlo. Con todo lo que se conoce ahora al respecto, existe un gran consenso a nivel de los profesionales del área, respecto a que la elección más importante que puede hacer una persona para mejorar su salud, es la selección correcta de su dieta de manera que sea nutritiva y saludable.

 

Antes de avanzar, vamos a definir algunos conceptos importantes para comprender mejor lo que sigue:

 

Alimentación: Proceso mediante al cual ingerimos los alimentos de fuera del organismo

Alimentos: Sustancias y elementos que contiene los nutrientes que consumimos

Dieta: Cantidad y combinación de alimentos que se consumen habitualmente

Dietética: Estudia la forma de proporcionar a cada persona o grupos de personas, los alimentos necesarios para su desarrollo, según sus características propias de cada persona o grupo.

Metabolismo: Todos los procesos físicos y químicos del cuerpo que convierten o usan la energía, tales como: respiración, circulación sanguínea, regulación de la temperatura corporal, contracción muscular, digestión de alimentos y nutrientes, eliminación de los desechos a través de la orina y de las heces y funcionamiento del cerebro y los nervios. Estos procesos interrelacionados son la base de la vida a escala molecular, y permiten las diversas actividades de las células: crecer, reproducirse, mantener sus estructuras y responder a estímulos, entre otras.

Nutrición: Proceso mediante el cual, el cuerpo humano absorbe, transforma y utiliza las sustancias (nutrientes) que se encuentran en los alimentos, y que cumplen los siguientes 4 objetivos:

·         Suministrar energía para el funcionamiento

·         Formación, crecimiento y reparación de las estructuras corporales y reproducción

·         Regular los procesos metabólicos

·         Reducir riesgo de enfermedades

Nutrientes: Sustancia de estructura química conocida, esencial para el mantenimiento de la salud, que a diferencia de otras, no puede formarse o sintetizarse dentro de nuestro organismo y que debe ser aportada desde el exterior, a través de los alimentos y la dieta. Si no se ingieren en la cantidad adecuada (más o menos), se generan patologías. Por ese motivo, esas patologías solo se curan arreglando el desequilibrio por la mala ingesta. Muy importante, la selección, forma y cantidad (combinación de alimentos) en que ingerimos los nutrientes ayudan a prevenir enfermedades crónicas.

 

Justamente ahí hay un tema importante: Prácticamente son infinitas las formas en que podemos realizar combinaciones de alimentos. La selección de las óptimas para una verdadera dieta saludable, equilibrada y adecuada a nuestros requerimientos, es prácticamente un arte. Por ese motivo, hay una afirmación que dice que “la nutrición es una ciencia y la dietética es un arte”.

 

De entre todos los componentes que forman el cuerpo humano, solo 50 tienen el carácter de nutriente. Junto con la energía o las calorías obtenidas a partir de grasas, hidratos de carbono y proteínas, el hombre necesita ingerir con los alimentos, 2 ácidos grasos y 8 aminoácidos esenciales, unos 20 minerales y 13 vitaminas para mantener su dieta equilibrada. También es importante el agua y la fibra dietética o alimentaria.

 

Los alimentos se componen de la siguiente manera:

·         Macronutrientes: Hidratos de Carbono + Lípidos + Proteínas

·         Micronutrientes: Vitaminas + Minerales

·         Agua

·         Fibra dietética

·         Alcohol

7.- Beneficios de los frutos rojos o frutos del bosque

Los frutos rojos o frutos del bosque como ahora se los conoce, son frutas pequeñas (dulces o ácidas), intensamente coloreadas que se obtienen de arbustos o árboles de tamaño pequeño,  que en su forma original, crecen de forma silvestre en el bosque. Ahora los frutos rojos se han domesticado y ahora su producción es realizada en cultivos controlados y planificados prácticamente en todos los lugares del mundo.

 

Existe una gran cantidad de ellas (más de 100) entre comestibles, no comestibles e inclusive venenosas, pero las más conocidas y consumidas en la actualidad son las fresas o frutillas, los arándanos, las frambuesas, las moras, las guindas, las grosellas, las cerezas, la zarzamora y otras que se encuentran fácilmente en los mercados populares.

 

Es de mucho valor conocer cuáles son las propiedades nutricionales de cada una de ellas para descubrir qué beneficios nos aportan, e incorporarlas a nuestra dieta del día a día.

 

Por ejemplo, a continuación, vemos el aporte de calorías de algunos de los principales frutos rojos:

 

Principales beneficios: Los frutos rojos tienen una gran de beneficios para nuestro cuerpo y nuestra salud. Vamos a ver los principales, pero sobre todo el factor antioxidante. 


Antioxidantes

Los frutos rojos se destacan sobre las otras, por su alto poder antioxidante. ¿Qué son los antioxidantes? Loas antioxidantes son sustancias encargadas de neutralizar a los radicales libres y protegernos de sus efectos dañinos sobre nuestras células. Pero entonces, comencemos por definir ¿qué son los radicales libres?: Los radicales libres son molécula que se producen cada día en nuestro organismo como resultado de las reacciones biológicas de nuestras células. Si bien son necesarias para el funcionamiento celular, la acumulación diaria de radicales libres, puede acabar teniendo efectos negativos sobre nuestra salud, porque acaban afectando las membranas de nuestras células y su propio ADN.

 

Entonces una vez definido el concepto de radicales libres, se puede comentar que los antioxidantes reducen los efectos que dichos radicales libres ayudándonos por consecuencia a mejorar nuestra salud y reducir los efectos del envejecimiento, gracias a las sustancias que estos frutos contienen.

 

Uno de estos componentes importantes son los flavonoides, los cuales además de ser los responsables de su color, aroma y sabor de los frutos rojos, son muy valiosos en cuanto a sus efectos antioxidantes por supuesto, y también antiinflamatorios, antivirales, antialérgicos y su papel protector frente a enfermedades cardiovasculares, cáncer y diversas patologías, como la hipertensión arterial. Veamos un punteo de otros beneficios adicionales:

 

Estos son los beneficios de manera general, pero de manera específica, las frutas rojas tienen los siguientes aportes para la salud:

 

Fresas o frutillas

Vitaminas E, C, B y K, betacarotenos, folatos, potasio y fibra. Su toque ligeramente ácido es sin duda una de sus mayores propiedades para luchar frente a infecciones y el ataque de los radicales libres. Combaten la tensión alta y el ácido úrico, y es la fruta que mayor poder antioxidante tiene. Las fresas son unas frutas bien toleradas por los diabéticos, de forma que pueden incorporarlas a la dieta. Ayuda a combatir la anemia, a la vez que sus beneficios refrescantes las convierten en un alimento ideal en épocas de mayor calor (sobre todo en primavera y verano).

 

Moras

Son deliciosas, perfectas para aderezar desayunos e infinidad de platos. Nos ayudan a reducir el colesterol malo, cuidan de nuestros dientes y encías, son ricas en vitaminas C, vitamina E. Las moras son ideales en caso de niveles altos de grasas en sangre, ya que ayuda a reducir el colesterol LDL por un lado, y a aumentar el colesterol HDL por otro. Son buenas para prevenir enfermedades cardiovasculares, a la vez que reducen el riesgo de arteriosclerosis.

 

Arándanos rojos

Los arándanos rojos son unas frutas especialmente ricas en antioxidantes. Además, ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares, diferentes tipos de cáncer y son útiles para mejorar la circulación y combatir el colesterol. Estudios recientes le confieren al arándano rojo una alta acción bactericida tanto a nivel digestivo, así como a nivel preventivo contra las infecciones urinarias por la Escherichia coli (E. coli), un tipo de bacteria que se encuentra en los intestinos”.

 

Frambuesas

Las frambuesas son ricas en vitamina B, en vitamina C, folatos, fibra y flavonoides. Su principal facultad es su gran aporte en fibra, perfecto por ejemplo para nuestra digestión y para evitar el estreñimiento. Contiene además calcio, potasio, hierro y magnesio, y además atenúa los cólicos menstruales. Tiene grandes beneficios antioxidantes que ayuda a la hora de prevenir el cáncer, a la vez que neutraliza los diferentes efectos negativos de los radicales libres.

 

Grosellas Negras

La grosella negra es un tipo de baya que contiene una alta cantidad de nutrientes, como vitaminas, minerales y antioxidantes, ideales para mantener la salud de nuestro organismo en óptimas condiciones. La grosella negra contiene más cantidad de vitamina C que las naranja. Y es que hay muchas frutas que contienen más vitamina C que la famosa naranja. Y lo más importante que debemos recordar: beber su zumo mejora la funcionalidad de los vasos sanguíneos y el sistema vascular.

 

Cerezas

Son muchos los estudios que nos hablan de la propiedad que tienen las cerezas para reducir el ácido úrico y reducir el dolor de las articulaciones. Además de ser energética, dispone de un gran aporte de betacaroteno, vitamina C, son diuréticas y disponen de un buen aporte de potasio.

 

Ciruelas rojas

Las ciruelas son una de las frutas más conocidas contra el estreñimiento, sobre todo cuando son consumidas en ayunas antes del desayuno. Además, ayudan a regular la digestión. Si las tomamos secas, serán un gran remedio para curar nuestro estreñimiento. Esta fruta sabrosa que nos encanta tanto en mermelada como de forma natural, dispone de vitamina C, E, y una gran cantidad antioxidantes.

 

¿Cómo incorporar los frutos rojos a la dieta?

Hay muchas formas. Se las consumir como frutas simples o añadirlas a diferentes platos como ensaladas, salsas o zumo. También puedes consumir en forma de postre, helados, yogures, mermeladas, jaleas, deshidratadas e inclusive como polvos.

 

 

 

 


Como puedes ver, el consumo de frutos rojos del bosque, además de ser delicioso, es muy saludable para nuestro cuerpo y deberías comenzar a incorporarla cada vez más a tu dieta ordinaria...