UNIVERSIDAD DEL PUEBLO.
"LA CIENCIA AL SERVICIO DEL PUEBLO."

Cuenta el mito que nuestro proyecto surgió a partir de los esfuerzos de construcción de los Círculos de Lectura en el estado de Oaxaca. Sin embargo, ese proceso rizomático generado en interrelación con las diversas comunidades y colectivos del movimiento democrático magisterial, produjo una enorme expectativa producto de lo novedoso en sus formas y procesos para empujarlo, aunado a la autoridad moral de quienes lo fueron proponiendo.

Luego, la ansiedad por encontrar nuevos caminos que llevaran a nuestra lucha descolonizadora por otros derroteros, sobre todo en el área educativa tan gravemente dañada por las décadas de neoliberalismo que han asolado nuestra nación, propició que no cayéramos en el conformismo y se planteara la eterna interrogante del qué hacer después de.

Surge la vaga idea de generar de forma colectiva el proyecto de universidad todavía de manera difusa y se va creando con la ayuda de todos y partiendo de la histórica concepción de la universidad-pueblo planteada por Ernesto Che Guevara y que en nuestro país intentaron llevar a la práctica las históricas luchas de los años 70`y 80´ del siglo pasado. Procesos organizativos y de resistencia que fueron ferozmente reprimidos.

Sin embargo, basados en las condiciones concretas de la realidad oaxaqueña, su particular idiosincrasia, la gran experiencia acumulada y sus formas organizativas que desarrolló el movimiento democrático, para resistir el coloniaje y concretamente el modelo neoliberal; fue como se generó la idea-concepto-realidad para crear, construir y desarrollar el modelo y enfoque de lo que va siendo la UP.

Fue así como en una tarde que llovía a cántaros en el mes de mayo de 2019, surge la idea de construir un proyecto de educación superior alternativa, a partir de una charla casual en el zócalo de la ciudad de Oaxaca.

Luego entonces, en la primera semana de junio de 2019 damos inicio a la ardua y perenne tarea de esbozar nuestro proyecto, dando nombre, lema y logo a nuestra UP.

Solo éramos una idea en el mes de junio de 2019, cuando se aprobó en el Primer Congreso Nacional de Educación Alternativa para la Transformación Social, realizado en la vieja Casona de Xicoténcatl, antigua sede de la Cámara de Senadores, que Oaxaca y la Universidad del Pueblo fuéramos sede del 2º Congreso para el mes de noviembre de 2019. No existía un solo colectivo, mucho menos un plantel y ninguna carrera esbozada. Sudamos frío ante el reto, pero nos abocamos a asumir el compromiso de construir en firme nuestro lema: "la ciencia al servicio del pueblo".

A mediados de agosto de 2019, convocamos al primer taller de carácter organizativo bajo los temas de: pedagogía dialógica, pensamiento crítico y descolonización. En ese entonces acudieron a nuestro llamado un aproximado de 50 compañeros interesados, tanto en el temario como en el proyecto que apenas se dibujaba tenuemente.

Lo anterior, dio pauta para decidir que sí era posible seguir impulsando los esfuerzos organizativos. Lo que propició que se convocara al 2º taller, el cual se realizó en CEPOS-Sección 22. Por supuesto que ese taller fue la medición de lo que se veía venir y actualmente es la Universidad del Pueblo, ya que asistieron más de 200 compañeros interesados en formar parte de la utopía vuelta realidad para sus colectivos, comunidades y respectivos entornos de trabajo y convivencia social comunitaria. Inclusive, para el 7 y 8 de septiembre ya existían algunos planteles organizados (Capulálpam, Cacahuatepec, Jalapa y Chiltepec, entre otros). Asumiendo el reto de inscripciones sobre la marcha, buscando locales para albergar a los futuros estudiantes, organizando sus equipos sobre la base de perfiles y disposición al Tequio Pedagógico, concepto que surgió de la palabra del entonces presidente municipal de Capulálpam de Méndez, durante una reunión informativa.

Ese taller trajo como acuerdos, el iniciar labores el 23 de septiembre de 2019 y a partir de ahí, cada plantel, hoy denominados Unidades Académicas, debería irse incorporando acorde a sus condiciones y a la par, definiendo las carreras que ofertaría dependiendo de su grado y capacidad de desarrollo organizativo y pedagógico.

La meta, llegar a mediados de noviembre funcionando de manera plena y a todo vapor, cuestión que se logró y se reflejó con un éxito rotundo en el marco del 2º Congreso Nacional de Educación Alternativa para la Transformación Socio Ambiental, donde acudieron casi 2000 delegados de nuestra UP.

En tal contexto, se fueron realizando las sucesivas inauguraciones de las distintas sedes, con música, calenda, fiesta y algarabía; tal como acostumbramos los oaxaqueños desde tiempos milenarios.

Actualmente, producto del proceso de consolidación, las circunstancias nos obligan a tomar este desafío de proyecto de educación superior alternativa (intercultural), como un proceso de construcción que exige una alta disciplina, seriedad y lo mejor de nuestra capacidad teórica-práctica de construcción y elaboración académica-pedagógica.

Nuevos horizontes se abren, nuevas batallas se inician, el olvido levanta su bruma y aparece una luz de esperanza. Y así, la UP va abriendo las brechas del futuro para los ninguneados, olvidados y periféricos, cultivando amalgamas de cultura, ciencia y arte para que el pueblo coseche la alegría.

Surgimos a partir del Tequio Pedagógico para así desterrar el olvido venenoso y con la ciencia al servicio del pueblo, retiemble nuestro caminar como el preámbulo de lo tangible, de la necesidad vuelta locura que va erigiendo lo imposible.

La UP es la razón construyendo lo ineludible, razón de locos afrontando el desafío de construir un proyecto trashumante, como pista de aterrizaje de la congruencia vuelta práctica voraz, de un pasado que crispa y genera colisiones. Esa colisión es la Universidad del Pueblo.